II. Bienio de Gobiernos de Azaña. 1931-1933
Se formó el primer gobierno oficial de la República, que sustituyó al provisional. Se integró con partidos republicanos de izquierda y los socialistas del PSOE. Manuel Azaña fue el Jefe de Gobierno y Alcalá Zamora el Presidente de la República. Diseñaron un amplio programa de reformas.
Reformas Laborales
Promovidas por el PSOE, de la mano del ministro de trabajo Largo Caballero, para mejorar las condiciones de los obreros y campesinos.
- Ley de Contratos: firma de contratos legales entre patronos y trabajadores.
- La Negociación Colectiva: para evitar la conflictividad.
- La Ley de Jurados Mixtos: permitió la resolución de conflictos laborales por la Administración, con representantes empresariales y sindicales.
- La Ley de Términos Municipales: obligaba a los terratenientes a contratar a los jornaleros en paro de su localidad.
- Ley de Laboreo Forzoso: obligaba a los propietarios rurales a cultivar las tierras.
- Ley de Accidentes de Trabajo.
- Jornada de 8 horas para los jornaleros del campo.
Estas reformas pretendían desarrollar el campo, reducir el paro agrario y aumentar el rendimiento agrícola, pero fueron mal recibidas por empresarios y terratenientes. Los anarquistas de la CNT las consideraron poco revolucionarias y organizaron huelgas, ocupaciones de fincas y desórdenes públicos.
Reformas Militares
Llevadas a cabo por Azaña para modernizar el ejército, reducir el número de oficiales y evitar los pronunciamientos. Se implementaron:
- Retiro voluntario “Ley de Azaña”.
- Cierre de la Academia Militar de Zaragoza, dirigida por Franco.
- Reforma de la jerarquía militar.
- Creación de la Guardia de Asalto.
Los cuerpos más modernos aceptaron las reformas, pero los tradicionales, como el sector africanista, se sintieron perjudicados.
Política Religiosa
Se intentó establecer un Estado laico, separado de la influencia de la Iglesia, limitando su poder. Se decretó:
- Fin del presupuesto para el culto y clero.
- Disolución de La Campaña de Jesús.
- Reconocimiento de matrimonios civiles y el divorcio.
- Los bienes, inmuebles y edificios de la iglesia pasaron a ser propiedad del Estado.
Esto incrementó el rechazo de la Iglesia hacia la República y distanció a los católicos.
Reforma Autonómica
Cataluña
Se redactó el “Estatuto de Nuria”, aprobado en 1932, creando la Generalitat y un Parlamento catalán. Sin embargo, muchos nacionalistas quedaron insatisfechos al no definirse Cataluña como nación. Se otorgaron competencias sobre cultura, lengua, obras públicas y orden público, reservándose el gobierno español el derecho a suspender el Estatuto. El gobierno catalán fue ejercido por Esquerra Republicana, con Maciá y Companys como presidentes.
País Vasco
Elaboraron el “Estatuto de Estella”, aprobado al inicio de la Guerra Civil, con José Antonio Aguirre (PNV) como primer lendakari. Otros estatutos regionales, como el de Galicia impulsado por el ORGA de Casares Quiroga, se paralizaron por la guerra.
Reforma Educativa
Se buscó erradicar el analfabetismo y el atraso cultural, potenciando la enseñanza primaria. La educación católica dejó de ser obligatoria, adoptándose un modelo mixto, laico, obligatorio y gratuito. Se promovieron las Misiones Pedagógicas, como La Barraca de García Lorca.
Reforma Agraria
Objetivos: repartir tierras entre jornaleros, reducir latifundios y mejorar la situación social del campo, creando una clase media rural. Se creó el IRA (Instituto de Reforma Agraria) para gestionar la expropiación, previa indemnización, de tierras no trabajadas. Las tierras se repartirían en arriendo o alquiler. La reforma fue lenta, generando revueltas campesinas y la oposición de propietarios y partidos de derecha.
Desarrollo de la Guerra Civil
El avance hacia Madrid (Julio 1936 – Marzo 1937)
El objetivo principal era la toma rápida de Madrid, pero los golpistas fueron detenidos. Mola conquistó Irún y San Sebastián, aislando el norte. Franco avanzó desde el Estrecho, con apoyo italiano y alemán, hasta Toledo. Madrid resistió gracias a las Brigadas Internacionales, armamento ruso y milicias. La guerra se convirtió en una de desgaste.
La ocupación del norte (Abril – Octubre 1937)
Franco se centró en la cornisa cantábrica. En 1937, la Legión Cóndor bombardeó Guernica. La República perdió puertos, minas y metalurgia del norte. Las ofensivas republicanas en Brunete y Belchite fracasaron.
El avance hacia el Mediterráneo (Octubre 1937 – Noviembre 1938)
Se reformó el ejército republicano, creando el Ejército Popular. La batalla de Teruel fue una derrota republicana. Franco avanzó hacia el Mediterráneo, aislando Cataluña. La batalla del Ebro, el último intento republicano, resultó en una derrota devastadora.
El final de la guerra (Noviembre 1938 – Abril 1939)
Franco ocupó Cataluña, provocando un éxodo masivo. Solo quedaron la zona centro y parte del Mediterráneo. Hubo divisiones internas entre quienes querían negociar la paz y quienes deseaban continuar la guerra. Casado se sublevó y negoció con Franco, quien impuso la rendición incondicional. El 1 de abril de 1939, Franco declaró el fin de la guerra.