C.1
Este fragmento pertenece a la cuarta Parte del Discurso del método de René Descartes, escrito en francés, en un estilo ensayístico. Esta obra fue publicada en 1637 como una introducción a tres obras científicas: la “Dióptrica”, los “Meteoros” y “Geometría”. El “Discurso” es una reflexión teórica sobre el problema del método en las ciencias. Es una obra breve en la que se adelantan todos los grandes temas del pensamiento cartesiano que serán desarrollados en las “Meditaciones metafísicas”. El “Discurso” tiene un componente autobiográfico, pues en él Descartes va contando de forma detallada el origen del nuevo método que propone y como lo concibió, así como su opinión sobre la educación filosófica y científica que había recibido. Descartes divide su Discurso en seis partes:
- Es una autobiografía intelectual en la que pone en duda todos los conocimientos aprendidos a lo largo de su educación. Se propone la búsqueda de un nuevo método para llegar a un saber seguro y realiza una crítica de las ciencias y de la filosofía de su tiempo; admitiendo que sólo las matemáticas ofrecen un saber seguro.
- Nos habla del proceso de elaboración de su método y de que las ciencias de su época no son portadoras de un verdadero saber, por lo que toma la decisión de dudar de forma metódica y provisional de todo lo que sabe. Por último expone las cuatro reglas del método.
- Crea una moral provisional, mientras se mantiene en la duda.
- Es el capítulo central del Discurso del método. A partir del “Pienso, luego existo” Descartes establece la existencia de Dios, que nos garantiza la evidencia de nuestras ideas y la existencia del mundo, puesto que Dios al ser infinitamente bueno y veraz no puede permitir que nos engañemos.
- Explica la formación del mundo. Establece las principales funciones del ser vivo, y establece las diferencias entre el hombre y los animales por la posesión de pensamiento o alma racional.
- Reflexiona sobre el alcance de la investigación científica y sobre la publicación de sus investigaciones.
René Descartes nacíó en La Haye en 1596. Estudió en el colegio jesuita de La Fléche, y las enseñanzas recibidas le decepcionaron, a excepción de las matemáticas que se convertirán para Descartes en el modelo de todo saber. Estudia Derecho y decide dedicarse a la carrera. Tras abandonar el ejército comienza su época de viajes y se dedica a las relaciones sociales y al estudio. De esta época es su obra “Reglas para la dirección del espíritu”, donde expone lo esencial de su método. En 1633 tiene escrita su obra “Tratado de física”, dividida en: “Tratado del mundo y de la luz” y “Tratado del hombre”. Posteriormente escribe el “DISCURSO DEL MÉTODO”
.
En 1641 publica las “Meditaciones metafísicas”, donde demuestra la existencia de Dios y la inmortalidad del alma, y que servirá de arma contra el ateísmo y de fundamento de la física. Posteriormente se dedicó a la elaboración de sus “Principios de filosofía”, que es una exposición resumida y sistemática de su filosofía y su física. Escribe por último “Tratado de las pasiones del alma”, donde profundiza sobre la moral. En 1649 es invitado por la reina Cristina de Suecia, donde muere en 1650.
C2
La mayoría de los historiadores de la filosofía considera a Descartes como el padre de la filosofía moderna por su afirmación del valor de la razón y el descubrimiento de la subjetividad que abre el camino a la filosofía moderna.
La Edad Moderna se inicia con el Renacimiento, un movimiento cultural que coincide con el nacimiento de las monarquías nacionales absolutistas, la aparición del capitalismo comercial y el surgimiento de la burguésía. Es una época de crisis de la mentalidad europea que significa la ruptura con la Edad Media y que da paso a una perspectiva más antropocéntrica frente al teocentrismo. Las relaciones entre razón y fe que estaban en la base del pensamiento medieval, se separan. El humanismo consigue imponer una concepción nueva del hombre que se difunde por toda Europa. El escepticismo de talante humanista representado por Michel de Montaigne hace una crítica del conocimiento medieval. Descartes reaccionará contra el escepticismo de Montaigne con la elaboración de su método. La revolución científica expresa el fracaso de los métodos medievales y de la física aristotélica, y el inicio de un nuevo modelo de ciencia.
Las dos grandes corrientes filosóficas de la época Moderna son:
el Racionalismo y el Empirismo, aunque hay diferencias importantes, también hay semejanzas: las dos consideran que la primera tarea de la filosofía es la investigación del conocimiento y la construcción de un nuevo modelo de ciencia. El Racionalismo afirma que la certeza del conocimiento procede de la razón y va asociada a las ideas innatas, mientras que el Empirismo representado por Locke o Hume, hace depender a la razón de la experiencia sensible y niega la existencia de ideas innatas. La conciencia empirista es una conciencia vacía.
Racionalismo y Empirismo consideran la intuición como un modo directo de concebir la verdad del conocimiento, pero los racionalistas hablan de intuición racional, mientras los empiristas hablan de intuición empírica. Respecto a la concepción del sujeto, para Descartes está perfectamente determinado como un «yo pensante» con un poder activo e ilimitado en su poder de conocimiento, mientras que para el Empirismo de Hume, el sujeto se considera pasivo, limitado en sus capacidades, negando el concepto de identidad personal o de yo. Las dos corrientes están influenciadas por la revolución de la ciencia moderna: Galileo y su método matemático influirá en Descartes; y Newton y su método experimental en la filosofía de Hume.
Descartes hizo grandes aportaciones al pensamiento moderno: fue el padre de la Geometría Analítica, porque inicia en el pensamiento occidental el problema del método y porque destacó el carácter activo del pensamiento, influyendo en filósofos como Espinosa o Hegel.