Novela existencialista

Carácterísticas de la novela realista

  • Interés por la realidad social de personajes concretos.

  • Profundización psicológica y especial atención a los personajes femeninos.

  • Triunfo del narrador omnisciente en tercera persona.

  • Gusto por la descripción minuciosa de la realidad.

  • Ritmo narrativo lento.

  • Espacios y ambientes reales, preferencia por espacios urbanos.

  • Marco cronológico contemporáneo.

  • Simplificación de la técnica narrativa.

  • Reproducción fiel del habla carácterística de los personajes.

  • Estilo directo y objetivo.


Stendhal

Para Stendhal la novela es “un espejo que se pasea a lo largo de un camino”, que refleja lo que encuentra a su paso, lo mejor y lo peor, lo trágico y lo bello. Su modernidad reside en la singular transformación que experimentan unos personajes que buscan su propia identidad y luchan en un mundo jerarquizado por conseguir la felicidad, en la autenticidad de su enfoque y en el Realismo interior con el que analiza la psicología de sus personajes. Frente a los excesos ROMánticos, Stendhal defendíó un ideal de estilo sobrio, claro, sencillo, meticuloso y preciso, que tiene como norma básica la naturalidad. Destaca por sus obras Rojo y Negro y La Cartuja de Parma.

Flaubert

Para Flaubert la literatura debía partir de la observación, adecuarse a la realidad, ser científica, verdadera, exacta y objetiva. Por eso su narrador no es partidista; presenta los hechos sin ofrecer conclusiones y se retrae en beneficio del protagonista. Frente a la prolijidad y desmesura de Balzac, las obras de Flaubert son resultado de un largo y concienzudo proceso de documentación, revisiones y correcciones a la búsqueda de un estilo perfecto formalmente, en apariencia fácil pero muy cuidado. Destaca por sus obras Madame Bovary y Salambó.


Maupassant

Maupassant fue autor de una abundante producción de cuentos de temática variada, lograda concentración poética y ágil estilo, que ofrecieron la pintura amarga y pesimista de la sociedad francesa de su siglo. Mostró preferencia por la Guerra Franco-Prusiana en la que participó, el retrato de la pequeña burguésía, los temas fantásticos y de terror, la temática amorosa y sexual, y la locura, que experimentó muy de cerca al padecer desde 1876 la sífilis. Murió en un manicomio tras varios intentos de suicidio. Destaca por sus obras Bola de Sebo y Bel-Ami.

Dostoievski

Traslada a su prosa toda la hondura de su compleja y dramática experiencia vital. Se diferencian tres etapas en su obra: Etapa sentimental, que destaca la obra Pobres Gentes; etapa de transición de su fase social y humanitaria a la de las grandes novelas posteriores. Aparecíó por entregas Humillados y ofendidos; tapa de esplendornovelístico, iniciada con Crimen y castigo. La narrativa de Dostoievski, continuamente salpicada de referenciasautobiográficas, original y auténtica, traslada a la literatura su profundoconocimiento de la complejidad del alma humana, con especial atencióna la dignidad y la nobleza de los oprimidosy de los marginados.


Tolstói

Su quehacer novelístico se caracteriza por la observación de gestos y comportamientos en sus más mínimos detalles, el empleo de capítulos cortos a modo de escenas con unidad narrativa, la critica una sociedad que ha perdido la fuerza del amor y de la caridad, y la denuncia de la injusticia y la opresión. Tolstói, brillante pintor de escenas bélicas y de la naturaleza de su tierra natal, tiene el mérito de ser uno de los grandes maestros del Realismo psicológico.

Dickens

Dickens destaca en la narrativa por su habilidad en la creación de historias y personajes inolvidables, que ofrecen una crítica realista de lugares y ambientes del Londres de su tiempo. Presta atención a la explotación y pobreza de las clases trabajadoras, a las desigualdades, la marginación y la delincuencia… Algunos de sus personajes más conocidos son niños huérfanos o de infancia difícil, como Oliver Twist, David Copperfield o Pip, en Grandes esperanzas, de los que cuenta sus experiencias hasta que son adultos. Ello hace que se consideren estas obras como novelas de aprendizaje o Bildungsroman. Su crítica social está teñida de humor, ironía, ternura. Su estilo poético y sentimental muestra en ocasiones un gusto por lo dramático, inesperado y efectista, como con el recurso


A los reconocimientos (la anagnórisis de los griegos), habituales en la literatura del Siglo XVIII


Twain

Las aventuras de Tom Sawyer (1876), y especialmente Las aventuras de Huckleberry Finn (1884) –escrita como continuación de la anterior–, son sus mejores obras. Verdaderos clásicos de la literatura juvenil, cuentan con humor las peripecias de corte picaresco de sus protagonistas, convertidos en arquetipo del joven que huye de las obligaciones de la civilización, a modo de viaje iniciático. Su retrato realista e ingenuo, a la vez cómico y satírico, de los ambientes sureños en torno al Misisipi, favorece la presentación de los más diversos personajes, con sus coloquialismos y peculiaridades lingüísticas. Humor y comicidad, dramatismo, denuncia de la hipocresía, de la opresión, la injusticia y la crueldad de su tiempo, retrato de los conflictos raciales y de clase, y confianza optimista en el futuro, son rasgos carácterísticos de su literatura.


Melville

El neoyorkino Herman Melville (1819-1891), también ensayista y poeta, ha pasado a la historia de la literatura universal por su novela Moby Dick (1851). En ella el joven Ismael narra en primera persona la obsesiva búsqueda que emprende el capitán Ahab en su caza de la ballena blanca Moby Dick, que tiempo atrás le había amputadouna pierna. Más allá del relato de aventuras, es la historia alegórica de una venganza que profundiza en lanaturaleza del bien y el mal, en lo racional y lo irracional del hombre y del mundo que le rodea, en el odio, el miedo y la soledad.