Descripción y Evolución de la Mezquita de Córdoba
La Mezquita de Córdoba, una obra arquitectónica de grandes dimensiones, es el símbolo islámico más importante de la Península Ibérica y uno de los más grandes del mundo. Su construcción estuvo ligada al estado, siendo los emires y califas quienes acometieron su edificación y ampliaciones.
Exterior
El exterior se caracteriza por una muralla sin fachada principal, con numerosas puertas de acceso y contrafuertes terminados en almenas. Las puertas, de inspiración romana e imitadas por el arte hispanomusulmán, constan de tres cuerpos: uno central con la apertura de acceso y dos laterales que simulan puertas ciegas. La parte superior está decorada con arcos de herradura o lobulados y celosías.
La mezquita es el edificio más característico para los musulmanes, un lugar de reunión y oración, cuya estructura deriva de la casa de Mahoma. En el exterior se encuentra el Patio de los Naranjos (Sahn), que tiene cuatro sabils (fuentes) para las purificaciones. Las abluciones de los fieles, antes de entrar a la mezquita y orar, consistían en lavar con agua pura sus pies para eliminar los pecados.
En el patio se abren 19 arcos de herradura, que se corresponden con las 19 naves del mihrab, el armario sagrado donde se guarda el Corán. Delante del mihrab se encuentra un espacio restringido a las autoridades: la maqsura.
Interior
El interior está constituido por la sala de oración, formada por 514 columnas de jaspe, granito y mármol. Se reutilizaron fustes romanos y visigodos. El sistema constructivo consistía en levantar una pilastra con arcos de herradura. Estos arcos hacen posible que las pilastras puedan sostener un segundo nivel de arcos de medio punto. Se utilizaron modillones de rollos, que son como anillos que suavizan el cambio de un elemento a otro, y proporcionan una base ancha para permitir canales de agua. Todo esto permitió elevar la cubierta hasta los 11,5 metros.
Materiales
Los materiales empleados son pobres, como el ladrillo, yeso y estuco. Es una arquitectura en la que se aprecia un contraste entre la pobreza exterior, sencilla y simple, y el interior ricamente decorado.
Fases Constructivas
- Abd-al-Rahman I (Siglo VIII): Inició la construcción con 11 naves.
- Abd-al-Rahman II (Siglo IX): Realizó la primera ampliación, prolongando las naves 8 tramos. Tiró el muro de la quibla y levantó otro nuevo.
- Abd-al-Rahman III (Siglo X): Amplió el patio, lo porticó y construyó un nuevo minarete.
- Al-Hakam II (Siglo X): Otra ampliación, la más importante de todas. Prolongó las naves 12 tramos y construyó otra quibla. En ella se encuentra el mihrab. Introduce capillas, cubiertas de bóveda, arcos lobulados y entrecruzados. Marca el apogeo, calidad y refinamiento del arte cordobés.
- Al-Mansur (Finales del Siglo X): Realizó la última ampliación, que consiste en 8 naves y el patio. La calidad de la obra y la decoración son inferiores.
En el siglo XVI, se destruye parte del edificio para construir la catedral cristiana en su interior.
Contexto Histórico y Función
La Mezquita se encuentra en Córdoba, capital de Al-Ándalus, que en el siglo X contaba con medio millón de habitantes, 700 mezquitas y 300 baños públicos. Sus calles estaban pavimentadas e iluminadas. Su función es religiosa, fundamental en la cultura musulmana, donde los fieles acuden a realizar la oración. Tiene un carácter distinto del templo cristiano, ya que es una sala de oración que permitía controlar a las clases aristocráticas y políticas.
Características del Arte Islámico
La Mezquita pertenece al arte islámico, marcado por el hecho religioso. Se caracteriza por:
- Iconoclastia: No representa imágenes.
- Estilización: Niega el naturalismo propio del arte occidental.
- Mutabilidad: Solo Dios es eterno y el único que permanece inalterable.
- Sincretismo: Aunque tiene rasgos propios, integra elementos de otras culturas.
Lo esencial del arte musulmán es la arquitectura, destacando por la variedad de arcos. Sus edificios más importantes son la mezquita y el palacio.
La mezquita consta de:
- Una sala para la oración, cubierta y con un muro orientado hacia La Meca (quibla), donde se encuentra un nicho (mihrab).
- Junto a él, están el mimbar y la maqsura.
- Un patio descubierto (sahn) con una fuente para las abluciones.
- Una torre (alminar), elemento vertical del edificio.
El palacio consta de una zona destinada a las visitas, un diván para recepciones oficiales y un harén. Las ciudades musulmanas desarrollaron una rica civilización. El trazado era irregular y no existía planificación previa. Eran frecuentes las calles sin salida y también los pasos altos entre las casas.
Otras construcciones importantes de la época fueron la Torre del Oro y la Mezquita de Sevilla, y la Alhambra de Granada.
Trasfondo histórico de la Mezquita
Esta obra comenzó en el siglo VIII y fue completada en los siglos IX y X. El Islam surge en la Península Arábiga en el siglo VII, situada en el Mediterráneo Oriental. Era un territorio privilegiado por el que pasaban importantes rutas mercantiles, lo que favoreció la expansión del Islam. Esta religión nace en torno a Mahoma. Durante su estancia en La Meca, comienza a tener revelaciones del ángel Gabriel. En el año 622 se produce la Hégira (huida de La Meca), momento que marca el inicio de la era islámica. El Corán comprendió los preceptos musulmanes. La muerte de Mahoma inicia la difusión de esta religión gracias a la Guerra Santa.
La presencia musulmana en la Península Ibérica se remonta al año 711, aprovechando la debilidad del reino visigodo, y permaneciendo hasta 1492, año en el que los Reyes Católicos conquistan el Reino de Granada. La Edad Media en España se caracterizó por enfrentamientos entre cristianos y musulmanes, pasando por las siguientes fases:
- Emirato dependiente de Arabia (711-756)
- Emirato independiente (756-929)
- Califato de Córdoba (929-1031)
- Reinos de Taifas
- Reino de Granada (hasta finales del siglo XV)
La base de la economía de Al-Ándalus era el comercio, la artesanía y la agricultura.