Orígenes del PSOE y Dictadura de Primo de Rivera

Contexto del PSOE

Orígenes y Fundación

La Asociación Internacional de Trabajadores (AIT), fundada en Londres en 1864, dio origen al pensamiento marxista y a otras corrientes, como la anarquista. Esta última se afianzó en la AIT tras continuos conflictos con los marxistas. En España, la corriente anarquista controló la sección española de la AIT, con Giuseppe Fanelli como máximo responsable.

En 1871, Paul Lafargue, yerno de Marx, llegó a España para reconducir a los internacionalistas españoles hacia el marxismo. Debido a la fuerza del anarquismo, solo un pequeño grupo, liderado por Pablo Iglesias, formó la Nueva Federación Madrileña, que en 1879, durante la Restauración, fundaría el PSOE.

Aspiraciones del PSOE

Las aspiraciones del PSOE eran: la abolición de las clases, la transformación de la propiedad individual en propiedad social y la posesión del poder político por la clase trabajadora. En 1888, se fundó la Unión General de Trabajadores (UGT), el primer sindicato del partido, centrado en las reivindicaciones laborales.

Consolidación del PSOE

En 1889 se creó la Segunda Internacional, de predominancia marxista, que en 1890 estableció el 1 de mayo como el Día del Obrero para reivindicar la jornada laboral de ocho horas. El PSOE, con mítines y una huelga general, logró importantes avances: una jornada laboral promedio de diez horas, la abolición del Truck System (sistema de pago con vales canjeables solo en tiendas de la empresa) y la abolición de la residencia obligatoria en barracones.

Este manifiesto es crucial para comprender los orígenes del partido político que ha gobernado España en diferentes periodos.

Contexto de la Dictadura de Primo de Rivera

Causas del Golpe

La dictadura de Primo de Rivera surgió como solución autoritaria a una situación insostenible. Tras la crisis y la huelga general de 1917, Alfonso XIII impulsó gobiernos de concentración que fracasaron. El desastre militar de Annual (1921), con 13.000 bajas, impactó en la opinión pública, similar al desastre del 98, precipitando la caída del gobierno. Socialistas y republicanos criticaron al rey. Se formó la Comisión Picasso para investigar las responsabilidades, pero antes de su conclusión, Primo de Rivera dio un golpe de Estado el 13 de septiembre.

El Golpe y la Dictadura

El golpe triunfó gracias al apoyo del rey Alfonso XIII, un sector del ejército y el empresariado catalán. La pasividad y posterior complicidad del rey fueron clave. Primo de Rivera se convirtió en dictador militar. La dictadura suspendió la Constitución sin derogarla, como solución transitoria al desmoronamiento del sistema de la Restauración, buscando más administración que política.

Primeros Años del Directorio Militar (1923-1925)

El directorio militar se centró en restablecer el orden público, mediante el estado de guerra y la persecución de anarquistas, y en resolver el conflicto de Marruecos. Tras un error de Abd el-Krim, que atacó a los franceses, una acción conjunta hispano-francesa en Alhucemas puso fin al conflicto en 1927.

Directorio Civil y Fin de la Dictadura

En 1925, Primo de Rivera cambió el directorio militar por uno civil, de carácter técnico, para perpetuarse en el poder. Creó la Unión Patriótica y una Asamblea Nacional Consultiva para elaborar una nueva constitución. Estos intentos no tuvieron apoyo y generaron críticas, manifestaciones y pronunciamientos militares. Primo de Rivera, sin el apoyo del rey, dimitió el 28 de enero de 1930. Alfonso XIII intentó restablecer el turno político, pero tras las elecciones municipales del 12 de abril de 1931, se proclamó la II República.