San Agustín: Filosofía, Fe y la Búsqueda de la Felicidad

Libertad y el Problema del Mal

Respecto a la **libertad**, San Agustín tiene una visión teológica. Dios no solo creó al hombre, sino que también le otorgó libertad. Para San Agustín, el hombre hizo un mal uso de su libertad y, como resultado, cometió pecado. Debido al **pecado original**, el hombre tiende a actuar mal, ya que el cuerpo ha dominado el alma. Para San Agustín, la elección y la libertad no son conceptos idénticos. La elección es la capacidad de elegir, mientras que la libertad es la capacidad de hacer el bien. Dado que el cuerpo ha dominado el alma, para recuperar la libertad, el hombre necesita la gracia y la voluntad de Dios, es decir, para actuar bien y, en consecuencia, ser feliz. Cuando el hombre ama a Dios, actúa correctamente y es feliz. Por el contrario, cuando se aleja de Dios, genera **mal moral** y será desdichado. Finalmente, San Agustín considera que el mal es la ausencia del bien y del ser. El mal puede ser de dos tipos: el **mal físico**, que se basa en la naturaleza y es consecuencia de la limitación de los seres, es decir, de la corrupción; y el **mal moral**, que proviene del uso incorrecto de la elección.

Filosofía de la Historia

Cuando Alarico saqueó Roma en el año 410, provocando la caída del Imperio Romano, San Agustín defendió a los cristianos, quienes fueron culpados, y reflexionó sobre el sentido de la historia. Dejó de lado la visión cíclica y explicó el concepto de **historia lineal**, donde todo tiene una razón a lo largo de la historia. San Agustín dice que Dios es quien pone en marcha la historia y está en contacto con el hombre a lo largo de ella. En cualquier sociedad, se mezclan dos ciudades: por un lado, la **ciudad terrenal**, donde las personas se aman a sí mismas más que a Dios; y por otro lado, la **ciudad de Dios**, donde las personas aman a Dios por encima de todo. Estas son maneras de estar en el mundo, que pueden cambiar: aunque en un momento se esté en la ciudad de Dios, en otro se puede ver a sí mismo en la ciudad terrenal. La lucha entre estas dos ciudades o amores continuará hasta el final de los tiempos, hasta la victoria definitiva de la ciudad de Dios. Finalmente, aunque históricamente se hayan hecho interpretaciones de este tipo, no es correcto equiparar la ciudad terrenal con el Estado ni la ciudad de Dios con la Iglesia.

Felicidad y la Posesión de Dios

San Agustín fue un pensador cristiano del Imperio Romano que vivió en los siglos IV y V, considerado el padre del **neoplatonismo**. Su principal preocupación era encontrar la verdad que satisficiera su corazón para poder alcanzar la felicidad. Sin embargo, la felicidad no puede basarse en bienes perecederos, sino en bienes duraderos. Esto se debe a que, al perderlos, viviríamos con el temor de perderlos o insatisfechos, lo que nos impediría ser felices. Según San Agustín, para ser feliz es necesario poseer a Dios, y quien posee a Dios es aquel que vive correctamente, cumple la voluntad de Dios y es capaz de transformar su alma de un estado impuro a uno puro. En otras palabras, la felicidad consiste en alcanzar la **verdad absoluta**, que trasciende todas las verdades particulares: Dios. Por otro lado, San Agustín reúne argumentos contra los escépticos o académicos. Según él, ellos no consiguen aquello que desean en la vida feliz; por lo tanto, no pueden ser felices. Además, afirma que la tesis de los escépticos es contradictoria, ya que ellos sostienen que no podemos conocer nada con certeza. Si esto fuera cierto, tampoco podrían afirmar dicha tesis. Finalmente, destaca la célebre expresión de San Agustín: *”si fallor, sum”* (si me equivoco, entonces existo). A través de esta declaración, se demuestra que el escepticismo absoluto es imposible, que la verdad existe y que el conocimiento es posible.

Fe y Razón

San Agustín fue un pensador cristiano del Imperio Romano en los siglos IV y V, y es conocido como el padre del neoplatonismo. El eje central del pensamiento de San Agustín es Dios. En un sentido estricto, San Agustín no es un filósofo, ya que los filósofos se basan únicamente en la razón. Pero San Agustín también acepta la **fe** como fuente de conocimiento. En la fe, se acepta la revelación de Dios. Los cristianos intentan entender y racionalizar la fe. La fe no debe desechar la razón, y la razón no debe expulsar la fe: *“creo para entender, entiendo para creer”*. San Agustín no intenta establecer límites entre la razón y la fe, sino que busca iluminar la verdad cristiana a través de ambas. Es decir, la razón y la fe trabajan en conjunto: por un lado, la razón ayuda al hombre a alcanzar la fe, y luego, la fe guía e ilumina la razón. La fe da luz (perfección) a la razón, y al mismo tiempo, la razón ayuda a esclarecer los contenidos de la fe (dogma). Hoy en día, al aceptar la autonomía y las limitaciones de la razón, la explicación de San Agustín no nos parece satisfactoria. Al tomar la razón como verdad, no necesitamos la verdad de la fe; la razón nos basta.

Análisis de Textos de Descartes

Texto Examinado: Resumen

Descartes afirma que la existencia del yo es indudable, ya que aunque se pueda dudar de todo lo demás, el acto de pensar confirma la existencia del yo.

Texto Examinado: Introducción

En este fragmento del “Discurso del Método”, Descartes sostiene que la primera verdad indudable es la existencia del yo, alcanzada mediante la duda metódica.

Texto Examinado: Argumento a Favor

Descartes argumenta que el acto de pensar, incluso si se duda, prueba la existencia del yo. Este razonamiento es lógico y claro; al dudar, el yo reafirma su existencia, ya que no se puede dudar sin pensar y, por ende, existir.

Texto Examinado: Argumento en Contra

Una objeción podría ser que este razonamiento es circular, asumiendo la existencia del yo para probar su existencia a través del pensamiento. Además, esta premisa puede ser limitada al excluir formas de existencia no basadas en el pensamiento.

Texto Examinado: Reflexión Personal

Considero que la argumentación de Descartes es sólida y establece una base para la filosofía moderna, aunque la crítica del razonamiento circular es válida. La tesis del “cogito, ergo sum” sigue siendo fundamental, pero es necesario reflexionar sobre sus limitaciones y posibles reinterpretaciones.

Texto Conocido: Resumen

Descartes concluye que el yo es una sustancia cuya esencia es pensar y que es distinta del cuerpo, pudiendo existir independientemente de él.

Texto Conocido: Introducción

En este fragmento del “Discurso del Método”, Descartes reflexiona sobre la naturaleza del yo, concluyendo que es una sustancia pensante y distinta del cuerpo.

Texto Conocido: Argumento a Favor

Descartes argumenta que el yo, o alma, es una sustancia cuya esencia es el pensamiento y no depende del cuerpo. Esto es lógico, ya que se puede concebir la existencia del yo sin la del cuerpo.

Texto Conocido: Argumento en Contra

Una objeción podría ser que esta separación entre cuerpo y alma puede ser excesiva, ignorando la interdependencia entre mente y cuerpo observada en la experiencia cotidiana y la ciencia moderna.

Texto Conocido: Reflexión Personal

Encuentro que la argumentación de Descartes es poderosa y relevante, aunque la crítica de la separación radical entre cuerpo y alma es válida. Es esencial considerar la conexión entre mente y cuerpo en la comprensión de la existencia humana.

Texto Pero: Resumen

Descartes sostiene que la dificultad para conocer a Dios y al alma se debe a que muchos no elevan su pensamiento más allá de lo sensible y creen que todo conocimiento debe provenir de los sentidos.

Texto Pero: Introducción

En este fragmento del “Discurso del Método”, Descartes defiende la tesis de que algunas ideas, como las de Dios y el alma, no pueden entenderse mediante la imaginación, sino solo por la razón.

Texto Pero: Argumento a Favor

Descartes argumenta que ciertas ideas son innatas y no proceden de la experiencia sensible. Esto es coherente con su filosofía racionalista, que valora la razón como fuente de conocimiento.

Texto Pero: Argumento en Contra

Una objeción podría ser que esta distinción entre ideas innatas y derivadas de la experiencia puede ser arbitraria y difícil de justificar, dado que todo conocimiento parece influenciado por la experiencia.

Texto Pero: Reflexión Personal

Considero que la tesis de Descartes es interesante y relevante, aunque la crítica de la distinción entre ideas innatas y derivadas de la experiencia es válida. Es importante reflexionar sobre la relación entre razón y experiencia en el conocimiento humano.