La Transición Española a la Democracia (1975-1982)
Del Franquismo a la Monarquía Parlamentaria
Tras la muerte de Franco en noviembre de 1975, España inició un complejo proceso de transición política que culminó con la consolidación de una monarquía parlamentaria. Este periodo, que abarca desde la coronación del Rey Juan Carlos I hasta la victoria electoral del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en 1982, sentó las bases de la democracia actual.
La Constitución de 1978, aún vigente, estableció un nuevo marco legal y político. Tras su promulgación, el PSOE gobernó durante 14 años (1982-1996), seguido del Partido Popular (PP) durante 8 años (1996-2004), y nuevamente el PSOE desde 2004. Durante este tiempo, España modernizó sus estructuras política y económica, consolidando el estado de bienestar.
La Crisis Económica como Telón de Fondo
La transición coincidió con la crisis internacional del petróleo de 1973, que impactó fuertemente en la economía española. La incertidumbre política agravó la situación, generando:
- Déficit exterior: Disminución de ingresos (inversiones y remesas) y aumento de los pagos, especialmente por la importación de petróleo.
- Inflación: Incremento de los costes de producción.
- Caída de beneficios empresariales: Afectando especialmente a las empresas más débiles.
- Aumento del paro: Influenciado por el retorno de emigrantes.
Esta crisis, que se prolongó hasta 1985, dificultó la transición. Algunos sectores sociales, erróneamente, atribuyeron la crisis a la democracia, añorando la aparente prosperidad económica del franquismo en los años sesenta.
Inicios de la Transición (1975-1978)
Las Tres Alternativas
Tras la muerte de Franco, surgieron tres posturas:
- Continuidad del régimen.
- Reforma desde las instituciones hacia la democratización.
- Ruptura con el pasado y construcción de un nuevo sistema democrático.
El 22 de noviembre de 1975, Juan Carlos de Borbón fue proclamado rey. Arias Navarro, continuista del régimen, fue designado presidente del gobierno. Su programa reformista, insuficiente para la oposición, proponía leyes restrictivas que no contemplaban la existencia de partidos políticos.
Las Movilizaciones Populares
La oposición, unida en la Coordinación Democrática, exigía la ruptura democrática, un gobierno provisional y elecciones. Reclamaban libertades democráticas y amnistía para los presos políticos. Las crecientes movilizaciones y huelgas generales, especialmente en Cataluña y País Vasco, fueron respondidas con represión.
La tensión política polarizó al franquismo entre inmovilistas y reformistas. Estos últimos, con el apoyo del rey, impulsaron la dimisión de Arias Navarro. En julio de 1976, Adolfo Suárez fue nombrado presidente del gobierno.
Adolfo Suárez y el Desmantelamiento del Franquismo
Suárez buscó anular la resistencia inmovilista y atraer a la oposición. Inició contactos con las fuerzas democráticas, promulgó un indulto y propuso la Ley de Reforma Política (LRP). Esta ley reconocía derechos fundamentales, otorgaba el poder legislativo a la representación popular y establecía un sistema electoral democrático.
Tras negociaciones con los procuradores franquistas, la LRP fue aprobada en las Cortes y refrendada en diciembre de 1976 con un 81% de votos a favor.
La Construcción de la Democracia
Hacia las Primeras Elecciones
Se promulgaron decretos que garantizaban la libertad sindical, la legalización de partidos políticos y la amnistía. La legalización del Partido Comunista de España (PCE) en abril de 1977, a pesar de la oposición de sectores inmovilistas y del ejército, fue un paso crucial.
Las elecciones generales de junio de 1977 dieron la victoria a la Unión de Centro Democrático (UCD) de Suárez.
La Constitución de 1978
Las Cortes, elegidas democráticamente, redactaron la Constitución. Buscando un amplio consenso, se creó una ponencia con representantes de todos los partidos (excepto los nacionalistas vascos). La Constitución, de carácter progresista, fue aprobada en referéndum el 6 de diciembre de 1978.
La Constitución define a España como un Estado social y democrático de derecho, con forma de monarquía parlamentaria. Abolió la pena de muerte, garantizó derechos y libertades, y estableció los principios de la política social y económica.
Las Preautonomías
Se concedieron preautonomías a Cataluña (1977), País Vasco (1978) y Galicia (1978).
El Contexto de Crisis Internacional
La crisis del petróleo provocó inflación y un aumento del déficit comercial. La crisis industrial, agravada por el aumento de costes y la dependencia de sectores como la siderurgia y la construcción naval, llevó a la firma de los Pactos de la Moncloa en 1977.
Estos pactos incluían medidas para reducir la inflación (moderación salarial, racionalización de la energía, devaluación de la peseta), una reforma fiscal con la introducción del IRPF, y una reforma de la Seguridad Social que extendió el seguro de desempleo e incrementó las pensiones.