Modernismo: Contexto Histórico y Obras de Antoni Gaudí
El Modernismo se desarrolla en el último tercio del siglo XIX y principios del siglo XX. Este estilo afecta a zonas industriales de Europa, especialmente Cataluña. La burguesía, con un creciente poder adquisitivo, busca diferenciarse de la aristocracia a través de la arquitectura. Se construyen casas únicas y reconocibles que reflejan su estatus y riqueza.
Características del Modernismo
- Uso del color en la arquitectura.
- Mezcla de materiales y colores, como las vidrieras.
- Influencia del gótico.
- Edificios asimétricos que buscan la sorpresa.
- Predominio de la línea curva, inspirada en la naturaleza.
- Motivos vegetales y formas de animales.
Edificios de Antoni Gaudí
Casa Batlló
Situada en un barrio burgués, la Casa Batlló destaca por su colorido, la mezcla de materiales, la asimetría y las líneas curvas. El tejado, con sus escamas, evoca un aire medieval.
Casa Milà (La Pedrera)
Conocida como La Pedrera (acumulación de piedras), es más sobria en cuanto a la mezcla de colores, pero presenta una profusión de líneas curvas que le dan una apariencia orgánica, como si respirara.
El Capricho (Comillas, Santander)
Este palacete destaca por el empleo de distintos materiales y colores, líneas curvas, elementos naturales y un toque oriental que recuerda a un minarete.
Parque Güell
La finca Güell se caracteriza por el uso del color, la mezcla de materiales, la asimetría, la búsqueda de la sorpresa y las líneas curvas.
La Sagrada Familia
Este templo cristiano, aún en construcción, es un símbolo del camino espiritual. Gaudí levantó la cripta y parte de las naves.
Contexto Románico
El Románico es un estilo religioso que se desarrolla en los siglos XI y XII en Europa occidental, durante el feudalismo. El término “románico” se acuñó en el siglo XIX, sugiriendo un resurgimiento de la forma de construir de Roma. Este arte, predominantemente rural, está profundamente ligado a la religión, en un contexto marcado por el miedo al año mil, al infierno, a la guerra y a las cruzadas. Las peregrinaciones, como el Camino de Santiago, se convierten en vías de difusión del estilo.
El Románico en España
Antes del Románico, se distinguen dos estilos previos:
Arte Visigodo (siglos V-VII)
Ejemplo: San Pedro de la Nave (Zamora). Predomina el muro sobre el vano, con interiores sombríos y arcos de herradura. Edificios sobrios.
Arte Asturiano o Prerrománico (siglos VIII-IX)
Ejemplo: Santa María del Naranco. Interiores oscuros, predominio del muro sobre el vano, uso de contrafuertes, arcos peraltados y capiteles labrados.
Románico Catalán
Influenciado por el románico italiano.
San Clemente de Taüll
Torres esbeltas, uso de columnas, tejado a dos aguas, tres naves y sillares.
Santa María de Taüll
Torre alta, predominio del muro sobre el vano, sillarejo y tres naves.
Monasterio de Santa María de Ripoll
Destaca la fachada y el ábside. Compuesto por tres naves, siete ábsides y cimborrio.
Románico Aragonés
Catedral de Jaca
Aparece el ajedrezado jaqués, un tipo de decoración que se extiende por la cornisa cantábrica.
Monasterio de San Juan de la Peña
Ejemplo de simbiosis entre naturaleza y arte románico.
Románico Castellano y Leonés
San Martín de Frómista (Palencia)
Piedra tallada, decoración de ajedrezado jaqués, planta basilical, tres naves, pocas ventanas, dos torres circulares, cimborrio ortogonal, contrafuertes, arcos de medio punto, muros anchos. Elementos sustentados: cubierta a dos aguas, columnas, bóveda de cañón y arcos fajones.
Catedral de Zamora
Influencia del arte bizantino. El cimborrio presenta una cúpula con características que recuerdan a la cúpula de Santa Sofía de Constantinopla.
Claustro del Monasterio de San Juan de Duero (Soria)
Patio sin techo, con columnas y arcos que recuerdan al arte islámico, incluyendo arcos de herradura y columnas achaparradas.
Monasterio de Santo Domingo de Silos (Burgos)
Destaca su claustro.
Románico en Galicia
Catedral de Santiago de Compostela
En el siglo X ya existía un templo en este lugar, destruido por Almanzor. Sobre este templo se levanta la catedral románica, con reformas góticas posteriores. Destaca la fachada barroca de Fernando de Casas Novoa, que respeta la fachada románica. Planta de cruz latina, tres naves, transepto marcado y una girola en su interior. Se marcan los arcos fajones, algunos de los cuales se prolongan en columnas adosadas.