El Romancero Gitano de Federico García Lorca
Publicación: Aparece publicado por la editorial de la Revista de Occidente en 1928. La obra no era totalmente desconocida, el autor la había dado a conocer oralmente en múltiples lecturas. El éxito del libro fue igual al que había tenido en la transmisión oral.
Rasgos estilísticos del romancero tradicional:
- Utilización del diálogo sin verbos de introducción y sin indicación.
- Comienzo súbito de la historia narrada y final abrupto.
- Utilización de paralelismos, anáforas y paranomasias.
- Uso de fórmulas narrativas tradicionales.
- Combinación en un mismo romance de verbos en diferentes tiempos.
- Empleo de un número determinado para significar una cantidad imprecisa.
Descripción y ordenación:
El libro consta de 18 romances. La mayoría no pasa de 50 versos. La unidad métrica y de estilo refuerza el hilo conductor temático de la Andalucía del lloro. Se colocan al final los menos relacionados con el tema andaluz: tres romances históricos, los tres dedicados a los arcángeles y los dos de Antoñito el Camborio. Se nota la cuidadosa ordenación en algunos rasgos: descolgados al final los tres históricos, los quince romances gitanos se agrupan en dos series, intermedios los tres de los arcángeles. La primera serie es la más lírica, con creación de mitos. La segunda es más épica y con personajes masculinos.
Significado:
Lorca confesó que se inclinaba a la comprensión de los perseguidos: el gitano, el negro, el judío… El poeta canta fraternalmente a los marginados. Las figuras del Romancero son personas al margen de un mundo convencional y hostil, y por eso marcados por la frustración o abocados a la muerte.
Estilo:
Muchos símbolos que Lorca utiliza en su obra proceden de antiguas tradiciones. La luna como astro de la muerte. Los metales como el frío de los muertos y materia de los cuchillos con los que se mata. Las aguas estancadas, los aljibes o los pozos suelen ser un lugar donde sucede un asesinato. El río que corre suele ser el lugar de encuentro de los enamorados. Los colores también son utilizados como símbolo. Rosa lo femenino y azul lo masculino. Los animales: caballo como algo erótico y bueyes como fuerza. Y los pájaros que pronuncian sucesos malos.
La lírica desde la Guerra Civil
Marco histórico y cultural:
Al acabar la Guerra Civil, existía un partido único, bajo el mando del Ejército, mandado por Franco. En la década de los 1950, algunos sectores se fueron politizando. Económicamente se atisbaba una lenta recuperación económica. En los años sesenta, y hasta 1975, aunque sigue la represión franquista. En 1976, un año después de la muerte de Franco, se inicia la transición a la democracia.
La poesía española en las tres décadas posteriores a la guerra:
Principales orientaciones poéticas desde la Guerra Civil:
- Entre 1936 y 1939: En los dos bandos se desarrolló una literatura de propaganda ideológica.
- Poesía en el exilio: La Guerra Civil y la dictadura provocaron el exilio de numerosos intelectuales. Entre ellos, los poetas del grupo del 27 publican fuera de España. En las producciones de todos ellos sobresale, como una angustia en una época principal, el tema de España.
- Década de los cuarenta: Prosperó una poesía neoclásica de exaltación nacionalista y de evasión, a la par que una poesía existencial y nuevas propuestas de poesía vanguardista.
- Década de los cincuenta: Triunfa la poesía social.
- Década de los sesenta: La poesía se va a centrar más en lo individual.
Poesía de Miguel Hernández:
Su poesía está llena de un hondo contenido humano, enmarcado es unos versos de gran perfección formal.
Temas:
- El amor: Primeramente como erotismo, más tarde aparece la plenitud amorosa y el amor a la mujer.
- El dolor y la muerte: Las vivencias personales y la realidad social provocan sufrimiento.
- La vida y la esperanza: Su poesía, aun así, refleja un profundo vitalismo, unido al amor y a la solidaridad.
Obra:
- Primera etapa: Perito en lunas y El rayo que no cesa.
- Segunda etapa: Influencia de Pablo Neruda, destacan Viento del pueblo y El hombre acecha.
- Últimos poemas escritos en la cárcel: Cancionero de ausencias.
Años cuarenta:
Poesía neoclásica:
En la década de los 40, las revistas tuvieron un importante papel de difusión de las líneas literarias. La revista Escorial surgió como el primer órgano de propaganda intelectual de la nueva España, sus colaboradores cultivaron una poesía intimista, realista, de carácter meditativo y trascendente. Entre ellos se encontraban Luis Rosales, Leopoldo Panero, Luis Felipe Vivanco y Dionisio Ridruejo, agrupados todos en la denominada Generación del 36. La otra revista, Garcilaso, bajo su neoclasicismo formal, surgió una corriente neorromántica. Su director fue el poeta José García Nieto.
Poesía existencial:
En 1944 se publican dos obras fundamentales: Hijos de la ira y Sombra del paraíso.
Poesía vanguardista:
Dos movimientos plantearon una línea diferente a las de la poesía neoclásica y existencialista: el postismo y el grupo Cántico.
Años 50: Poesía social:
Con la publicación en 1947 de Tranquilamente hablando de Gabriel Celaya, se inició un proceso de cambio.
Autores destacados:
- José Hierro: Hace una poesía de carácter testimonial, fundada en el tiempo personal y en el tiempo histórico y colectivo. Desde sus primeros libros Tierra sin nosotros, Alegría y Con las piedras, con el viento está presente el paso del tiempo y las pérdidas que produce. Con Quinta del 42 y Cuanto sé de mí se aproxima más a la poesía social. Y con Libro de las alucinaciones hablará de las emociones.
- Gabriel Celaya: Sus obras son: Movimientos elementales, Objetos poéticos, Paz y concierto, Cantos íberos y Los espejos transparentes.
- Blas de Otero: Su producción poética presenta una evolución de lo existencial a lo social. Destacamos Cántico espiritual, Ancia, Pido la paz y la palabra, En castellano y Eso no es un libro.
Años sesenta: Poesía del conocimiento:
Irrumpe en esta época un grupo de poetas que, sin dejar los temas sociales, buscaba una mayor elaboración del lenguaje poético y un desplazamiento de lo colectivo a lo personal. En esta época destacan Carlos Barral, José Agustín Goytisolo, Ángel González, José Ángel Valente y Félix Grande.
Autores destacados:
- José Ángel Valente: Su poesía constituye una indagación constante en el lenguaje con la finalidad de llegar al conocimiento poético y a su propia salvación. Obras: A modo de esperanza, La memoria y los signos, El inocente.
- Ángel González: Áspero mundo y Tratado de urbanismo.
- Jaime Gil de Biedma: Su poesía se basa en experiencias vividas. Gil de Biedma agrupó tres libros: Compañeros de viaje, Moralidades y Poemas póstumos.
La poesía de los 70 a nuestros días:
Desde 1975 hasta la actualidad las orientaciones se han multiplicado, pero se aprecia una tendencia al abandono de las corrientes anteriores. También el vocabulario poético oscila entre el preciosismo elitista y el prosaísmo y la cotidianidad.
Autores de la década de los 50:
- José Hierro publica recientemente: Agenda y Cuaderno de Nueva York.
- Gabriel Celaya publica en la década de los setenta, dentro de su poesía vanguardista, su producción más experimental: Campos semánticos, Función de uno, equis, ene e Itinerario poético.
- Blas de Otero en los años sesenta publica Historias fingidas y verdaderas.
Autores de la década de los 60:
- José Ángel Valente publica Mandorla, El fulgor, No amanece el cantor.
- Ángel González a partir de los 60 realiza una obra de tipo lúdico con Breves canciones para una biografía y Prosemas o menos. Con Deixis en fantasma y Otoños y otras luces comienza una meditación de carácter elegíaco sobre el paso del tiempo.
Década de los 70: Los Novísimos:
Destacan un grupo de poetas llamados los novísimos. Entre estos se encontraba Manuel Vázquez Montalbán, Ana María Moix, José María Álvarez, Leopoldo María Panero y Pere Gimferrer. Dos rasgos caracterizan a los poetas de este grupo: por una parte, la preferencia por una cultura de masas unida al gusto camp. Por otra parte, el culturalismo, que supone continuas referencias a otras obras y autores. El estilo de los novísimos se nutre del surrealismo e incorpora técnicas como el collage y el flash cinematográfico. La intertextualidad se convierte en una clave que solo puede ser descifrada por lectores con la misma formación. Uno de los autores que cabe destacar es el protagonista de esta nueva generación, Pere Gimferrer, con sus dos obras Arde el mar y La muerte en Beverly Hills.
Últimas tendencias a partir de 1975:
Dentro de la poesía actual hay varias tendencias: neosurrealismo, neorromanticismo, poesía épica, poesía sensualista y quizás la tendencia que parece tener una mayor repercusión sea llamada poesía de la experiencia. Esta poesía de la experiencia abarca un espectro temático que abarca de los hechos cotidianos y la realidad urbana al más profundo intimismo o la preocupación por el paso del tiempo y su influencia en las personas o cosas. Su estilo se basa en el lenguaje conversacional y en el monólogo dramático. Seguidores de esta tendencia son Luis García Montero con Rimado de ciudad, Habitaciones separadas y Completamente viernes, el vasco Jon Juaristi publica Diario de un poeta recién cansado, Los paisajes domésticos y Tiempo desapacible, el gallego Miguel D’Ors con El cielo azul y La imagen de su cara.