Poesía Lírica Latina
I. Orígenes y Desarrollo
La poesía lírica latina surgió en el siglo II a. C., inspirada en modelos griegos. Alcanzó su máximo esplendor tanto en la forma (métrica y lenguaje) como en el contenido. Los poetas latinos exploraron sus sentimientos y emociones más profundos. Conocemos himnos religiosos y cantos triunfales de los primeros tiempos de la lírica romana. Livio Andrónico, en el 207 a. C., compuso una canción procesional. También conservamos epigramas eróticos y fragmentos poéticos de Levio, Pompilio y otros autores. Cicerón los denominó poetae novi, caracterizados por abandonar el modelo de Ennio.
II. Principales Autores
1. Horacio
Horacio prefirió la vida retirada en su finca, dedicada a la creación artística, en lugar de la participación en la vida pública de Roma. Su producción lírica es extensa, destacando sus Odas y Epodos.
En las Odas, Horacio expresa sus pensamientos y sentimientos sobre diversos aspectos de la vida con un tono comedido y una notable perfección formal.
Los Epodos, composiciones de origen griego destinadas al insulto y al improperio, abordan una amplia gama de temas con agresividad y violencia. En ellos, desfilan personajes de la cultura, la política, la milicia y su círculo social, incluyendo a mujeres.
Destaca también el Carmen Saeculare, un himno propagandístico encargado por el emperador Augusto, compuesto para ser cantado por un coro mixto.
Horacio es considerado el gran purista de la poesía lírica latina. Su búsqueda de la perfección formal a veces eclipsa la fuerza de su mensaje. Fue mitificado por la posteridad e imitado, sobre todo en el Renacimiento. Su influencia en la lírica ha sido notable, siendo citado con frecuencia desde el humanismo y considerado el padre de la crítica literaria gracias a su Ars poética. Autores como Petrarca, Poliziano y Garcilaso incorporaron sus ideas en sus poemas, y Fray Luis de León lo imitó con devoción.
2. Catulo
Catulo, nacido en Verona, se trasladó a Roma donde escribió su obra, Catulli Carmina. La mayoría de sus poemas son vibrantes expresiones de amor, centrados en Lesbia, la mujer amada. Su obra también incluye poesía erótica, poemas de amistad y reflexiones políticas. Catulo, apasionado, directo y sincero, introdujo la estrofa sáfica en la poesía romana.
Muy conocido y estimado en su época, Catulo desapareció durante la Edad Media, hasta ser redescubierto en el Renacimiento.
3. Ovidio
Ovidio se formó en Roma, cerca de los círculos aristocráticos. Su obra no agradó al emperador Augusto, lo que lo llevó al exilio. Entre sus obras principales se encuentran:
- Las Metamorfosis: Narra las principales leyendas mitológicas de transformaciones. Ha inspirado traducciones, comentarios y obras artísticas, musicales y literarias a lo largo de los siglos.
- Los Fasti: Un ciclo de elegías sobre las fiestas romanas, sus costumbres y leyendas.
- Las Heroidas: Cartas imaginarias de mujeres (y algunos hombres) a sus maridos o amantes ausentes.
- Amores: Conjunto de poemas frívolos sobre las vicisitudes amorosas, con Corina como prototipo de mujer.
- Ars amandi (o Ars amatoria): Tratado de seducción que aborda la búsqueda, conquista y conservación del amor con un lenguaje claro, directo y elegante.
- Remedia amoris: Consejos sobre el amor basados en la experiencia del poeta, con un enfoque didáctico.
- Tristia: Refleja la tristeza, melancolía, soledad y desesperación del poeta durante su exilio.
Las obras Amores, Ars amandi, Remedia amoris y Tristia están escritas en dísticos elegíacos.