4 la mortalidad
La mortalidad hace referencia al número de fallecimientos habidos en un momento y lugar determinado.
A-. Conceptos y definiciones:
Para hablar de la mortalidad debemos recurrir al concepto de tasa bruta de mortalidad y es el número de fallecimientos en un lugar y año concreto en relación con el total de la población existente. Se expresa en tantos por mil. Para hallar esta tasa utilizaremos la siguiente fórmula:
Sin embargo, es mucho más significativa la tasa de mortalidad infantil que será la relación entre el número de niños fallecidos menores de un año con todos lo nacidos durante ese año. Se expresa en tantos por mil Finalmente hablaremos de la esperanza de vida.
La esperanza de vida es el número de años que puede vivir una persona que nace en un país determinado. Esta será diferente para los hombres y las mujeres, siendo mayor para las mujeres. La tasa bruta de mortalidad en 2012 es de 8,58 0/00 y la de mortalidad infantil 3,06 0/00 2009. La esperanza de vida es de 85,5 años para las mujeres y 79,5 años para los hombres
B-. Evolución histórica:
En la segunda mitad del Siglo XIX y principios del Siglo XX la mortalidad española rondaba al 30‰.
Las causas de estas altas tasas de mortalidad son: el bajo nivel de vida y las precarias condiciones médicas y sanitarias.
El bajo nivel de vida: La dieta alimenticia era escasa, y desequilibrada por falta de proteínas (el pan era el alimento básico y escaseaban la carne, la leche y los huevos). Como consecuencia, la mayoría de la población estaba malnutrida y debilitada. Precarias condiciones médicas y sanitarias: las enfermedades infecciosas transmitidas a través del aire (tuberculosis, bronquitis, pulmónía, gripe) o del agua (diarreas) tenían alta incidencia. Esta se veía favorecida por el atraso de la medicina, el desconocimiento de las vías de transmisión de las enfermedades y la falta de higiene privada y pública).
Además de la elevada mortalidad general había momentos de mortalidad catastrófica causada por epidemias, guerras y malas cosechas de cereales, que provocaban la subida del precio del grano y el hambre y la muerte de quienes no podían pagarlo. La mortalidad infantil presentaba también valores elevados, tanto la neonatal (en las cuatro primeras semanas) por defectos congénitos y problemas en el parto, como la postneonatal (entre las cuatro semanas y el año) por infecciones y desnutrición. Durante la transición demográfica, del 1900 al 1975 hay un brusco descenso de la mortalidad salvo dos únicos momentos de mortalidad catastrófica de la gripe de 1918 (33‰ ) y la Guerra Civil. Las causas fueron los avances médicos y sanitarios, el aumento del nivel de vida y la elevación del nivel educativo y cultural. Los avances médicos y sanitarios más destacados fueron las vacunas la comercialización de los antibióticos la generalización de los nacimientos en clínicas, y la mejora de la higiene pública y privada. El aumento del nivel de vida se manifestó en la mejora de la dieta: la década de 1960 se superaron la malnutrición y la escasez de la postguerra. El incremento del nivel educativo y cultural llevó a intensificar la prevención y a abandonar costumbres tradicionales nocivas para la salud. La mortalidad infantil también disminuyó durante esta etapa.
Desde el 1975 las tasas de mortalidad son bajas (8,58 0/00 en 2012) aunque desde el 81 experimenta un ligero ascenso debido al envejecimiento de la población y en últimos años un ligero descenso debido el rejuvenecimiento de la población por la llegada de inmigrantes. las causas de muerte han cambiado – Disminuye la importancia de las enfermedades infecciosas y aumenta las llamadas tres “C” (cáncer, corazón, carretera), además está creciendo la incidencia del Alzheimer- Presenta diferencia por sexos la esperanza de vida es mayor en la mujeres debido a razones biológicas
y socioculturales: mayor fortaleza por razones hormonales e inmunológicas, tiene tradicionalmente un estilo de vida distinto, no participan en las guerras, trabajos menos duros, menos hábitos nocivos (alcohol y tabaco), menos accidentes de carretera, vida menos desordenada.
– Presenta diferencia entre profesiones la mortalidad es mayor cuanto menor es la cualificación y el nivel social, pues las clases altas tienen menor mortalidad laboral y más servicios sanitarios y de mayor calidad.
En cuanto a la mortalidad infantil la reducción ha sido espectacular a lo largo del Siglo XX, descendiendo del 181‰ a principios del siglo al 3,06 ‰ en 2012.
La esperanza de vida* a principios de siglo era de 34 años para los hombres y 36 para las mujeres. En la década de los cincuenta se alcanza la barrera de los 60 años. La esperanza de vida al nacer en el año 2012 es de 85,5 años para las mujeres y 79,5 años para los hombres.
C-. Distribución espacial
Las tasas de mortalidad más altas se dan en Asturias (12,03 0/00) Galicia (11,03 0/00), Extremadura (10 0/00), Aragón (10.2 0/00), Castilla-La Mancha(8,7 0/00) y Castilla-León (10,20 0/00), comunidades en las que el envejecimiento de la población es más acusado debido a la emigración y a los pocos atractivos para la inmigración. Los valores más bajos los encontramos en Canarias, Andalucía, Murcia y Madrid, además de Ceuta y Melilla. Comunidades con mayor presencia relativa de población joven.
Crecimiento natural o vegetativo
A-. Concepto:
El crecimiento natural o vegetativo*
De la población es el resultado de la diferencia entre la natalidad y la mortalidad.
B-. Evolución histórica:
La evolución histórica de la tasa de crecimiento natural corre pareja a la evolución de las tasas de natalidad y mortalidad. Dentro de esta evolución podemos distinguir varias etapas: Hasta principios del Siglo XX las tasas de crecimiento natural eran relativamente bajas, (los índices se mueven entre el 7 y el 11%), ya que aunque la natalidad era alta, la mortalidad ordinaria también era bastante alta, además, aparecía una mortalidad catastrófica provocada por las epidemias, periodos de hambre o guerras. En 1918 con la epidemia de gripe, que hace subir la mortalidad, el crecimiento vegetativo disminuirá, llegando a ser negativo. Después, en la década de los años veinte se produce, relacionado con la bonanza económica, un aumento de la natalidad, lo que provoca un aumento del crecimiento vegetativo. Durante la Guerra Civil y los años de posguerra tenemos que señalar que se produce un descenso de la natalidad y un aumento de la mortalidad, lo que provoca, lógicamente, una disminución en el crecimiento vegetativo. Entre 1955 y 1975 se produce el periodo de mayor crecimiento vegetativo debido al aumento de la natalidad (babyboom) unido al desarrollo económico y un descenso de la mortalidad. Desde 1976 hasta nuestros días la población sigue creciendo aunque de manera más lenta debido al descenso de la natalidad y a que las tasas de mortalidad han tocado fondo. Es más, tenemos que hablar incluso de un estancamiento y un retroceso de la población debido al descenso de la natalidad de la natalidad y el incremento de la mortalidad por el envejecimiento de la población. En el futuro es previsible que el crecimiento natural siga disminuyendo, pues no parece muy probable una notoria recuperación de la natalidad mientras que la tasa de mortalidad se elevará por el envejecimiento de la población. C-. Distribución espacial: El crecimiento vegetativo por cada mil habitantes de la comunidad autónoma de referencia, tiene sus valores más altos en Regíón de Murcia (6,21), Comunidad de Madrid (5,35) Islas Baleares (4,43). Las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla se cifra en 7,86 y 9,97, respectivamente. Las comunidades con más defunciones que nacimientos son Principado de Asturias (-4,49),Galicia (-2,94) Castilla León (-2,57).Cantabria y Aragón (-0,39 y -0,56,respectivamente).