Garcilaso de la Vega (Toledo 1501- Niza 1536). Es el mejor ejemplo de caballero renacentista. En su breve vida conjuga armas y letras siendo una de las cumbres fundamentales de nuestra literatura. Cortesano y soldado en la corte de Carlos V. Murió al ser herido en el asalto a la fortaleza de Muy en Provenza. Su obra está compuesta por: una epístola, dos elegías, tres églogas, cinco canciones, ocho coplas castellanas y 40 sonetos. Además escribe algunas odas latinas. Demuestra una sensibilidad excepcional y la asimilación de influencias diversas que van desde los clásicos grecolatinos a los poetas italianos de su momento (Virgilio, Petrarca, y Sannazaro). Obra poética. Su obra gira preferentemente en torno al tema del amor.
La figura principal de su poesía amorosa es Isabel Freyre que inspiro sus versos más bellos y dolorosos y que reflejan dos acontecimientos: el casamiento de Isabel y su muerte. La influencia de Petrarca es clara en el análisis de las emociones y en la actitud de melancolía que oscila entre la amargura y la ternura ante un amor que nunca podrá ser satisfecho. Otros temas que previenen también de Petrarca. La belleza del mundo exterior; primero de la belleza femenina y después del paisaje. El mundo bucólico. La naturaleza que se presenta como el símbolo de perfección del mundo natural, remanso de paz y armónía. Se trata del “locus amoenus” tópico latino de la belleza campestre. En este marco convencional el rio será “dulce y claro”, el viento “fresco, manso y amoroso”, el suelo “verde prado, de verde sombre lleno” y las aguas “corrientes puras y cristalinas.
Estilo. Se caracteriza por su musicalidad, elegancia y sobriedad con la que se mantiene alejado de toda afectación y retorica. Garcilaso asimila magistralmente las fuentes y las influencias; hasta los tópicos mas usados por todos los poetas de la época adquieren en él una nueva dimensión:
Sobrepasa siempre a los modelos utilizados
Supera a Petrarca en la autenticidad de la emoción, la sinceridad y el calor humano que cierran sus versos; se liberara también del tópico latino sobre el sentimiento de la naturaleza y en ella verterá su drama humano. Lenguaje. El lenguaje de Garcilaso se caracteriza por su naturalidad y la selección de vocablos dentro de lo natural, lo usual e incluso lo popular cuando lo cree necesario.
Obra
Las églogas son la creación más perfecta de la poesía de Garcilaso pues supo en la época pastoril su voz más sincera y personal. En la égloga 1ª intervienen dos pastores: Salicio que lamenta los desprecios de Galatea y el 2º Nemoroso que llora la muerte de Elisa; se trata, por tanto, del tema del amor frustrado por la infidelidad o indiferencia de la amada o por su muerte. El tema que expone el autor en boca de Salicio es la armónía del hombre con el universo. Su amor no ha sido correspondido y por lo tanto la ley de la naturaleza se romperá: el rio ya no provee el agua para calmar su sed y la del ganado, el calor es tórrido y la naturaleza deja de actuar como se esperaba. Nemoroso ha sido correspondido en su amor por consiguiente se ha cumplido el sentimiento de su existencia, los dos seres se han fundido en el universo y la alegría y la paz se manifiestan en la uníón con la belleza terrenal.Égloga 3
Supone la culminación técnica de Garcilaso. Está compuesta por 47 octavas reales (8 versos endecasílabos) que por su carácter estrofa elevada y noble era adecuada para la épica y la lírica de expresión del sentimiento.Argumento
4 ninfas (divinidades campestres con figuras de muchachas hermosas que habitan los ríos, las fuentes y los bosques están bordando a orillas del Tajo 4 tapices que representan 4 tragedias. Las 3 primeras bordan tres mitos clásicos; la 4ª la historia de Elisa y Nemoroso. El primer mito es el de Orfeo y Eurídice.
El segundo mito es el de Apolo que atravesado por las flechas de Cupido que despiertan en él el amor, persigue a Dafne para seducirla. Cuando va a alcanzarla el padre de ésta la transforma en laurel para librarla del acoso. El tercer mito es el de Adonis que apasionado por la caza murió corneado por un jabalí y Venus lo llora desconsoladamente. La cuarta ninfa abandona los temas mitológicos y borda en su tela el paso del tajo por la ciudad de Toledo y el fértil valle regado por el rio. En este marco se ve a las diosas llorando la muerte de una ninfa. Se trata de Elisa (que encarna a Isabel Freire llorada por Nemoroso, el pastor que ya represento a Garcilaso en la primera égloga. El aprovechamiento de los recursos expresivos, entre ellos el hipérbaton, y el epíteto, etc y de las innovaciones técnicas, además de la emoción que respiran sus versos hacen que estemos ante un poeta cuyo magisterio llega integro hasta nuestros días.