Introducción
Puede revisarse la novela de Anthony Burgess “La naranja mecánica”, magistralmente llevada al cine por Stanley Kubrick.
En resumen: la repetición, imitación, recompensa-castigo y ensayo-error son los procedimientos principales a través de los cuales opera el aprendizaje.
11 Sigmund Freud: La Estructura de la Personalidad
Para explicar la conformación de la personalidad, Freud parte de la existencia de las pulsiones o necesidades básicas del individuo al nacer: la búsqueda del placer y el afecto que llamó pulsión erótica o “eros” (amor) y la expresión de la agresividad a la que denominó pulsión tanática o “thanatos” (muerte). Como estas pulsiones necesitan ser controladas de algún modo, utiliza un modelo de personalidad para explicar ese proceso de control.
El modelo de personalidad freudiano consta de tres partes:
- El id (ello): Se refiere a las pulsiones básicas que operan a nivel inconsciente y exigen una satisfacción inmediata.
- El ego (yo): Representa el sentido del realismo que supone encontrar un equilibrio entre la búsqueda del placer y las exigencias sociales.
- El superego (superyó): Hace referencia a la influencia de la cultura en el individuo, su desarrollo nos permite ver por qué no podemos cumplir todos nuestros deseos y consiste en el repertorio de valores y normas interiorizados a nivel de lo consciente.
El proceso de socialización se describe según esta visión de la personalidad como un proceso de conflicto permanente entre el id (yo deseo) y el superego (yo debo) mediado por el sentido de la realidad que aporta el ego (yo me doy cuenta).
12 George Herbert Mead: El Desarrollo del Self
El concepto fundamental de su teoría es el self, dimensión de la personalidad configurada por la conciencia y la imagen que de sí mismo tiene el sujeto. Según Mead, el self no puede existir al margen de la sociedad porque nace únicamente de la experiencia social del individuo. Esa experiencia social es un intercambio simbólico en el que, a través del lenguaje, las personas crean significados y, además, para entender las intenciones de los otros, debemos tener la capacidad de imaginar la situación desde su perspectiva.
Nuestra capacidad para crear símbolos nos permite separarnos de nosotros mismos y ponernos en la piel de otras personas, por eso podemos anticipar su reacción.
Nuestra capacidad de vernos a nosotros mismos a través de otros implica que el self tiene 2 componentes:
- El –self sujeto- que emprende la acción, al que denomino “yo”.
- El –self objeto- que permite mirarnos a nosotros mismos para hacernos una imagen de nosotros mismos o autoevaluarnos y al que llamo “mi”.
Mead explica que el self se desarrolla interactuando con los otros y aprendiendo a ponernos en su lugar, empezamos imitando sin entender la intención de esas acciones porque no tenemos capacidad para usar símbolos.
Por último, llega a una etapa en la que puede verse a sí mismo desde la perspectiva de otras muchas personas, conocidas o desconocidas, y en más de una situación.
Acuñó el término “otro generalizado” para referirse a las normas y los valores culturales ampliamente aceptados que nos sirven de base para autoevaluarnos. Y no termina aquí, sino que continúa a lo largo de la vida y las personas acumulando experiencias que pueden ir al mismo tiempo reconfigurando su self.
13 Estatus y Rol: Posición y Expectativas Sociales
El estatus social hace referencia a la posición social que ocupa un individuo y que los demás reconocen. Todos estamos sometidos a un conjunto de estatus, ocupamos diversas posiciones en distintos ámbitos durante un determinado periodo de tiempo. Un estatus puede ser:
- Adscrito: Si esa posición se ocupa por nacimiento o se le adjudica al individuo independientemente de su voluntad.
- Adquirido: Si ese individuo obtiene la posición mediante esfuerzo personal.
De ese conjunto de estatus que hemos descrito para cada persona, suele haber alguno más importante que los demás, al que se denomina estatus dominante y define la identidad social de la persona y tiene una gran influencia sobre su vida. El rol hace referencia a las expectativas del comportamiento que cabe esperar de una persona según su estatus. Es la manifestación dinámica y observable de un estatus, el repertorio de actuaciones, tareas y comportamientos que apareja una determinada posición. Por eso puede decirse que el estatus se ocupa (posición) y el rol se desempeña. Lo mismo que estamos sujetos a un conjunto de estatus, tenemos que desempeñar un conjunto de roles en cada una de las posiciones sociales que ocupamos. Esta complejidad de actuaciones puede acabar generando un conflicto que se puede dar entre roles de distintas posiciones o bien entre dos roles de la misma posición o intrarrol.