La Vida de Daniel Serrallonga: Locura y Degeneración en la Sociedad

Historia y Trama de la Obra

La obra cuenta la vida de Daniel Serrallonga, desde su juventud hasta su muerte prematura, y su progresivo e irreversible proceso de enloquecimiento. La locura, tema central, impide una trama clásica de planteamiento, nudo y desenlace, ya que no hay un argumento unitario que se vaya desarrollando. El hilo conductor que une los episodios es la conflictiva vida del protagonista.

Personajes Principales

Daniel Serrallonga

Protagonista ausente, del que se habla al principio de la novela, pero que solo aparece al principio y al final. La novela se centra en la información que otros personajes proporcionan sobre él. Se le describe con cabeza grande, frente abombada y corta, cejas borrosas y ojos redondos. Alto y “esprimatxot”, vestía con descuido, con mal gusto por las corbatas (siempre de colores rabiosos y con el nudo a medio hacer). Solía ir siempre solo, con cara preocupada, muy deprisa y tieso como un tambor mayor, casi siempre secándose el sudor de la frente, el cuello y las muñecas.

El Narrador

Personaje crucial en la novela. Aunque no se describe físicamente ni se menciona su nombre, es quien transmite la historia. Se presenta como un personaje más y todo el libro está basado en su punto de vista, actuando como narrador testigo. Apenas se dan datos sobre él, salvo que estudió Derecho, tiene un despacho de abogado y se casó con Matildeta. Sus opiniones son fundamentales, ya que ofrece una visión más sentimental y humanista sobre la enfermedad de Serrallonga, a diferencia de Giberga, que se basa en una visión científica. Estos dos contrastes de opiniones constituyen la temática principal de la novela.

Armengol

Estudió Derecho y más tarde obtuvo el título de doctor en Derecho. Su función es introducir al lector en el caso de Serrallonga a través del narrador. Relata la vida de Serrallonga con frialdad y un tono de mofa. Es cruel con su amigo, utilizándolo como bufón, ridiculizándolo y humillándolo. Su perspectiva sobre la enfermedad de Daniel no es científica (como Giberga) ni humanística (como el narrador), sino humorística e incluso cruel. Esto refleja la crueldad e insensibilidad de la sociedad hacia los inadaptados de la época.

Próspero Giberga

Presenta a Serrallonga a Armengol. Como hijo del médico que trató a Daniel, transmite una óptica realista y científica de la enfermedad. Esta visión se opone a la de otros personajes, creando el conflicto central de la novela. Aparece en el quinto capítulo como médico de Vilaniu, justificando la teoría de la herencia biológica: una de las hermanas de Serrallonga es epiléptica, la otra ninfómana y su padre también era loco. Defiende el punto de vista científico y la teoría de la vertiente genética, que sostenía que los problemas mentales se transmitían de padres a hijos.

Personajes Secundarios

  • Ignacio Serrallonga: Padre de Daniel. Se suicidó, según el médico, a causa de su locura. Giberga revela que abandonó sus obligaciones para dedicarse a la política, se casó por compromiso y desconfiaba de la paternidad de sus hijas.
  • Adela y Carolina, las hermanas: Adela es descrita como “un diablo con faldillas” y Carolina, además de ser “peor que la grande”, es “jorobada de cuerpo y alma”. Ambas son presentadas como locas, reforzando la teoría de Giberga sobre la herencia familiar.

Espacio y Punto de Vista

Espacio

La mayor parte de la novela transcurre en espacios cerrados: el Café de las Delicias, donde el narrador conoce a Serrallonga; el Suizo, donde hablan sobre la muerte del padre de Daniel; la casa de Serrallonga; y Vilaniu, donde el narrador conoce a Adela. También hay momentos en los que los personajes conversan en plena calle.

Punto de Vista

El punto de vista es el de un observador. El narrador no es el protagonista, no revela su nombre ni ofrece muchos datos sobre sí mismo. Explica lo que ve y oye, y a veces opina, pero no participa en la trama principal. También adopta un punto de vista colectivo, ya que relata lo que le cuentan sus amigos. Por ejemplo, cuando Giberga explica la situación del padre de Serrallonga antes de morir, lo hace mediante el diálogo, no es el narrador quien lo explica directamente.