La Regencia de Espartero
Tras el final de la Primera Guerra Carlista, aprovechando su popularidad tras la victoria, el general Espartero se enfrentó contra la regente y en 1841 las Cortes eligieron a Espartero como regente hasta 1843. Implantó una política autoritaria y alcanzó un acuerdo de libre comercio con Reino Unido que provocó un motín en Barcelona en defensa de la industria textil. Como represalia, Espartero ordenó el bombardeo de la ciudad. Esto provocó el rechazo de los moderados y otros sectores que promovieron un pronunciamiento encabezado por el general Narváez que forzó la renuncia de Espartero. Las Cortes declararon la mayoría de edad de Isabel II con 13 años.
La Década Moderada
El general Narváez fue designado presidente del gobierno. El régimen liberal dio un giro hacia posiciones conservadoras que quedaron fijadas en la Constitución de 1845: soberanía compartida entre el monarca y la nación y un sistema bicameral. Se otorgaba al monarca la capacidad de nombrar o cesar ministros y disolver las Cortes. Reconocía el catolicismo como la religión oficial.
Organización centralista del estado, creación de los gobernadores civiles y de la Guardia Civil. Se promulgó el Código Penal, se introdujeron impuestos indirectos al consumo y el Banco de San Fernando recibió el monopolio de emisión de moneda.
El Bienio Progresista
La inestabilidad política y el descontento social ante los impuestos indirectos hizo que O’Donnell encabezara un pronunciamiento militar en Vicálvaro, aunque no tuvo el éxito deseado. La alternativa fue buscar el apoyo popular. Cánovas del Castillo redactó el Manifiesto del Manzanares. Isabel II mandó formar gobierno a Espartero dando comienzo el Bienio Progresista, cuyas principales medidas fueron:
- La Desamortización de Madoz.
- La Ley General de Ferrocarriles.
- La convocatoria de elecciones a Cortes Constituyentes.
- Reafirmación del principio de soberanía nacional y tolerancia religiosa.
El Sexenio Democrático
En 1868 se constituye un gobierno provisional, presidido por el general Serrano y que incluía al almirante Topete y al general Prim. Durante la Gloriosa se habían constituido numerosas juntas revolucionarias de corte republicano. El gobierno provisional las disolvió y convocó elecciones constituyentes por sufragio universal masculino. Los republicanos se consolidaron en los núcleos urbanos + Constitución de la Gloriosa.
Sancionada la nueva Constitución que establecía la monarquía parlamentaria, fue necesario hallar un nuevo rey, el cual no podía ser Borbón ni tampoco carlista. La elección de Prim fue Amadeo de Saboya, que apenas contó con apoyos y el mismo día en que se dirigía a España, Prim sufrió un atentado mortal. En 1871 las Cortes proclamaron rey a Amadeo I. Fue una situación inestable con una fuerte oposición e inestabilidad política. Ante esta situación, Amadeo decidió abandonar el trono abdicando en 1872 y sucediéndose así la I República.
La I República
El Congreso y el Senado proclamaron la República por amplia mayoría. Fue un periodo breve y convulso:
La República Federal
Tuvo que afrontar una situación muy difícil por el descontento social y la crisis económica mundial. Se decretó la suspensión del sistema de quintas y la convocatoria a elecciones a Cortes Constituyentes. En ellas, los republicanos federalistas obtuvieron una gran mayoría.
La Constitución de 1873
Definía la nación española como una república federal organizada en 17 estados, cada uno con una constitución propia. La soberanía residía en todos los ciudadanos por sufragio universal y se establecía una declaración de derechos de la Constitución de 1869. El poder ejecutivo sería ejercido por el Consejo de Ministros y el poder legislativo por las Cortes bicamerales. El poder judicial residía en el Tribunal Supremo y el presidente de la República debía mantener el equilibrio entre los estados de la federación. Se declaró la aconfesionalidad del estado.
La República Moderada
Algunos territorios se declararon independientes redactando sus propias leyes. Pi y Margall dimitió y fue sustituido por Salmerón, el cual dimitió ante su negativa a firmar unas penas de muerte impuestas por el ejército. A este le sustituyó Emilio Castelar, que consiguió que las Cortes le otorgasen facultades extraordinarias para gobernar. Aprovechó esto para suspender las Cortes.
La República Unitaria
Cuando los diputados se disponían a elegir un nuevo presidente, un golpe de estado disolvió las Cortes. Se eligió como presidente al general Serrano, que restituyó la Constitución de 1869 y estableció un gobierno autoritario. Era evidente el agotamiento de cualquier opción política que no fuera la Restauración borbónica, así que el general Martínez Campos se pronunciaba a favor de la restauración de la monarquía borbónica, por lo que pasaría a reinar en 1875 Alfonso XII.