Estudio de el árbol de la ciencia de Pío Baroja, 1911.
1. Ideología y pesimismo existencial
Su concepción de la vida es inseparable de su temperamento: sus ideas sobre el hombre y el mundo se describen a la perfección en la línea del pesimismo existencial.
Era escéptico en cuanto a religión (recuérdese su “dogmatofagia”). Tampoco deja de serlo en política e incluso cree que la verdad científica, matemática, está en entredicho. Para él el mundo carece de sentido. La vida resulta absurda Sigue leyendo