Literatura Española Medieval y del Siglo de Oro: El Cid, Berceo y Quevedo

El Poema de Mio Cid

El Poema o Cantar de Mio Cid es el principal cantar de gesta de la poesía épica castellana, destinado a la recitación pública por juglares. El texto conservado proviene de un manuscrito del siglo XIV, copiado de otro de 1207 escrito por Per Abbat. No se sabe si fue compuesto por uno o varios juglares del siglo XII, pero su redacción se sitúa en la segunda mitad de ese siglo. La obra narra los últimos años de Rodrigo Díaz de Vivar y se divide en tres partes:

1. Cantar del destierro

El Cid es acusado injustamente y desterrado. Recupera su honor político enviando regalos al rey tras cada victoria.

2. Cantar de las bodas

El Cid conquista Valencia, es perdonado por el rey y sus hijas se casan con los infantes de Carrión.

3. Cantar de la afrenta de Corpes

Los infantes maltratan a las hijas del Cid, quien recupera su honor familiar a través de la justicia real y nuevas bodas con los infantes de Navarra y Aragón.

El poema, de casi cuatro mil versos, destaca por su tono verosímil, claro y expresivo, empleando recursos propios de la recitación oral y epítetos épicos para magnificar al protagonista.

Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador

Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid, es un representante de la nobleza guerrera castellana, opuesta a la aristocracia leonesa. Perteneciente a los infanzones, una capa baja de la nobleza que se gana el honor luchando, se contrapone a la alta nobleza cortesana. Como héroe épico, el Cid encarna valores como el amor conyugal y filial, la pasión guerrera, la honradez, la inteligencia, la mesura y la religiosidad, personificando al caballero cristiano ideal.

A lo largo del poema, la figura del Cid se engrandece mientras los infantes de Carrión, los traidores, se envilecen, y se mitifica el reino de Castilla.

Gonzalo de Berceo

Gonzalo de Berceo es el primer autor conocido de la literatura en castellano y una figura clave del mester de clerecía en el siglo XIII, ligado al monasterio de San Millán de la Cogolla. Su obra se divide en tres tipos:

1. Hagiografías

Narraciones de vidas de santos, como Vida de santo Domingo de Silos, Vida de santa Oria, Martirio de san Lorenzo y Vida de san Millán.

2. Obras doctrinales

Relacionadas con preceptos cristianos, como Los signos que aparecerán antes del juicio y El sacrificio de la misa.

3. Obras marianas

Dedicadas a la Virgen María, incluyendo Loores de Nuestra Señora, Duelo que fizo la Virgen el día de la Pasión de su Hijo y Milagros de Nuestra Señora.

Milagros de Nuestra Señora

Milagros de Nuestra Señora consta de una introducción y veinticinco milagros, donde el narrador se presenta como un peregrino de la Virgen. Los milagros siguen una estructura de caída y redención, donde los devotos se salvan gracias a la intervención de la Virgen María.

Estilo de Gonzalo de Berceo

El estilo de Gonzalo de Berceo está influenciado por su personalidad y la finalidad de sus obras. Como autor culto y consciente de su deber de transmitir conocimiento, usa la cuaderna vía y algunos cultismos. Al mismo tiempo, adapta su tono para enseñar y adoctrinar a un público de peregrinos campesinos, empleando un lenguaje sencillo y referencias a su vida cotidiana. Además, utiliza técnicas de la literatura oral, como fórmulas expresivas, llamadas de atención y diálogos, para dar dramatismo a sus poemas.

Francisco de Quevedo

Francisco de Quevedo fue un prolífico poeta cuyas obras circulaban ampliamente y eran conocidas tanto en círculos populares como literarios. Tras su muerte, gran parte de su obra fue recopilada en el libro El Parnaso español. Sus composiciones abordan una variedad de temas representativos del barroco y de su perspectiva particular. Entre sus obras destacan:

Poesía metafísica y moral

Se enfoca en la fugacidad de la vida, la decadencia humana y la omnipresencia de la muerte, influenciada por su fe cristiana y la filosofía neoestoica. Su tono es desengañado y melancólico, predominando el soneto.

Poesía amorosa

Utilizando sonetos, romances y canciones, Quevedo explora temas amorosos del petrarquismo a través de la angustia por la brevedad de la vida y la muerte, considerando el amor como un sentimiento que causa insatisfacción y tormento.

Poesía satírica y festiva

Compuesta por sonetos, romances y letrillas, critica costumbres, personajes y grupos sociales con gran libertad expresiva.

Otras variedades

Incluye poesía religiosa, recopilada en Heráclito cristiano, y poesía heroica, como panegíricos y epitafios, relacionada con circunstancias sociales concretas.

Estilo de Francisco de Quevedo

El estilo de Francisco de Quevedo se caracteriza por:

  • Versatilidad: Utiliza diversas estrofas, destacando el soneto, adecuado para sus reflexiones.
  • Tendencia al conceptismo: Visible en su poesía satírica, emplea comparaciones, hipérboles, juegos de palabras, metáforas, neologismos, paradojas, paronomasias y personificaciones.
  • Vocabulario sencillo: A veces usa frases coloquiales o expresiones populares, especialmente en composiciones satíricas y festivas.
  • Rigurosidad: Revisa y corrige meticulosamente sus escritos.
  • Tono de advertencia: En sus composiciones metafísicas, utiliza un tono de advertencia y una mayor complejidad sintáctica.

La obra de Quevedo refleja el cambiante mundo que lo rodea, combinando lo bello y lo grotesco, lo burlesco y lo serio con maestría.