Proteccionismo y Librecambismo en la España de la Restauración: El Discurso de Federico Echevarría en Bilbao (1893)

El Discurso de Federico Echevarría: Defensa del Proteccionismo en la Industria Vizcaína (1893)

1. Localización

El meeting-protesta de Federico Echevarría, empresario liberal que revolucionó la producción del acero en España, es una fuente primaria, por lo tanto, un texto de carácter histórico. Es un fragmento de su discurso que, por su contenido, es político-económico. El discurso tuvo lugar en Bilbao el 9 de diciembre de 1893, durante el periodo de la Restauración, concretamente durante la regencia de María Cristina de Habsburgo. El documento es de carácter público y va dirigido al pueblo vasco (en especial a la población industrial asentada en Bilbao y alrededores) y dirigentes españoles. El objetivo de Echevarría es alertar a la sociedad de las consecuencias negativas que puede acarrear la supresión del régimen arancelario.

2. Análisis del Texto

El discurso recoge la defensa del principio económico proteccionista por parte de Federico Echevarría en un mitin en Bilbao. No es sino el constante debate con el librecambismo que se da cuando el Estado opta por no intervenir en la política comercial.

El motivo de esta defensa es la inexplicable noticia de que el Gobierno está sopesando firmar con Alemania un tratado de libre comercio, lo cual pone en alerta a los empresarios vizcaínos y también de toda España. Tal y como se menciona en el texto: “No, aquí no ocurre otra cosa, sino que por medio de tratados tan funestos como el hispano-alemán, se va a echar abajo y deshacer toda una gran labor del régimen arancelario vigente”, cuyo objetivo era favorecer las relaciones comerciales con el extranjero. Este tratado pondría en riesgo la labor de la ley arancelaria de 1891, tan beneficiosa para la industria vizcaína. Echevarría defendía que la supresión del proteccionismo sería nefasta para la economía del país. Según él, esta medida acabaría con las iniciativas y los proyectos industriales del futuro y asestaría un duro golpe a la gran cantidad de fábricas vizcaínas, implantadas en su mayoría bajo la protección de la Ley Arancelaria y reformadas gracias a ella.

La eliminación del proteccionismo afectaría a Bizkaia en todos sus sectores industriales. Se verían afectadas las nuevas instalaciones de fabricación de máquinas y de calderería de Altos Hornos de Bilbao: “Y la muerte de esa actividad industrial… alcanzaría a Altos Hornos…”. Otro sector afectado sería el de la producción de acero. Saldrían, así, perjudicados los talleres de Deusto y sus aceros moldeados o su construcción de máquinas y material de tracción; Aurrerá y sus fundiciones de tubos y manufacturas de acero; igualmente perjudicados saldrían los talleres de Zorroza y Miravalles (orillas del Nervión) con sus construcciones de puentes, vagones, edificios y calderería; y otras muchas fábricas de la zona industrial vizcaína. Además, se suspenderían los proyectos de nuevas fábricas e instalaciones que dependían casi en su totalidad de la continuidad de la Ley Arancelaria.

Por tanto, afirmando que las desastrosas consecuencias de los Tratados de Comercio no solo afectarían a Bizkaia sino que a toda la nación, pide encarecidamente que no se firme el tratado: “Para evitar tan desastrosos efectos, tan tremenda ruina, hemos de pedir enérgicamente al Gobierno que no se salga de lo prescrito y que deseche ese absurdo tratado hispano-alemán”.

3. Contexto Histórico

La industria española se basó en dos sectores: la industria textil catalana y la siderurgia vizcaína. La siderurgia, tras un primer intento en Marbella donde fracasó, y un segundo intento en Asturias donde tampoco tuvo éxito por falta de financiación, se asentó finalmente en Bizkaia, donde había abundante mineral de hierro, de gran calidad, fácil extracción y próximo al mar. La enorme competencia de la industria europea, que ya llevaba más de medio siglo funcionando, hacía que el desarrollo de la siderurgia en Bizkaia y del resto de los sectores industriales en España fuera dificultoso. Además de luchar por el asentamiento y el desarrollo de la industria, tenía que enfrentarse a la llegada de productos importados, más baratos que los nacionales.

Por esta razón, el proteccionismo fue muy demandado por burgueses y oligarcas, dueños de fábricas, durante toda la Restauración. El sistema canovista impuso un régimen arancelario a los productos extranjeros (1891) con el fin de favorecer la producción nacional. La siderurgia se vio muy beneficiada por este principio económico gracias al cual pudo hacer frente a la competencia extranjera, convirtiéndose en la principal zona productora de hierro del país, lo que derivó en el desarrollo de otros sectores industriales como el naval, químico y metalúrgico.

4. Valoración

Por fortuna, el tratado nunca se llegó a firmar, fue definitivamente rechazado por las Cortes a finales de 1894 y la Ley Arancelaria de 1891 se mantuvo e incluso se aseguró en 1896 con nuevas medidas proteccionistas.

Las fábricas vizcaínas dependían exclusivamente de la Ley Arancelaria y del proteccionismo para poder prosperar. Si los aranceles desapareciesen todo progreso logrado hasta la fecha y los proyectos de futuro desaparecerían.

Durante el siglo XX, la industria vizcaína concentrará el 70 % del mercado interior y además tomará el control de otros sectores industriales.

Vicente Blasco Ibáñez y “El Intruso”: Denuncia Social de la Minería en Vizcaya a Principios del Siglo XX

1. Localización

Este texto es un fragmento de la novela El Intruso, del escritor Blasco Ibáñez. Es una fuente histórica de contenido social. Es un texto narrativo literario, en el cual el autor denuncia las duras condiciones de vida de los mineros vizcaínos a comienzos del siglo XX.

Vicente Blasco Ibáñez (1867-1928) nació en Valencia y fue un escritor conocido de principios del siglo XX. En su actividad política, caracterizada por su oposición a la monarquía y por sus ideales republicanos, fue clave el periódico El Pueblo, que fundó en noviembre de 1894. En 1896 fue encarcelado por su actividad política y fue varias veces elegido como parlamentario republicano durante los años 1898-1907.

Es un texto de carácter público dirigido a los españoles, aunque también tuvo buena aceptación en el extranjero. La novela fue publicada en Valencia y está fechada en 1904, por lo tanto, dentro del periodo de la Restauración y en los primeros años del reinado de Alfonso XIII e inicios del movimiento obrero.

2. Análisis del Texto

El fragmento de esta novela describe la lamentable situación que vivían los mineros de Vizcaya en los primeros años del siglo XX.

En los dos párrafos aparecen las dos ideas principales del texto:

  • En el primer párrafo describe las condiciones de vida de los peones que trabajan en las minas de las Encartaciones de Vizcaya. Empezando por la comida que era escasa: “Después de una mala cena de alubias y patatas con un poco de bacalao o tocino…”, estaban obligados a cubrir sus necesidades de comida comprando en las cantinas de la propia empresa, el precio era más alto y los alimentos de peor calidad. Dormían en barracones de pequeño tamaño, sucios, fríos y sin estar preparados para hacer frente a las adversidades climáticas: “En las noches tormentosas, cuando el viento pasaba de parte a parte… los cuerpos vestidos y malolientes se buscaban, ansiando calor. Los sudores se juntaban, las respiraciones se confundían, la suciedad era fraternal. (…)”. Los trabajadores vivían hacinados y no tenían intimidad.
  • En el segundo párrafo, explica las dificultades que había para extender el movimiento obrero y mejorar las condiciones de vida de los mineros, puesto que los trabajadores no dejaban de llegar, y en busca de una vida mejor estaban dispuestos a aceptar cualquier condición laboral: “… llegaba continuamente en grandes bandas a sustituir sin esfuerzo alguno a todo el que abandonaba su puesto protestando contra el abuso. Mientras no se cortase esta corriente… era difícil que el trabajo conquistase sus derechos”. El escritor distingue entre “cantera” y “minas de galerías” señalando que trabajar en la mina es una labor más difícil de sustituir porque requiere de mano de obra cualificada, al contrario que el trabajo en la cantera.

Empujados por la pobreza y el hambre, los trabajadores llegaban en grandes bandas con el fin de trabajar y sustituir a aquellos que eran despedidos por demandar mejores condiciones laborales. Esto imposibilitaba la lucha por los derechos laborales.

3. Contexto Histórico

La industrialización vizcaína iniciada a mediados del siglo XIX se desarrolló en base a la existencia del mineral de hierro. Su abundancia, calidad, fácil extracción y proximidad al mar, favoreció su explotación. Con la invención del “convertidor Bessemer” en 1855, la actividad minera tuvo su momento de máximo esplendor, ya que impulsó la inversión de capital extranjero y se formaron varias compañías. La Tercera Guerra Carlista (1872-1876) paralizó momentáneamente la actividad, pero una vez finalizada, la explotación y exportación de hierro aumentó. Desde este momento, Vizcaya iniciará su despegue industrial.

La necesidad de mano de obra atrajo a la margen izquierda del Nervión a personas provenientes del mundo rural. Su llegada provocó unas necesidades infraestructurales que había que abordar en un periodo de tiempo muy limitado. La población aumentó en muy pocos años y el Gran Bilbao se convirtió en uno de los principales receptores de inmigrantes de todo el país. Ellos, en busca de trabajo y mejora de la calidad de vida, se encontraron con unas condiciones laborales desfavorables.

La novela gira en torno a los acontecimientos que llevaron al enfrentamiento violento de miles de personas en Bilbao, el 11 de octubre de 1903. Aquel once de octubre era el día de la Virgen de Begoña, Patrona de Bizkaia para los cristianos católicos, que se disponían a subir hasta su basílica en procesión. Por otro lado, el proletariado minero y de los altos hornos acudía a Bilbao a manifestarse en pro de sus reivindicaciones. El enfrentamiento entre los que acudían a la procesión, bizkaitarras, apoyados por los jesuitas de Deusto y por el otro lado los trabajadores, que eran estigmatizados como maketos, fue de una violencia inusitada. Blasco Ibáñez situó a los personajes de su novela en esa manifestación.

Entre 1890 y 1910 se dieron cinco huelgas importantes para reivindicar los derechos de los trabajadores. La gran huelga minera de 1890 es considerada el inicio del movimiento obrero vizcaíno y la consolidación del Partido Socialista como partido de masas entre los trabajadores de la cuenca del Nervión.

4. Valoración

Los problemas no se solucionaron y las huelgas continuaron siendo el modo reivindicativo más eficaz, el movimiento obrero tenía cada vez más fuerza. Los mineros dormían a turnos por falta de espacio en los barracones; el precio de los alimentos en las cantinas era hasta un 40% más caro. En 1899 las asociaciones obreras consideraban que la zona minera era el sumidero donde iban a parar todos los géneros podridos del comercio de Bilbao.

En 1917, se logró establecer las nueve horas de trabajo y un aumento de una peseta en el jornal diario.

Los Estatutos del Euskeldun Batzokija (1894): Nacionalismo Vasco y la Doctrina de Sabino Arana

1. Localización

Nos encontramos ante un texto histórico, publicado en el periódico nacionalista Bizkaitarra en 1894 durante la regencia de María Cristina de Habsburgo durante el periodo de la Restauración. Es de carácter público, dirigido sobre todo a los nacionalistas vizcaínos. En cuanto a su forma, se trata de un conjunto de normas legales por las cuales se regula el funcionamiento del Euskeldun Batzokija, con lo cual es un texto legislativo. El texto es de contenido político ya que refleja la doctrina política de esta asociación. No es un documento firmado, pero sabemos que fue Sabino Arana, el ideólogo del nacionalismo vasco, quien redactó estos estatutos. El objetivo principal es dar cobertura legal a la primera asociación de carácter nacionalista en Bizkaia.

2. Análisis del Texto

Los Estatutos del Euskeldun Batzokija aparecen divididos en 8 artículos.

  • Artículo 1: se especifica para quien ha sido creada esta asociación, es decir para los defensores del “…lema Bizkaino Jaun Goikua eta LagiZarra”. Según Sabino Arana, la el catolicismo iba ligado a la identidad vasca.
  • Artículo 2: indica que se creará otra asociación llamada “…Bizkaia Batzar…” y los batzokis serán sometidos a los estatutos de esta, redactados del mismo modo por Sabino Arana.
  • Artículo 3: habla sobre la religión. La religión católica era inherente al alma vasca, con lo cual no contemplaba que los ateos llegasen al poder, porque conllevaría la desaparición del catolicismo y la modificación de las costumbres vascas.
  • Artículo 4: Bizkaia y la posteriormente Euzkadi, es una nación porque tiene los elementos objetivos para serlo (seguidor del concepto nacionalista de la escuela alemana): raza, lengua, gobierno, leyes, costumbres, personalidad histórica propia. En el artículo 4 del Estatuto se aprecia una clara preferencia por la lengua vasca el Euskera, así como la pervivencia de la raza vasca a lo largo de las generaciones. También menciona los fueros o Lagi Zarra como las leyes nacionales vascas.
  • Artículos 5, 6 y 7: establece las relaciones entre la política y la religión. En Bizkaia habrá un equilibrio entre religión y Estado tal y como se especifica en el artículo 5, estableciéndose sin embargo una separación entre ambos, tal y como menciona el artículo 6 y subordinando el Estado a la Iglesia, artículo 7.
  • Artículo 8: se nombra Euskalerria al conjunto de las siete provincias vascas. En cuanto a la provincia de Bizkaia, se resalta su autonomía, distinguiéndola de las demás provincias.

3. Contexto Histórico

El nacimiento del nacionalismo vasco surgió a finales del siglo XIX con el bizkaitarrismo, ya que comenzó siendo un partido unido exclusivamente a Bizkaia, aunque más tarde incluyó en su reivindicación a todas las provincias de la población vasca. Los elementos en que se basaba la nacionalidad vasca son la raza, la religión, la lengua, la ley, el carácter y las costumbres, siguiendo la corriente de la escuela alemana.

El impulsor de este nacionalismo fue Sabino Arana, el fundador del PNV que arriesgaba por la separación con España y la proclamación de la independencia. Según este, la independencia política defendería a la sociedad vasca ante lo males del mundo moderno, como los emigrantes, la industrialización, etc. Desde una perspectiva fuerista tradicional, se limitó a recoger y dar coherencia a estas ideas que flotaban en la sociedad y las eliminó.

La ley que eliminaba los fueros históricos, en 1876, aportó dos tipos de reacciones y filosofías. La de los que supieron beneficiarse de la situación para transformar la pérdida en conciertos económicos en beneficio propio y la de los que, recurriendo al tradicionalismo, defendieron la recuperación constituida por los fueros. Estos últimos eran los perdedores de la Guerra Carlista, partidarios de un País Vasco tradicionalmente agrario, contrario al fenómeno urbano y de su industria, para quienes la defensa de los fueros totales correspondía a la defensa de lo esencialmente vasco. La industrialización y la llegada de inmigrantes eran enemigos de la sociedad tradicional vasca, junto con el Gobierno liberal español, que había abolido sus fueros. El lema del nacionalismo vasco era “Jainkoa eta Lege Zaharra”, que se basaba en la unión de los nacionalistas vascos a favor de la religión católica y de la recuperación de los fueros y tradiciones vascas. El 31 de julio de 1895 se fundó el PNV con el deseo de restaurar en el territorio el orden jurídico tradicional. Pero el partido no fue capaz de conseguir nada en los movimientos de los seguidores de Sabino Arana (la pequeña burguesía bilbaína tradicionalista), hasta que aumentó sus bases hacia una burguesía más moderna e industrial. Fue entonces cuando apareció la tensión interna entre los defensores de la independencia y los que buscaban como objetivo más viable y práctico, la autonomía dentro del Estado español.

Junto al nacionalismo etnicista y ruralista de Sabino Arana, apareció el de Ramón de la Sota, procedente del liberalismo fuerista. Así, formará un medio de comunicación llamado “Euskalduna” mientras que los independentistas fundaron el “Aberri” dirigidos por Luis Arana.

En 1910, el PNV sufrirá un corte entre sus elementos más progresistas, separándose el grupo Askatasuna, que era el más favorable a un nacionalismo laico y republicano. No obstante, no tendrá éxito hasta la 2ª República cuando se funde ANV (Acción Nacionalista Vasca).

4. Valoración

Este documento es imprescindible para conocer la ideología de Sabino Arana, en pocos artículos aparecen los principios fundamentales de los primeros nacionalistas vascos. La creación de Euskeldun Batzokija tuvo como objetivo la persuasión a todas las personas que aceptaran las bases políticas del nacionalismo sabiniano.

En 1895 se fundó el Partido Nacionalista, en principio limitado a Bizkaia. Con la muerte de Sabino Arana, en 1903, el Partido se expandió enormemente, pero eran evidentes sus divisiones internas.

Hasta 1920 se produjeron tensiones internas dentro del partido entre los antiguos miembros de la Sociedad Euskalerria y los sabinianos puros, que finalizó con el triunfo de los aberrianos en 1908. En 1921 el nacionalismo se dividió en dos partidos: Comunión Nacionalista Vasca y PNV. Con la dictadura de Primo de Rivera, se persiguió duramente a los nacionalismos por lo que las actividades en contra del régimen se realizaron desde el exilio. Durante la II República, la principal labor del PNV fue la consecución del Estatuto de Autonomía, que llegó en plena Guerra Civil en octubre de 1936.

“La Lucha de Clases” (1896): Condiciones Laborales y Movimiento Obrero en las Minas de Vizcaya

1. Localización

Este artículo se recoge en el semanario socialista “La lucha de clases”, por lo tanto, por su forma es un texto periodístico de estilo narrativo. Es una fuente primaria y el documento es de carácter público, ya que fue publicado en el semanario oficial del PSOE y está dirigido a los trabajadores (de Vizcaya). Aunque desconocemos su autoría, suponemos que el artículo debió ser escrito por alguien afín al partido socialista, como Tomás Meabe, fundador del periódico y figura destacada del socialismo. Se publicó el 23 de mayo de 1896, en Bilbao durante la regencia de María Cristina, en plena industrialización e inicios del movimiento obrero y el artículo hace mención a la manifestación del 1 de mayo del mismo año. El objetivo era despertar la conciencia de los trabajadores para que se movilizaran y denunciaran las pésimas condiciones de vida y de trabajo.

2. Análisis del Texto

El texto menciona la manifestación que tuvo lugar en el frontón de Gallarta con motivo de la celebración del 1 de mayo, en la cual los trabajadores de las minas de Vizcaya solicitaban que se eliminara la obligatoriedad de albergarse en los cuarteles y de comprar los géneros alimenticios en determinadas tiendas como condición indispensable para ser admitidos en el trabajo.

  • El primer párrafo, nos sitúa en la celebración del 1 de mayo de 1896 en Gallarta, en la que los mineros “…hicieron nuevas y ruidosas manifestaciones contra el mantenimiento de cuarteles y tiendas obligatorias…”. Para conseguir sus reivindicaciones llegaran al Gobierno “…nombraron una Comisión…”.
  • El segundo párrafo hace referencia a la huelga de 1890 como punto de partida de sus logros: “Los trabajadores de las minas en 1890 se levantaron en masa en huelga…”. No podemos olvidar que esta huelga fue fundamental en la historia del sindicalismo vasco, no sólo por ser la primera de carácter general sino también por el rearme moral que supuso para los trabajadores. Entre 1890 y 1910 se dieron cinco huelgas importantes (1890-1892-1903-1906-1910). Antes de la misma, las jornadas laborales eran de 10 horas en invierno y 13 en verano. Por supuesto, era obligatorio vivir en los barracones y comprar en las cantinas de la empresa. Contra todos estos abusos se levantaron los mineros el 13 de mayo de 1890. El general Loma acudió para sofocar la rebelión y al ver la situación tan penosa en la que vivían intercedió prometiendo mejoras.
  • Aunque parecía que el conflicto se había resuelto, el tercer párrafo confirma lo contrario: “Hoy … se mantiene la jornada de trabajo establecida en 1890, pero en cuanto a barracones y tiendas obligatorias se está… como antes de la primera huelga”. Y además señala en el cuarto párrafo que “… es condición indispensable para ser admitido al trabajo, albergarse en casuchas antihigiénicas y comprar los géneros alimenticios,… en determinadas tiendas.” Los mineros vivían hacinados y dormían sobre tablas en los barracones y en cuanto a la compra de alimentos en las cantinas, además de ser obligatoria, los precios eran hasta un 40 % más caros que en el mercado libre.
  • En el quinto párrafo, se hace un llamamiento al Gobierno y sus dirigentes para que tomen cartas en el asunto: “… una explotación antihumanitaria que ningún Gobierno culto deba tolerar”.
  • En el último párrafo, piden que el Gobierno tome medidas al respecto, porque de lo contrario, se verán obligados a ejercer el derecho a huelga: “… los obreros… para hacer desaparecer los cuarteles y las tiendas obligatorias… apelarán al legítimo derecho a la huelga…”.

3. Contexto Histórico

Durante el periodo de la Restauración se vivó en España un desarrollo de las diversas actividades económicas, acentuándose la tendencia a la concentración de la actividad industrial en las áreas periféricas. Tras los intentos de Marbella y Asturias, Vicaya logró asentar su desarrollo en base a tres factores determinantes: la presencia de una industria tradicional basada en las ferrerías y los astilleros; su estratégica localización costera entre la península y el continente; y la posesión de una materia prima como el hematites (mineral rico en hierro).

Sobre las bases del crecimiento iniciado a partir de 1840 (final 1ª Guerra Carlista), a partir de 1876 (final 3ª Guerra Carlista) comenzó su definitivo despegue industrial basado en la minería y la siderurgia. La extracción de hierro de Somorrostro posibilitó su exportación a Inglaterra, y gracias a la inversión de capital extranjero y autóctono pudo desarrollar su tecnología.

La revolución industrial no solo trajo un gran desarrollo económico, también un desproporcionado aumento de la población en muy pocos años. La zona del Gran Bilbao se convirtió en uno de los principales receptores de inmigrantes de todo el país. Estos, en busca de trabajo y mejoría de su calidad de vida, se encontraron con unas condiciones laborales muy adversas, especialmente los mineros.

Estas condiciones fueron el caldo de cultivo de las distintas huelgas todas ellas dirigidas por el socialismo, que tras la legalización de los sindicatos por el Gobierno de Sagasta (1881), fundaron en 1888 la U.G.T. La primera huelga importante fue la de 1890, en la cual participaron más de 30.000 trabajadores.

En 1894, se creó “La lucha de clases” y fue el medio de comunicación principal de los socialistas vizcaínos. Su director fue Tomás Meabe, el creador de Agrupación de Jóvenes Socialistas en 1904.

4. Valoración

La importancia de este documento se debe a que narra las condiciones de vida y laborares de los mineros y analiza los inicios del movimiento obrero.

Los problemas no se solucionaron y las huelgas continuaron siendo el modo reivindicativo más eficaz. Así sabemos, que en la siguiente huelga general, en 1903, se luchó por el derecho a comprar libremente y a vivir en sus propias casas. En 1904, consiguieron establecer el domingo como día festivo y en 1917 se logró establecer las 9 horas de trabajo y un aumento de una peseta en el jornal diario.

En esta época emergen personas como Facundo Perezagua, quien creo el primer grupo socialista en Bilbao (1886); Dolores Ibárruri, “La Pasionaria”, como dirigente del PC; y el doctor Areilza que dedicó su vida al cuidado de los mineros.