SAN AGUSTÍN
Como resultado del encuentro entre filosofía y cristianismo surge en el siglo IV el
problema de las relaciones entre la razón y la fe. Mientras la filosofía está guiada por
la razón, el cristianismo procede de la fe, y, puesto que pueden diferir, hay que deslindar
lo que corresponde a cada una de ellas. En san Agustín no aparece una demarcación
clara entre una y otra. Considera que, en un primer momento, la razón ayuda al hombre
a alcanzar la fe, pero una vez en posesión de la verdad Sigue leyendo