Robert Castel, influenciado por las ideas de Émile Durkheim, se encuentra preocupado por la cohesión social y las relaciones de interdependencia (que se necesitan mutuamente para poder avanzar en conjunto como sociedad). Ambos, no cuestionan la base del sistema, sino que plantean nuevos conjuntos de normas que regulan la sociedad. Castel va a describir el proceso (considerando el caso francés) por el cual se llega del pauperismo de la clase trabajadora en el siglo XIX a la condición salarial como relación de trabajo a partir de 1950, para luego comenzar su deterioro a partir de la segunda mitad de la década de 1970.
Describe este proceso a través de tres formas dominantes de cristalización de las relaciones de trabajo en el capitalismo:
- Condición Proletaria
- Condición Obrera
- Condición Salarial
¿Qué supone una “relación salarial”?
Una relación salarial supone un modo de retribución por la fuerza de trabajo: el salario (el cual gobierna en gran medida el modo de consumo y de vida de los obreros y sus familias).
Además, una forma de disciplina del trabajo que regula el ritmo de la producción. Y el marco legal que estructura la relación de trabajo, es decir el contrato de trabajo y las disposiciones que lo rodean.
Para Castel, la relación salarial puede tomar configuraciones diferentes y el problema es identificar las transformaciones que rigen del pasaje de una forma a otra (en este caso: proletaria, obrera y salarial).
Características de la “Condición Proletaria” (Inicios de la industrialización)
- Retribución próxima a un ingreso mínimo que aseguraba sólo la reproducción del trabajador y su familia y no permitía invertir en el consumo no imprescindible.
- Ausencia de garantías legales en la situación de trabajo regida por el contrato de alquiler.
- Carácter débil de la relación del trabajador con la empresa; cambiaba a menudo de lugar, se alquilaba al mejor postor, “descansaba” algunos días de la semana, o durante períodos más o menos prolongados, si podría sobrevivir sin someterse a la disciplina del trabajo industrial.
Características de la “Condición Obrera”
- El salario deja de ser una retribución puntual y comienza a asegurar derechos (enfermedad, accidentes, jubilación, vacaciones pagas).
- Integración desde la subordinación: el consumo (pero de masas), la educación (pero primaria), los ocios (pero populares), y la vivienda (pero obrera).
- Integración inestable: al momento que se estructura la clase obrera, también se afirma la conciencia de clase; entre “ellos” y “nosotros” no todo está jugado.
Características de la “Condición Salarial”
- Generalización del salario (P.E.A. Población Económicamente Activa): asalariados “burgueses”, profesiones intermedias, sector terciario.
- La condición obrera no desaparece, junto a otras categorías pasa a ocupar la parte inferior de la escala social.
El crecimiento económico y la protección social instalan el sentimiento de la posibilidad de mejorar la posición social a través del esfuerzo. Castel habla de cinco condiciones que aseguraron el pasaje desde la relación salarial de principios de la industrialización (condición proletaria) hasta la relación salarial “fordista” (condición obrera). Primera Condición: una separación rígida entre quienes trabajan efectiva y regularmente, y los inactivos o semiactivos, que hay que excluir del mercado de trabajo, o sea integrar bajo formas reguladas.
De la condición obrera a la condición salarial
La homogeneidad de la clase obrera favorece la identidad y consciencia de clase. Las condiciones de vida obreras se integran desde la subordinación. Pero la oposición entre reforma y revolución se va erosionando progresivamente por una transformación de naturaleza sociológica. Transformación producida en unos 40 años (1930 -1970) diríamos que el particularismo obrero no fue suprimido, pero dejó de desempeñar el papel de “atractor” (papel que tenían los asalariados obreros pero que fue reemplazado por los empleados de la clase media). Es entonces que con la ampliación y heterogeneidad de los asalariados, la clase obrera es destituida como punta de lanza (lo que va por delante en todo momento) en la promoción del sector asalariado.
Esto sucedió por el gran crecimiento de la población económicamente activa. Se dan procesos de diferenciación entre asalariados. Crecen los asalariados no obreros (2,7 millones en 1931 y 7,9 millones en 1975). El desarrollo de actividades “terciarias” (servicios en el comercio, bancos, administraciones públicas locales y del Estado) generó la proliferación (reproducción) de asalariados “no obreros”.
La condición obrera había quedado superada por una diversidad de categorías de asalariados y peligraba su cohesión interna: obreros especializados, calificados y sin calificación; inmigrantes, mujeres recién incorporadas al mercado de trabajo; empleados públicos.
El trabajo obrero dejó de ser el paradigma (modelo de algo) de la producción de “obras”. La mayoría desarrollaba actividades “infra productivas”: mantenimiento, embalaje, limpieza, custodia, etc.
En general se ubica en 1973 la “crisis” a partir de la cual comenzó a degradarse la condición salarial. La condición obrera no sólo había quedado rodeada y superada por una gama de actividades salariales en diversificación creciente, sino que también peligraba su coherencia interna.
Rol mediador entre los intereses de los empleadores y los empleados.
El “Estado social” o “Estado de bienestar social” (Welfare State)
El Estado social tiene su apogeo en Europa y América luego de la segunda guerra mundial (1945) hasta la década de 1970.
Sus antecedentes se ubican en la legislación social de Bismarck en la década de 1880. Antes aún se ubican las políticas asistencialistas, como la Ley de Pobres de 1601, 1662 y 1782 en Inglaterra.
El Estado Social se orienta a la universalización de la protección social. Se destacan las doctrinas de J.M. Keynes y W. Beveridge en la justificación de la intervención del Estado (contra el “laissez faire” liberal).
Alemania, 1882: legislación ideada por Otto von Bismarck convierte a Alemania en el primer país del mundo en aprobar un programa de seguridad social para los trabajadores.
Contemplaba: seguro de enfermedad, seguro frente a accidentes de trabajo y un sistema de pensiones por jubilación.
Principios Keynesianos: el Estado velaba por la correspondencia entre los objetivos económicos, los objetivos políticos y los objetivos sociales: circularidad de una regulación que pasaba sobre la economía para promover lo social, y que hacía de lo social el medio para sacar a flote la economía cuando esta se hundía.
Desarrollo de la propiedad social: nacionalizaciones y servicios públicos y equipamientos colectivos. (A principios de la década de 1950, las inversiones públicas en las industrias básicas eran superiores a las del sector privado).
La búsqueda de un compromiso entre los diferentes asociados en el proceso de crecimiento… El papel regulador del Estado, actúa en un tercer registro, el de las relaciones entre los “asociados sociales”. Se trataba de abordar de un modo contractual (derivado de un contrato), por iniciativa o con el arbitraje del Estado, los intereses divergentes de empleadores y asalariados.
Dos medidas que tuvieron un impacto considerable para la consolidación de la condición salarial fueron:
- El salario mínimo por categoría e indexado con el aumento de precios: primer grado de pertenencia al estatuto de asalariado. El salario deja de ser sólo un modo de retribución económica. Fue esencial porque definían y otorgan un estatuto legal a las condiciones mínimas de acceso a la condición salarial.
- La mensualización fue otro punto fuerte de la consolidación de la condición salarial, el salario deja de retribuir una tarea puntual para convertirse en una asignación global. Propuesta por el gobierno, ejemplifica el papel del Estado en el desarrollo de las políticas contractuales.
¿Qué concepción tiene Castel del trabajo? ¿Por qué él entiende que el trabajo es “un soporte privilegiado de la estructura”?
El trabajo es un factor determinante para asignar posiciones a los individuos en la dinámica social (soporte de inscripción en la estructura social), existe una fuerte correlación entre el rol que ocupa el individuo en la división social y la participación en las redes de sociabilidad y en los sistemas de protección (cubren individuos de los riesgos de la existencia). Tiene una concepción diferente a la de Marx.
¿Cómo concibe el autor las zonas de cohesión social? ¿Por qué considera que la “zona de vulnerabilidad ocupa una posición estratégica”?
Las zonas de cohesión social es “la asociación entre el trabajo estable/inserción relacional sólida” (la ubicación va a estar dada por la ubicación en la zona de trabajo), es decir, el lugar en el que están inscriptos los individuos por trabajar (división social del trabajo) y a las redes de sociabilidad.
Si el individuo tiene un trabajo estable, los vínculos van a ser sólidos, entonces estos se ubican en una zona de cohesión. Pero la ausencia de participación o trabajo estable (improductividad o precarización del trabajo) provoca la desafiliación o exclusión, se encuentran en una zona de vulnerabilidad social.
¿A qué se refiere el autor con la “metamorfosis” de la cuestión social?
La metamorfosis es la dialéctica de lo igual y lo diferente, es decir, lo que trae nuevo y de permanente, la problemática puede ser nueva pero no la problematización. Explica porque hace un desarrollo histórico de la problematización, ya que si le hacemos las mismas preguntas a los hechos en un momento y otro nos va a dar cuenta el proceso de la problematización y las transformación de la problemática.
¿Qué quiere decir “una problemática nueva” pero “no otra problematización”?
La problematización son las características comunes que tiene un proceso con otro, entonces la problemática sería la manifestación de esta problematización, pero la problematización sigue siendo la misma. Castel se basa en la historia para justificar o argumentar, utiliza procesos homólogos (haz de interrogantes) para identificar la problematización y la problemática.
Para Castel la cuestión social
Es una aporía, lo que significa una paradoja o dificultad lógica insuperable, podemos entender, que Castel al ser Durkheimiano, entiende a la cuestión social como aquello natural a la sociedad que siempre existió y existirá, también lo podemos relacionar a la problematización, como aquel proceso que a pesar de los siglos sigue siendo homólogo a un proceso anterior. Entonces por esta aporía la sociedad experimenta un enigma (difícil de comprender por su sentido oculto) de su cohesión social y evitar el riesgo de la fractura, por lo que en la sociedad existen contradicciones que necesitan enlazar para que no se fracture. Es un desafío, ya que pone en cuestión la capacidad de la sociedad para existir como un conjunto de vínculos interrelacionados, es decir, la sociedad es posible por la solidaridad (relación de interdependencia y fundamento del pacto social), la propia sociedad crea instituciones para la cohesión social.
Castel: El ascenso de las incertidumbres. ¿Más allá del salario, más allá del empleo?
Luego de 1970 el empleo clásico que adoptó la sociedad salarial, era un empleo estable, a tiempo completo, programado para durar (tiempo indeterminado) y estaba enmarcado en el derecho del trabajo y la protección social (estatuto). Para cualquier jerarquía que ocupa el trabajador en la división social de trabajo el estatuto del empleo representaba para todos la base de la economía de la solidaridad, es decir, la solidaridad es un componente fundamental de la ciudadanía que está inscripto en el estatuto del empleo (regulaciones). Es una estructura de continuum diferenciado de posiciones. Se observa una transformación profunda en la condición salarial, una pérdida hegemónica del empleo clásico. Entonces según Castel existe un deslizamiento del empleo clásico hacia otras formas de actividad por debajo del empleo, que desembocará en una sociedad de plena actividad no de pleno empleo. Las transformaciones son:
- La desocupación masiva: es la existencia irreductible de personas fuera del trabajo. Los solicitantes de empleo se ubicarían en el no empleo más que en la desocupación, porque existe una falta de empleos por lo que estos no pueden ser absorbidos.
- Precarización de las relaciones de trabajo: se desató un crecimiento en las formas atípicas del empleo, quiere decir, empleos por tareas temporarias, duración limitada, tiempo parcial. Se le llama precaria a esta condición bajo la cual se convierte en un registro propio de la organización del trabajo, convirtiéndose de alguna manera en algo normal.