El Retorno de los Borbones
Tras el Golpe del General Pavía y la disolución de las Cortes, se estableció un régimen militar bajo la presidencia del General Serrano. Serrano formó Gobierno compuesto de demócratas radicales y militares, concentrando su esfuerzo en sofocar los focos cantonalistas, hacer frente a los carlistas y restablecer el orden. Se fueron eliminando los últimos reductos republicanos, mientras que los grupos burgueses y las clases medias se decantaron por la opción alfonsina, representada por Cánovas del Castillo.
El Gobierno de Serrano aumentó los impuestos para detener el avance de los carlistas, pero a finales de año, la propaganda a favor de Alfonso XII, hijo de Isabel II, había calado.
Así, Alfonso XII firmaba el Manifiesto de Sandhurst, donde el futuro rey garantizaba una monarquía constitucional democrática. Entonces, los generales Martínez Campos y Jovellar hicieron un pronunciamiento militar a favor de la Monarquía de Alfonso XII, el gobierno no puso resistencia y Cánovas del Castillo fue Regente hasta la llegada del nuevo rey, en Enero de 1875.
Tras su proclamación, Alfonso XII ratifica a Cánovas del Castillo como Presidente del Gobierno y su programa consta de tres objetivos: la adaptación del régimen a la vida política, con la eliminación de las leyes más radicales del Sexenio; una nueva Constitución; y la Paz.
Primeras medidas de Cánovas del Castillo:
- Sustitución de los Gobernadores Civiles, Presidentes de las Diputaciones y Alcaldes por hombres afines a la Corona.
- Cierre de periódicos.
- Mantener el orden público.
- Eliminación del Matrimonio Civil.
- Se restableció el Concordato con Roma.
Como se ve, se trataba de una vuelta al pasado, pero la aplicación de medidas represivas fue suave. Además, se declaró una Amnistía y hubo un contacto con los líderes progresistas y demócratas para que aceptaran la Monarquía y se sumaran a la nueva Constitución.
La Constitución de 1876 y el Fin de las Guerras Carlistas y Cubanas
La nueva Constitución se inicia ya en 1875, en donde una Asamblea de ex senadores y ex diputados monárquicos elegidos por Cánovas del Castillo encargó la elaboración de un borrador. En Diciembre de 1875 se convocaron elecciones mediante sufragio universal, sin embargo, las elecciones fueron manipuladas, con el fin de que triunfaran los candidatos canovistas.
La Constitución de 1876 es una síntesis de la de 1845 y 1869, que permitía gobernar de manera estable a todas las tendencias políticas y evitar los pronunciamientos militares. Las principales Características de esta Constitución son:
- Soberanía reside en las Cortes con el Rey.
- La declaración de Derechos y Deberes de 1869 hizo que se restringieran, especialmente los de imprenta, expresión, asociación y reunión.
- El poder Legislativo reside en las Cortes con el Rey. La Corona tiene la potestad de sancionar las leyes, una ley por legislatura, además de poder disolver la Cámara y convocar elecciones en un plazo de 3 meses.
- Cortes Bicamerales, con una Cámara Alta compuesta por tres tipos de Senadores: por derecho propio, por designación real y por mayor contribuyente. Congreso, mediante sufragio directo.
- El poder ejecutivo lo ejerce la Corona a través de sus Ministros. El rey elige libremente al jefe de gobierno y no responde ante las Cortes.
- Ayuntamientos y Diputaciones quedan bajo el control gubernamental.
- Confesionalidad del Estado.
- Sostenimiento del culto y clero a cambio de la libertad de cultos.
Como puede verse, esta constitución era conservadora, aunque flexible, para garantizar la estabilidad del régimen. La pacificación iba llegando con la caída de la zona carlista catalana y, a lo largo de 1875, el estrechamiento del cerco al núcleo navarro y vasco, hizo que se rindieran los carlistas en 1876 con el Manifiesto de Somorrostro.
El final de la guerra carlista permitió enviar a Cuba tropas, donde se consiguió la pacificación, ya que las promesas de tímidas reformas y de una mayor autonomía contentaron a la burguesía cubana y al gobierno de EEUU.