Visiones del Ser Humano: Racionalista, Cristiana y Marxista

1. Concepción Racionalista

El término racionalismo posee pluralidad de sentidos, es el que sirve para hacer referencia a aquellas filosofías que definen al ser humano como racional y además piensan que la razón es el instrumento más adecuado que posee el ser humano para resolver sus problemas. Aunque el nombre que se utiliza es para designar a una corriente filosófica moderna que surge en el siglo XVII con el pensador francés Descartes, la filosofía griega es también racionalista.

1.1 El ser humano

Para los filósofos griegos, los distintivos específicos del ser humano son la palabra y la razón. La razón le permite al ser humano pensar la realidad adecuadamente, para conocer el mundo y para conocer su propia vida, la filosofía y la ciencia. La palabra le sirve al ser humano para poner en común las ideas que posee con las de los demás y llegar a acuerdos a través del diálogo. Al ser racional, el ser humano es el único del universo que no se contenta con captar y vivir la realidad tal como es, sino que puede transformarla e imaginar y poner en práctica formas nuevas de adaptación a su entorno y modelos diferentes de vida social. Tiene en común con los demás animales la tendencia a alimentarse, protegerse y reproducirse, pero a diferencia de ellos, no se encuentra sometido al medio; posee una cierta libertad. Las concepciones racionalistas del ser humano son mayoritariamente dualistas: conciben al ser humano como compuesto de dos realidades irreconciliables (cuerpo y alma), una de las cuales (el alma) es superior a la otra. Platón hablará del cuerpo como cárcel del alma. Para los racionalistas, la dimensión afectiva del ser humano, sus sentimientos, emociones y pasiones, deben estar subordinadas a la razón y deben acomodarse a sus exigencias. Además de la superioridad del alma sobre el cuerpo, hay 3 motivos:

1) El cuerpo, de donde proceden los sentimientos y las pasiones, es fuente de error, pueden falsificar la percepción de la realidad. Hay pensadores racionalistas que llegan a despreciar totalmente el papel del cuerpo. Platón y los estoicos son un claro ejemplo de esta percepción.

2) Los sentimientos y las pasiones no son racionales y por eso pueden hacer que el ser humano se comporte contrariamente a lo que le dicta su razón. Hay autores como Descartes, que llegan a considerar los sentimientos despectivamente como estados confusos de la mente.

3) Los sentimientos y las pasiones son subjetivos, los individuos se diferencian por sus relaciones afectivas diferentes, en situaciones idénticas. Hay pensadores racionalistas para quienes los deseos humanos son fuente de conflicto y la afectividad los divide.

1.2 La sociabilidad humana

El ser humano es un animal social (diría Aristóteles). Ningún individuo es autosuficiente, necesita por naturaleza vivir en sociedad. Aristóteles ve la sociedad como un todo, como un organismo del que el individuo forma parte; separado del organismo no hay posibilidad de supervivencia. Los estoicos y Spinoza, los que obran de manera racional viven en armonía. La sociabilidad humana se basa en 2 argumentos:

  • a) Ningún individuo es autosuficiente para satisfacer sus necesidades.
  • b) El ser humano es el más sociable gracias a la comunicación que se hace posible por el lenguaje y que permite llegar a acuerdos para fundar sociedades.

1.3 La libertad humana

La libertad es la capacidad de tomar decisiones autónomamente, y para los pensadores racionalistas está relacionada con la racionalidad humana. Al ser racional, puede conocer el mundo, la naturaleza, y gracias a este conocimiento puede manipularla y, dentro de unos límites, ponerla a su servicio liberándose del determinismo. Utilizando la razón, los seres humanos pueden organizar las sociedades de las formas que les parezca más adecuada para garantizar la convivencia de todos. La razón le permite juzgar sobre lo bueno y lo malo, le permite orientarse en la vida personalmente, llegar a ser dueño de su destino, la racionalidad en el mundo, como dijo Kant.

2. Concepción Cristiana

El ser humano ha sido creado por Dios dotado de la razón, de voluntad libre y posibilidad de creer (fe).

2.1 El ser humano ha sido creado por Dios

El Génesis afirma que Dios dijo “hágase” y el ser humano apareció en el mundo. Sin embargo, la aparición de las teorías evolucionistas ha llevado a muchos estudiosos cristianos a interpretarlo como un hacer a partir de algo ya existente. La creación divina supone que el ser humano:

  • 1) Posee una existencia limitada que depende de un Dios eterno, creador y omnipotente.
  • 2) Creado a imagen de Dios, posee un alma espiritual.
  • 3) El ser humano es único e irremplazable, es cuerpo y alma. El cuerpo (mente) y el alma (espíritu) son los elementos esenciales de la persona humana. El ser humano es un ser consciente y racional con pensamiento, afectividad y consiguiente conducta.
  • 4) Su destino es la resurrección después de la muerte, por lo que es capaz de participar por voluntad divina en la vida misma de un Dios creador, redentor y santificador.
  • 5) Su felicidad verdadera y la finalidad solo se alcanza después de la muerte, cuando pase a vivir en un cielo nuevo y tierra nueva. Esta felicidad eterna se alcanza por medio de la obediencia a los preceptos de la fe transmitidos a través de las enseñanzas de la Iglesia.

2.2 La libertad humana

El ser humano está dotado de razón y de voluntad. Gracias a ellas, el ser humano puede liberarse de influencias o impulsos interiores y exteriores del destino o la fatalidad y elegir cómo va a vivir su vida. Ser libre es ser responsable de sí mismo y de los demás. La autonomía de la libertad humana a la hora de elegir cómo actuar es parcial.

3. Concepción Marxista

Marx, cuenta en su obra una nueva ciencia de la historia e incluye una visión concreta del ser humano.

3.1 El ser humano

El ser humano pertenece a la naturaleza material. Su posición es monista. El ser humano se define porque es capaz de producir lo que necesita para subsistir, cosa que logra a través de la transformación de los procesos naturales porque, gracias a su imaginación, iniciativa y voluntad, es capaz de producir medios propios de subsistencia a través del trabajo. El trabajo desarrolla al ser humano y transforma la naturaleza. Dependiendo de cómo se relacionen los seres humanos con los medios de producción, los humanos se relacionan de un modo concreto, piensan de una determinada manera, e incluso organizan su vida en sociedad como reflejo de esta relación. Dependiendo de cómo se relacionen los seres humanos con los medios de producción, el trabajo puede servir para que vivan para sí mismos, se relacionen fraternalmente y vivan también en armonía, o puede servir para que vivan esclavizados, para otros alienados.

3.2 La sociabilidad humana

Los seres humanos han vivido siempre en sociedad. Marx hasta su época, los seres humanos han vivido en sociedad divididos en 2 clases opuestas. La razón de esta división y de la lucha de clases se encuentra en la relación que los humanos han mantenido con los medios de producción: esto es lo que ha llevado a que los seres humanos siempre hayan estado divididos en clases sociales, opuestas y en lucha y dominados por una ideología, o conjunto de ideas inventadas por los propietarios de los medios de producción para ocultar sus intereses. Las clases superiores siempre han legitimado mediante el aparato la opresión y explotación de las clases inferiores. El trabajo solo servirá para realizar a los seres humanos cuando se produzca la abolición de la propiedad privada de los medios de producción.

3.3 La libertad humana

El marxismo dice que no hay libertad individual si no hay libertad colectiva, no es posible la libertad de uno sin la libertad de todos. La auténtica libertad se dará cuando los seres humanos dominen colectivamente los medios de producción y produzcan los bienes capaces de satisfacer adecuadamente las necesidades de todos (comunismo).