Estándar 102
El reinado de Alfonso XIII se inició en 1902 con un clima político y social marcado por el espíritu regeneracionista, corriente ideológica que denunció los vicios de la Restauración y realizó una serie de propuestas para la modernización de España en lo social, lo político y lo económico.
Los primeros gobiernos se apuntaron al regeneracionismo, con los intentos de reforma del sistema político de la Restauración, que se hallaba cada vez más desligado de la realidad social española. Es lo que se denomina “revolución desde arriba” o “revisionismo político”, intentar democratizar la política desde arriba, hacer una reforma en profundidad de la vida pública y la mejora de las condiciones de vida de las clases populares para evitar cualquier revolución que hiciera peligrar el Sistema, sin alternar las bases fundamentales de la Restauración.
La etapa del “revisionismo “, cubríó la primera década del reinado. Tras la muerte de los fundadores de los partidos dinásticos (Cánovas y Sagasta), comenzó la etapa del revisionismo político protagonizado por Maura (Partido Conservador) y Canalejas (Partido Liberal).
Antonio Maura, al frente del Revisionismo del partido conservador llevó al Parlamento numerosas iniciativas legales:
– Incorporar nuevas capas sociales a la política, para llevar a cabo la revolución desde arriba y frenar y controlar el movimiento obrero.
– Moralización de las elecciones y fin del caciquismo, mediante una nueva ley electoral (voto obligatorio, secreto, prevención de los “pucherazos”).
– Modernización del poder local y mayor autonomía municipal para evitar la excesiva centralización.
La Semana Trágica de Barcelona en 1909 impidió que Maura concluyera su “revolución”. El rey le retiró su confianza a la vista de la reacción internacional que produjo la ejecución de Francisco Ferrer en Barcelona. Dimitíó en Octubre de ese año.
Le sucede José Canalejas, al frente del Revisionismo del Partido Liberal, que no pudo concluir su proyecto reformista al ser asesinado en 1912 por un anarquista en plena Puerta del Sol (Madrid). Canalejas gobernó con programas, ideas, firmeza y resolución, con voluntad reformista, realizando reformas más profundas:
– Reduce los impuestos sobre el consumo en productos de 1a necesidad.
– Grava más los impuestos directos (impuestos sobre las propiedades).
– Elabora una ley de quintas: reclutamiento obligatorio en tiempos de guerra.
– Dicta la ley del Candado impide el aumento de órdenes religiosas en España. Esto le trae
problemas con la Iglesia.
– Va a contemplar los nacionalismos, durante su gobierno se aprueba la Mancomunidad
Catalana.
– Regulación de las condiciones de trabajo.- jornada máxima en las minas, prohibición del
trabajo nocturno de la mujer.
Estándar 110
El 13 de Septiembre de 1923 Miguel Primo de Rivera, capitán general de Cataluña, da un Golpe de Estado. Sacó las tropas a las calles de Barcelona y ocupó los edificios oficiales.
En un Manifiesto proclamó la suspensión de la Constitución y exige que el poder pase a los militares. Justificó su acción con un lenguaje regeneracionista:
– Quiere acabar con el corrupto régimen de la Restauración. – Acabar con el anticlericalismo.
– Terminar con los separatismos (unidad nacional).
– Pacificar Marruecos.
– Garantizar el orden público.
El rey Alfonso XIII aprueba el Golpe de Estado y encomendó a Primo de Rivera la formación del nuevo gobierno integrado por militares. Así comienza una dictadura que duró 7 años y en la que encontramos dos etapas diferenciadas.
Directorio Militar (1923-1925): Periodo en el que el gobierno se conforma con gabinetes militares para conseguir la estabilidad social.
– Gobierno formado por ministros militares al mando de Primo de Rivera, que ejerce un gobierno personalista.- se suspende la Constitución y se disuelven las Cortes.
– Se militariza el orden público: el ejército reprime los movimientos obreros y nacionalistas e impide cualquier actividad política opositora (partidos, sindicatos).
– Se elaboró un Estatuto Municipal y otro Provincial, con la intención de eliminar el
caciquismo.
– Era desproporcionadamente anticomunista y antiseparatista (tomó medidas férreas
en Cataluña y País Vasco).
En esta etapa, la resolución del conflicto con Marruecos se convierte el éxito más evidente de la Dictadura. En 1925, con la colaboración de Francia se realizó un desembarco en Alhucemas, que facilitó la derrota de las tropas rifeñas y pacificación de Marruecos. El éxito conseguido fue, ante todo, político y popular: le reconcilió con los ciudadanos cansados de guerras, con el ejército porque había salvado su honor, con los empresarios inversores en Marruecos,…
Con el paso del tiempo y la labor de gobierno, el general fue cambiando de parecer y empezó a configurar un nuevo Estado que sustituyera al caduco sistema de la Restauración. Así empezó a crear una nueva estructura política e institucional e incorporó civiles a la tarea de gobierno siguiendo los pasos de Mussolini en Italia donde había implantado desde 1922 una dictadura fascista.
Directorio Civil (1925-1930): Entran civiles en el gobierno, aunque el peso de militares continuó siendo importante. Su intención era institucionalizar el nuevo régimen para darle continuidad y permanencia. No obstante, el carácter del régimen siguió su estilo autoritario.
Se intenta perpetuar el régimen mediante la creación de la Asamblea Nacional Consultiva (1927), unas Cortes con miembros elegidos por Primo de Rivera entre sus partidarios. Su función era asesorar e informar al dictador y elaborar una Constitución que no llega a finalizarse.
El régimen consolida definitivamente su carácter autoritario, antiparlamentario y antidemocrático. Pero goza de éxito económico gracias al crecimiento económico mundial (“felices años 20”), sino también de la paz social que trajo la dictadura y de la política económica intervencionista y proteccionista estatal.
A partir de 1928 el régimen empieza a debilitarse y aumenta la oposición, al ver el intento del régimen de hacerse permanente en lugar de ser transitorio, unido al escaso apoyo de la Asamblea Consultiva. Así, crecen las protestas de:
– Estudiantes: Falta de apoyo a la universidad pública.
– Obreros y patronales: nueva crisis económica que acaba con la paz social. Cierre de
empresas, aumenta el paro.
– Militares peninsulares: discriminación frente a los oficiales de Marruecos.
– Intelectuales (Unamuno, Blasco Ibáñez): represión intelectual (exilios, destierro, etc.)
En 1930 los republicanos se habían convertido en el primer referente político de la sociedad española, que comenzó a identificar cada vez más republicanismo con democracia. Ante esto, el Rey retira su confianza al dictador y el 30 de Enero de 1930 Primo de Rivera presenta su dimisión. Se exilia a París y a los dos meses muere.