Ante este hecho, los intelectuales abogan por una reforma general. La literatura, en concreto, opta por dos caminos dentro del denominador común del inconformismo y del deseo de cambio literario:
Modernismo, que se inclina por la evasión temática y la preocupación por la forma y la generación del 98, que plasma su preocupación por España con un estilo mucho más sencillo. Estos dos movimientos convivirán y tendrán su apogeo en las dos primeras décadas del siglo.
Modernismo:
El Modernismo Sigue leyendo