1.Contexto histórico, cultural y literario
El Renacimiento es una transformación cultural que se origina en Italia a mediados del Siglo XIV y que se extiende posteriormente al resto de Europa durante el Siglo XVI. Este movimiento es un renacer de la cultura grecolatina, de ahí que sea precisamente en Italia, en contacto con los restos de la Antigüedad clásica.Una de las figuras más importantes en esta empresa fue Petrarca quien consagró su vida a la búsqueda, corrección y difusión de manuscritos olvidados. El Renacimiento supone un cambio de mentalidad, un cambio en las formas de vida de la época y un florecimiento de numerosas actividades artísticas, científicas y técnicas.
2.España en el Siglo XVI
En España la época de plenitud renacentista coincide con los reinados de Carlos I y Felipe II. Con el primero, las corrientes estéticas e ideológicas europeísta entra de lleno en España: poesía italiana, ideas platónicas, pensamiento erasmista… Con el segundo, se cierran las puertas a cualquier influencia extranjera, exaltando la patria y el catolicismo. Durante el Siglo XVI la forma de gobierno del siglo anterior se sigue manteniendo. La nobleza y el clero seguían manteniendo sus privilegios, pero el mercantilismo favorecíó el auge de la burguésía dando paso a la actividad comercial y la valoración del dinero. La unidad política tuvo en la religión uno de sus principales instrumentos y la expulsión de judíos y conversos es una muestra del interés por desarrollar un Estado exclusivamente católico.
3.Panorama ideológico y cultural
– Epicureísmo: invita al disfrute de los placeres de la vida. El tiempo pasa deprisa, se exhorta a disfrutar del momento.
– Escepticismo: fomenta la actitud crítica basada en la razón, frente al dogmatismo.
– Estoicismo: defiende una forma de vida basada en el equilibrio según el orden natural.
– Neoplatonismo: exalta la belleza terrena como reflejo de la belleza divina. De ahí procede la idealización del sentimiento amoroso y de la naturaleza.
– Erasmismo: defiende una religiosa íntima y verdadera y propugna una mayor pureza en las costumbres religiosas.
1.Contexto histórico y cultural
El movimiento contrarreformista provocó un aislamiento de la cultura española del resto de Europa durante la segunda mitad del siglo. La España de Felipe II supone un cambio de actitud desde el punto de vista espiritual. La religión pasa a primer término dejando de lado el paganismo de la primera mitad de siglo. El idioma castellano consigue en esta época la categoría de lengua, siendo fray Luis de León un eslabón importante en la batalla en defensa de la lengua vulgar.
2.Humanismo, cristianismo y poesía
El Humanismo no solo fue un movimiento erudito y cultural, sino un auténtico movimiento revelador en todos los órdene. Desde un punto de vista espiritual, el Renacimiento reconoce la autonomía de la vida física respecto de la sobrenatural, defendiendo que la vida no solo es un valle de lágrimas, investigada y conquistada racionalmente. Importante en España fue la influencia del erotismo, reflejado en numerosas obras para satirizar los vicios eclesiásticos o propugnar una mayor sinceridad en las prácticas cristianas. En cuanto a la poesía es un tópico distinguir las dos corrientes que conforman la escuela sevillana y la escuela salmantina, ambas procedentes de la influencia generada por Garcilaso.
4.1.Fray Luis de León
Es el escritor que mejor sintetiza la uníón entre humanismo y religión, entre la percepción de la belleza y la concepción moral de la realidad. Estudió en Salamanca varias cátedras. Fue víctima de un proceso inquisitorial y tras su encarcelamiento de cinco años, volvíó a Salamanca. La política de aislamiento practicada por Felipe II y la Contrarreforma impregnan la cultura renacentista de la segunda mitad de siglo y la lírica absorbe este carácter, con lo que los temas y formas italianos se añadirán al tema religioso y patriótico.Los temas más utilizados por fray Luis en sus obras son:
• El deseo de soledad y el retiro pacífico con la naturaleza.
• La contemplación del equilibrio natural.
• La búsqueda de la paz espiritual.
• La uníón con la armónía del universo, reflejo de la armónía divina.
Su estilo, este de caracteriza por la sobriedad y la sencillez en el empleo de los recursos estilísticos. La adjetivación y el uso de imágenes es muy elemental. Son habituales las interrogaciones y las exclamaciones para expresar la emoción contenida en la reflexión.
4.2.San Juan de la Cruz
Juan de Yepes, canonizado con el nombre de san Juan de la Cruz estudió en Salamanca. Lleva una vida de gran actividad y de enorme empeño reformador y por esta actitud fue encarcelado en Toledo. Huyó de la cárcel y se refugió en un monasterio. El resto de su vida la pasó en Andalucía, entregado a la vida en soledad.El estilo de san Juan:
– Uso de la lira por su gran musicalidad.
– Variedad y riqueza léxica: uso de palabras rústicas junto a vocablos cultos.
– Buen gusto en la expresión sensorial de los paisajes.
– Empleo de recursos como las imágenes, las paradojas y las exclamaciones.
4.3.Santa Teresa de Jesús
Teresa de Cepeda y Ahumada nacíó en Ávila. Desde pequeña fue aficionada a la lectura de vida de santos y libros de caballerías. Muy joven ingresa en el convento de los carmelitas de la Encarnación. Desarrolla una intensa vida interior de numerosas experiencias místicas. Es una monja instruida, pero utiliza un lenguaje llano, aportando a sus obras menos cultura de la que en realidad tenía. Su obra presenta una serie de cualidades literarias como la sencillez y la claridad de estilo. Entre los rasgos más carácterísticos de sus obras podemos destacar:
– El uso de metros tradicionales como el octosílabo.
– Su estilo fue definido por ella misma como “desconcertado” ya que presenta una estructura
polimórfica.
– Sus escritos tienen una finalidad evangelizadora.
Conclusión 2
La España de Felipe II y la reacción contrarreformista, apoyada en las bases ideológicas establecidas por el concilio de Trento, propicia un clima de espiritualidad y se vuelve al teocentrismo medieval. España se recluye en sí misma y la evolución de su Renacimiento sigue un camino peculiar en el que confluyen elementos artísticos procedentes del mundo clásico y del italianista con otros derivados de la herencia cristiana. A esta fusión del espíritu religioso con los moldes de la antigüedad pagana es a la que se denomina segundo Renacimiento o Renacimiento cristiano.
Conclusión 1
Desde el punto de vista de la espiritualidad, el rasgo más importante del Renacimiento consiste en reconocer la autonomía de la vida física respecto de la sobrenatural. El mundo no es sólo un valle de lágrimas: debe ser gozado, investigado y conquistado racionalmente. Importante fue en España la
influencia del erotismo, que se refleja en numerosas obras que satirizan los vicios eclesiásticos o propugnan una mayor sinceridad en las prácticas cristianas. En fin, el lema de esta época podría ser muy bien “juvat vivere”: es hermoso vivir. Las tendencias del XV van a convivir con la renovación del XVI. Pero, lo más importante es que para oídos del Siglo XVI, estas formas métricas y estos versos sonaban como algo totalmente nuevo y
extraño, algo extranjero, pues, en definitiva, eso es lo que era, no sólo para las personas más cultas, sino para cualquier oyente de poesía.