Gobierno Platón


La legislación y la moralidad estaban corrompidas hasta tal punto que yo llenos de ardor al principio para trabajar por el píen publico, considerando esta situación y de qué manera iba todo a la deriva, acabe por quedar aturdido. […] finalmente, llegue a comprender que todos los Estados actuales están mal gobernados, pues su legislación es prácticamente sin unir unos preparativos enérgicos a unas circunstancias felices. Entonces me sentí irresistiblemente movido a alabar la verdadera filosofía, ya proclamar que solo con su luz se puede reconocer donde esta la justicia en la vida publica y en la vida privada. Así pues, no acabaran los males para el hombre hasta que llegue la raza de los puros y auténticos filósofos al poder, o hasta que los jefes de las ciudades, por una especial gracia de la divinidad, no se pongan verdaderamente a filosofoar. Aquí esta todo el proyecto filosófico de Platón.
Su filosofía tiene, pues, una finalidad claramente política. Y también su actividad externa: la fundación de la Academia pretende educar a esos futuros gobernantes filósofos; y sus viajes a Sicilia con un intento de convertir a la filosofía a los tiranos de Siracusa y realizar prácticamente su sueño. Esto ambiciona a Platón: crear un estado en el que la muerte de Sócrates- el mejor de los hombres que hemos conocido, el mas sabio y el mas justo, ultimas palabras de Fedon-sea imposible. De los primeros filósofos no nos quedan sino escasos fragmentos. De Platón nos quedan- con toda probabilidad- todos sus Diálogos(desde el primero, hacia el 393), conservados cuidadosamente en la biblioteca de la Academia. La investigación ha permitido establecer su orden cronológico, en el que- salvo alunas pequeñas variantes- existe un acuerdo bastante unánime. La mayoría de estos Diálogos tienen como protagonista a Sócrates, y aunque solo los primeros reflejan el pensamiento Socrático, expresan siempre su modo de filosofar: un filosofar en compañía de otros, una indagación continua, un sistema nunca cerrado. Por la riqueza de los temas abordados se ha podido decir que la filosofía occidental no es sino notas a pie de página de los diálogos de Platón(A.N. Whitehead). Resulta absolutamente imposible saber si la nseñanza oral de Platón en la Academia- lo que se ha llamado doctrinas no escritas de Platón- coincide o no totalmente con la doctrina de sus Diálogos. Se sugiere que Platón no daba demasiado valor a la palabra escrita (en la que el filosofar ya esta fijado y muerto); y Aristóteles- que fue discípulo de Platón en la Academia- le atribuye doctrinas que no aparecen en los Diálogos.


La legislación y la moralidad estaban corrompidas hasta tal punto que yo llenos de ardor al principio para trabajar por el píen publico, considerando esta situación y de qué manera iba todo a la deriva, acabe por quedar aturdido. […] finalmente, llegue a comprender que todos los Estados actuales están mal gobernados, pues su legislación es prácticamente sin unir unos preparativos enérgicos a unas circunstancias felices. Entonces me sentí irresistiblemente movido a alabar la verdadera filosofía, ya proclamar que solo con su luz se puede reconocer donde esta la justicia en la vida publica y en la vida privada. Así pues, no acabaran los males para el hombre hasta que llegue la raza de los puros y auténticos filósofos al poder, o hasta que los jefes de las ciudades, por una especial gracia de la divinidad, no se pongan verdaderamente a filosofoar. Aquí esta todo el proyecto filosófico de Platón. Su filosofía tiene, pues, una finalidad claramente política. Y también su actividad externa: la fundación de la Academia pretende educar a esos futuros gobernantes filósofos; y sus viajes a Sicilia con un intento de convertir a la filosofía a los tiranos de Siracusa y realizar prácticamente su sueño. Esto ambiciona a Platón: crear un estado en el que la muerte de Sócrates- el mejor de los hombres que hemos conocido, el mas sabio y el mas justo, ultimas palabras de Fedon-sea imposible. De los primeros filósofos no nos quedan sino escasos fragmentos. De Platón nos quedan- con toda probabilidad- todos sus Diálogos(desde el primero, hacia el 393), conservados cuidadosamente en la biblioteca de la Academia. La investigación ha permitido establecer su orden cronológico, en el que- salvo alunas pequeñas variantes- existe un acuerdo bastante unánime. La mayoría de estos Diálogos tienen como protagonista a Sócrates, y aunque solo los primeros reflejan el pensamiento Socrático, expresan siempre su modo de filosofar: un filosofar en compañía de otros, una indagación continua, un sistema nunca cerrado. Por la riqueza de los temas abordados se ha podido decir que la filosofía occidental no es sino notas a pie de página de los diálogos de Platón(A.N. Whitehead). Resulta absolutamente imposible saber si la nseñanza oral de Platón en la Academia- lo que se ha llamado doctrinas no escritas de Platón- coincide o no totalmente con la doctrina de sus Diálogos. Se sugiere que Platón no daba demasiado valor a la palabra escrita (en la que el filosofar ya esta fijado y muerto); y Aristóteles- que fue discípulo de Platón en la Academia- le atribuye doctrinas que no aparecen en los Diálogos.


La legislación y la moralidad estaban corrompidas hasta tal punto que yo llenos de ardor al principio para trabajar por el píen publico, considerando esta situación y de qué manera iba todo a la deriva, acabe por quedar aturdido. […] finalmente, llegue a comprender que todos los Estados actuales están mal gobernados, pues su legislación es prácticamente sin unir unos preparativos enérgicos a unas circunstancias felices. Entonces me sentí irresistiblemente movido a alabar la verdadera filosofía, ya proclamar que solo con su luz se puede reconocer donde esta la justicia en la vida publica y en la vida privada. Así pues, no acabaran los males para el hombre hasta que llegue la raza de los puros y auténticos filósofos al poder, o hasta que los jefes de las ciudades, por una especial gracia de la divinidad, no se pongan verdaderamente a filosofoar. Aquí esta todo el proyecto filosófico de Platón. Su filosofía tiene, pues, una finalidad claramente política. Y también su actividad externa: la fundación de la Academia pretende educar a esos futuros gobernantes filósofos; y sus viajes a Sicilia con un intento de convertir a la filosofía a los tiranos de Siracusa y realizar prácticamente su sueño. Esto ambiciona a Platón: crear un estado en el que la muerte de Sócrates- el mejor de los hombres que hemos conocido, el mas sabio y el mas justo, ultimas palabras de Fedon-sea imposible. De los primeros filósofos no nos quedan sino escasos fragmentos. De Platón nos quedan- con toda probabilidad- todos sus Diálogos(desde el primero, hacia el 393), conservados cuidadosamente en la biblioteca de la Academia. La investigación ha permitido establecer su orden cronológico, en el que- salvo alunas pequeñas variantes- existe un acuerdo bastante unánime. La mayoría de estos Diálogos tienen como protagonista a Sócrates, y aunque solo los primeros reflejan el pensamiento Socrático, expresan siempre su modo de filosofar: un filosofar en compañía de otros, una indagación continua, un sistema nunca cerrado. Por la riqueza de los temas abordados se ha podido decir que la filosofía occidental no es sino notas a pie de página de los diálogos de Platón(A.N. Whitehead). Resulta absolutamente imposible saber si la nseñanza oral de Platón en la Academia- lo que se ha llamado doctrinas no escritas de Platón- coincide o no totalmente con la doctrina de sus Diálogos. Se sugiere que Platón no daba demasiado valor a la palabra escrita (en la que el filosofar ya esta fijado y muerto); y Aristóteles- que fue discípulo de Platón en la Academia- le atribuye doctrinas que no aparecen en los Diálogos.


La legislación y la moralidad estaban corrompidas hasta tal punto que yo llenos de ardor al principio para trabajar por el píen publico, considerando esta situación y de qué manera iba todo a la deriva, acabe por quedar aturdido. […] finalmente, llegue a comprender que todos los Estados actuales están mal gobernados, pues su legislación es prácticamente sin unir unos preparativos enérgicos a unas circunstancias felices. Entonces me sentí irresistiblemente movido a alabar la verdadera filosofía, ya proclamar que solo con su luz se puede reconocer donde esta la justicia en la vida publica y en la vida privada. Así pues, no acabaran los males para el hombre hasta que llegue la raza de los puros y auténticos filósofos al poder, o hasta que los jefes de las ciudades, por una especial gracia de la divinidad, no se pongan verdaderamente a filosofoar. Aquí esta todo el proyecto filosófico de Platón. Su filosofía tiene, pues, una finalidad claramente política. Y también su actividad externa: la fundación de la Academia pretende educar a esos futuros gobernantes filósofos; y sus viajes a Sicilia con un intento de convertir a la filosofía a los tiranos de Siracusa y realizar prácticamente su sueño. Esto ambiciona a Platón: crear un estado en el que la muerte de Sócrates- el mejor de los hombres que hemos conocido, el mas sabio y el mas justo, ultimas palabras de Fedon-sea imposible. De los primeros filósofos no nos quedan sino escasos fragmentos. De Platón nos quedan- con toda probabilidad- todos sus Diálogos(desde el primero, hacia el 393), conservados cuidadosamente en la biblioteca de la Academia. La investigación ha permitido establecer su orden cronológico, en el que- salvo alunas pequeñas variantes- existe un acuerdo bastante unánime. La mayoría de estos Diálogos tienen como protagonista a Sócrates, y aunque solo los primeros reflejan el pensamiento Socrático, expresan siempre su modo de filosofar: un filosofar en compañía de otros, una indagación continua, un sistema nunca cerrado. Por la riqueza de los temas abordados se ha podido decir que la filosofía occidental no es sino notas a pie de página de los diálogos de Platón(A.N. Whitehead). Resulta absolutamente imposible saber si la nseñanza oral de Platón en la Academia- lo que se ha llamado doctrinas no escritas de Platón- coincide o no totalmente con la doctrina de sus Diálogos. Se sugiere que Platón no daba demasiado valor a la palabra escrita (en la que el filosofar ya esta fijado y muerto); y Aristóteles- que fue discípulo de Platón en la Academia- le atribuye doctrinas que no aparecen en los Diálogos.


La legislación y la moralidad estaban corrompidas hasta tal punto que yo llenos de ardor al principio para trabajar por el píen publico, considerando esta situación y de qué manera iba todo a la deriva, acabe por quedar aturdido. […] finalmente, llegue a comprender que todos los Estados actuales están mal gobernados, pues su legislación es prácticamente sin unir unos preparativos enérgicos a unas circunstancias felices. Entonces me sentí irresistiblemente movido a alabar la verdadera filosofía, ya proclamar que solo con su luz se puede reconocer donde esta la justicia en la vida publica y en la vida privada. Así pues, no acabaran los males para el hombre hasta que llegue la raza de los puros y auténticos filósofos al poder, o hasta que los jefes de las ciudades, por una especial gracia de la divinidad, no se pongan verdaderamente a filosofoar. Aquí esta todo el proyecto filosófico de Platón. Su filosofía tiene, pues, una finalidad claramente política. Y también su actividad externa: la fundación de la Academia pretende educar a esos futuros gobernantes filósofos; y sus viajes a Sicilia con un intento de convertir a la filosofía a los tiranos de Siracusa y realizar prácticamente su sueño. Esto ambiciona a Platón: crear un estado en el que la muerte de Sócrates- el mejor de los hombres que hemos conocido, el mas sabio y el mas justo, ultimas palabras de Fedon-sea imposible. De los primeros filósofos no nos quedan sino escasos fragmentos. De Platón nos quedan- con toda probabilidad- todos sus Diálogos(desde el primero, hacia el 393), conservados cuidadosamente en la biblioteca de la Academia. La investigación ha permitido establecer su orden cronológico, en el que- salvo alunas pequeñas variantes- existe un acuerdo bastante unánime. La mayoría de estos Diálogos tienen como protagonista a Sócrates, y aunque solo los primeros reflejan el pensamiento Socrático, expresan siempre su modo de filosofar: un filosofar en compañía de otros, una indagación continua, un sistema nunca cerrado. Por la riqueza de los temas abordados se ha podido decir que la filosofía occidental no es sino notas a pie de página de los diálogos de Platón(A.N. Whitehead). Resulta absolutamente imposible saber si la nseñanza oral de Platón en la Academia- lo que se ha llamado doctrinas no escritas de Platón- coincide o no totalmente con la doctrina de sus Diálogos. Se sugiere que Platón no daba demasiado valor a la palabra escrita (en la que el filosofar ya esta fijado y muerto); y Aristóteles- que fue discípulo de Platón en la Academia- le atribuye doctrinas que no aparecen en los Diálogos.


La legislación y la moralidad estaban corrompidas hasta tal punto que yo llenos de ardor al principio para trabajar por el píen publico, considerando esta situación y de qué manera iba todo a la deriva, acabe por quedar aturdido. […] finalmente, llegue a comprender que todos los Estados actuales están mal gobernados, pues su legislación es prácticamente sin unir unos preparativos enérgicos a unas circunstancias felices. Entonces me sentí irresistiblemente movido a alabar la verdadera filosofía, ya proclamar que solo con su luz se puede reconocer donde esta la justicia en la vida publica y en la vida privada. Así pues, no acabaran los males para el hombre hasta que llegue la raza de los puros y auténticos filósofos al poder, o hasta que los jefes de las ciudades, por una especial gracia de la divinidad, no se pongan verdaderamente a filosofoar. Aquí esta todo el proyecto filosófico de Platón. Su filosofía tiene, pues, una finalidad claramente política. Y también su actividad externa: la fundación de la Academia pretende educar a esos futuros gobernantes filósofos; y sus viajes a Sicilia con un intento de convertir a la filosofía a los tiranos de Siracusa y realizar prácticamente su sueño. Esto ambiciona a Platón: crear un estado en el que la muerte de Sócrates- el mejor de los hombres que hemos conocido, el mas sabio y el mas justo, ultimas palabras de Fedon-sea imposible. De los primeros filósofos no nos quedan sino escasos fragmentos. De Platón nos quedan- con toda probabilidad- todos sus Diálogos(desde el primero, hacia el 393), conservados cuidadosamente en la biblioteca de la Academia. La investigación ha permitido establecer su orden cronológico, en el que- salvo alunas pequeñas variantes- existe un acuerdo bastante unánime. La mayoría de estos Diálogos tienen como protagonista a Sócrates, y aunque solo los primeros reflejan el pensamiento Socrático, expresan siempre su modo de filosofar: un filosofar en compañía de otros, una indagación continua, un sistema nunca cerrado. Por la riqueza de los temas abordados se ha podido decir que la filosofía occidental no es sino notas a pie de página de los diálogos de Platón(A.N. Whitehead). Resulta absolutamente imposible saber si la nseñanza oral de Platón en la Academia- lo que se ha llamado doctrinas no escritas de Platón- coincide o no totalmente con la doctrina de sus Diálogos. Se sugiere que Platón no daba demasiado valor a la palabra escrita (en la que el filosofar ya esta fijado y muerto); y Aristóteles- que fue discípulo de Platón en la Academia- le atribuye doctrinas que no aparecen en los Diálogos.