La Guerra Civil española (1936-1939) interrumpió bruscamente la diversidad y riqueza de las líneas poéticas que se manifestaban en España. La muerte de Federico García Lorca y el exilio de poetas como Juan Ramón Jiménez, Jorge Guillén y Rafael Alberti marcaron este periodo. La poesía en el exilio reflejaba un profundo sentimiento de nostalgia por la patria perdida.
La obra de Miguel Hernández actúa como puente entre la Generación del 27 y los poetas de la posguerra. Entre sus obras destacan: Sigue leyendo