La Oposición al Régimen de Franco: De la Posguerra a la Transición
Primeras Décadas de Represión y Resistencia
Desde sus inicios, el régimen de Franco tuvo un carácter semipluralista, estableciendo una distinción tajante entre un pluralismo limitado dentro del sistema autoritario y la oposición. Desde el comienzo del Movimiento Nacional, se proscribió toda oposición, imponiendo una dura represión durante la primera década posterior a la Guerra Civil. Los republicanos establecieron un gobierno en el exilio, primero en México y más tarde en París. En la década de 1940-50, la CNT, el PC, los socialistas y grupos regionalistas mantuvieron estructuras clandestinas de oposición. El apogeo de esta actividad terminó al finalizar la Segunda Guerra Mundial, un acontecimiento que muchos consideraron como el anuncio del derrocamiento del régimen. Sin embargo, estas esperanzas se vieron defraudadas, y el espíritu de lucha de los grupos de oposición se deterioró gravemente hacia finales de esa década.
En los años cincuenta, el gobierno se hizo más tolerante. Las amnistías masivas decretadas en las décadas de los 40 y 50 concedieron la libertad a la mayoría de presos políticos de la Guerra Civil. Se permitió a los opositores reunirse libremente en privado, siempre y cuando no se llevasen a cabo actos de oposición pública al régimen.
Tipos de Oposición en los Años 60
En la década de los 60, Juan Linz dividía a la oposición en tres categorías: legal, alegal e ilegal.
- Oposición legal: Predominaban los monárquicos legitimistas, los carlistas y los falangistas insatisfechos con la orientación del régimen y que consideraban que no se habían seguido sus doctrinas al pie de la letra.
- Oposición alegal: Integrada por elementos políticos y sociales de cierta respetabilidad que habían sido aliados de los nacionales durante la Guerra Civil, pero que mantenían una orientación mucho más liberal. Entre sus filas se encontraban monárquicos, demócratas cristianos, herederos de la CEDA de anteguerra y otros pequeños grupos de orientación moderada. A pesar de estar más controlado y restringido por el régimen que la oposición legal, por lo general no era objeto de una represión propiamente dicha.
- Oposición ilegal: Formada por los sucesores de los grupos regionalistas e izquierdas derrotados en la Guerra Civil. Este grupo sí estuvo más reprimido, ya que, a pesar de la moderación de la policía, seguían siendo objeto de palizas, arrestos, etc. La más poderosa de las nuevas organizaciones radicales después de la Guerra Civil fue una variante marxista del nacionalismo vasco, la hoy denominada ETA. A pesar de que su actividad fue en aumento durante los años 60, la oposición al franquismo siguió siendo impotente, en términos generales, hasta principios de la década siguiente.
La Cuestión Monárquica y la Relación con Don Juan
El sector político con el que Franco estaba más ansioso por llegar a un acuerdo era el de los monárquicos, que a partir de 1941 estuvieron representados por Juan de Borbón, conde de Barcelona, hijo y heredero de Alfonso XIII. Franco, aunque seguía controlando con mano firme la situación, consideraba que la única legitimación duradera que su régimen podía alcanzar era mediante la restauración de la monarquía tradicional, ratificada en sus propios términos mediante el referéndum de 1947. Franco llegó a un acuerdo con el conde de Barcelona en 1948, estipulando que su hijo mayor y heredero al trono, el príncipe Juan Carlos, se educara en España. De este modo, Franco pretendía manipular la enseñanza del príncipe y formarlo a su imagen y semejanza. Sin embargo, el hecho de que el príncipe Juan Carlos residiera y recibiera su educación en España a partir de 1948 no eliminó las fricciones con la oposición monárquica alegal, que se manifestaron de forma intermitente hasta la muerte del Caudillo.
El Punto de Inflexión de 1956
El año 1956 se puede considerar un punto de inflexión en el enfrentamiento al régimen. A partir de este momento, se evolucionó hacia formas más políticas, incidiendo en la movilización de las clases trabajadoras, en el mundo universitario y en el segmento intelectual. La acción armada disminuyó, llegando a desaparecer, y resurgiendo a finales de la década de los 70 por sectores radicales del nacionalismo vasco en forma de guerrillas.
Sucesos Universitarios de 1956
– Comenzaron con la formación de un Congreso Libre de estudiantes. Esta idea pasaba por la desmantelación previa del SEU , como consecuencia se suceden manifestaciones, reuniones , asaltos etc. Que culminaron finalmente el 10 de Febrero , con una manifestación donde intervino la fuerza publica para pararla y donde un joven falangista recibió un disparo en la cabeza sin haber un claro culpable. La gravedad de los incidentes tuvieron repercusiones políticas y se suspendieron durante 3 meses los artículos 14 , 15 , y 18 del fuero de los españoles.