1. Las Consecuencias Económicas de la Primera Guerra Mundial
Al finalizar la Primera Guerra Mundial, las economías, en especial las de los países europeos, se enfrentaban a graves problemas. La guerra había supuesto la pérdida de millones de vidas humanas en el campo de batalla, la destrucción de bienes de equipo e infraestructuras, y la paralización de nuevas inversiones para el mantenimiento y la renovación del aparato productivo.
La Consecuencia de los Tratados de Paz
Los tratados de paz también tuvieron efectos negativos. No solo impusieron fuertes indemnizaciones a los países vencidos, sino que además fragmentaron los grandes imperios de Europa central y oriental. Se desmantelaron grandes espacios económicos, surgieron nuevas fronteras aduaneras y Alemania perdió varias regiones mineras.
Se añadieron dos problemas: la falta de entendimiento entre Europa y Estados Unidos sobre la cuestión de las deudas entre los aliados, y el pago de las reparaciones de guerra.
Los Efectos para la Economía Interna
Una de las consecuencias fue el desequilibrio comercial entre los países no industrializados y las naciones industriales. Entre 1914 y 1920 hubo una continua subida de precios por los impuestos y se redujeron las importaciones.
El conflicto desorganizó el sistema monetario internacional basado en la convertibilidad de las monedas en oro. En teoría, se mantuvo el sistema del patrón oro (sistema monetario internacional vigente hasta los años 30, que establecía que las monedas de todos los países que pertenecían a este sistema eran cambiables por una cantidad fija de oro). Sin embargo, en la práctica se abandonó, porque algunos países, para hacer frente a los pagos de guerra, emitieron más dinero del que podían respaldar.
2. El Declive de Europa y el Auge de Estados Unidos
Tras la Primera Guerra Mundial se quebró el sistema económico internacional anterior a 1914. Estados Unidos pasó a tener la hegemonía en la economía mundial.
Los Cambios en la Industria y el Comercio
Europa decayó en peso económico y financiero, mientras que Estados Unidos se convirtió en la primera potencia industrial del mundo. Respecto del comercio, Europa fue perdiendo mercados en ultramar. La balanza comercial de Estados Unidos experimentó tal superávit que le llevó a acumular casi la mitad de las reservas de oro mundiales.
Los Cambios Financieros
Los préstamos que Estados Unidos concedió a Europa durante la guerra cambiaron su posición de país deudor a país acreedor. La supremacía de Estados Unidos se manifestó en que el dólar cambió la libra como principal moneda internacional y la Bolsa de Nueva York se convirtió en el centro financiero mundial. Sin embargo, Estados Unidos no supo adaptarse bien a la nueva situación y adoptó un comportamiento peligroso en sus préstamos.
3. La Crisis Económica de Posguerra
Una vez lograda la paz, la economía internacional conoció un intenso pero corto boom económico. Los países europeos necesitaban bienes de equipo para reconstruir las infraestructuras y el aparato productivo. El crecimiento económico y la expansión de la deuda favorecieron una brusca alza de los precios que generó una inflación a nivel mundial. Pronto quedó interrumpido el crecimiento porque Estados Unidos frenó bruscamente su política de créditos al exterior, provocando la grave recesión de 1920-1921.
4. La Recuperación y sus Límites
Para llevar a cabo la reconstrucción de la economía internacional se intentó restaurar el sistema económico liberal de la preguerra.
Problemas de la Inflación:
- Estados Unidos y Reino Unido lograron detenerla adoptando una severa política deflacionista (política económica cuyo principal objetivo es frenar el alza de precios. Para conseguirlo se reduce el número de billetes en circulación y se dificulta la concesión de créditos): recortes del gasto público, subida de impuestos, reducción de la masa monetaria en circulación y de los créditos. Junto a estas medidas, intensificaron el proteccionismo.
- Francia, Bélgica e Italia, que tenían fuertes deudas, se vieron impotentes para contener la inflación en sus economías.
- Alemania, Austria, Hungría, Checoslovaquia y Polonia perdieron el control sobre los precios y pasaron a la hiperinflación (los precios se dispararon).
El Restablecimiento del Sistema Económico Internacional: El Plan Dawes
Para restablecer el sistema monetario se convocó la Conferencia Internacional de Génova en 1922 con el objetivo de estabilizar las monedas y retomar el patrón oro. Se estableció el llamado patrón cambio oro, que suponía respaldar la moneda propia en parte con las reservas de oro y en parte con divisas de otros países. La mayoría de Estados adoptaron este sistema.
El proteccionismo avanzó en todos los países y subieron las tarifas aduaneras (impuesto que hay que pagar sobre los bienes importados).
La estabilización de las monedas europeas dependía también del arreglo de las deudas de los aliados. En 1924 se aceptó la propuesta de Estados Unidos, el llamado Plan Dawes, que tenía como objetivo la normalización de la economía alemana. Alemania consiguió estabilizar su economía en torno a una nueva moneda, el reichsmark, que permitió iniciar una recuperación económica a partir de 1924. El Plan Dawes previó la reducción de los intereses de las deudas de los aliados, pero todas estas medidas crearon nuevos problemas: supusieron que el equilibrio de la economía mundial pasaba a descansar casi exclusivamente en las acciones de los capitales de Estados Unidos.