1. Primeros vínculos afectivos

Los seres humanos realizan la primera vinculación con sus padres o cuidadores habituales a lo largo del primer año. La protección es aquello que une al niño con su madre y por lo tanto se convierte en la vinculación más intensa a lo largo de toda su vida. Se establece de esta forma un vínculo de apego. Por otra parte se considera que los seres humanos no nacen siendo miembros de la sociedad, y que mediante el proceso de socialización pasan a formar parte de ella. Establecer unos vínculos afectivos adecuados en la primera infancia es esencial para el equilibrio emocional de la persona.
Destacan:

1. 1. La familia

La familia es la primera entidad donde el niño se desarrolla, se transforma, se relaciona, y donde se determina como serán sus relaciones sociales en el futuro. Dentro de este sistema, el niño crea las bases de su identidad, aprende a apreciarse a sí mismo, y desarrolla su autoconcepto y autoestima, además de muchos otros rasgos de su personalidad.

La teoría del apego plantea que es de relevancia para el desarrollo del sujeto el establecimiento de lazos emocionales íntimos con determinados individuos, siendo esto algo propio de la naturaleza humana. La capacidad del ser humano de desarrollar lazos emocionales íntimos, se considera un aspecto fundamental y de gran relevancia en cuanto al funcionamiento afectivo de la personalidad y de la salud mental, y puede el sujeto desempeñar, tanto el papel de buscador de cuidados, o el que otorga cuidados y protección a otro, siendo estas dos modalidades consideradas, desde la teoría del apego, como propio de lo humano (Bowlby, 1995).

Los padres y hermanos representan las primeras relaciones sociales que tendrá el niño. En muchas ocasiones la falta de los lazos con los padres causa que los hijos sean personas desconfiadas, tímidos e inseguros, mientras que los que tienen sus necesidades físicas cubiertas  desde los primeros días serán personas con confianza y con expectativas de gratificaciones sociales futuras.

Existen una especie de aspectos clave en la relación de padres e hijos tales como el afecto, el cariño, la comunicación, y la independencia de los miembros de la familia

1. La escuela

A medida que la escuela ha ido cambiando, también se han modificado las formas en las que se ha vinculado con la institución familiar. A lo largo de la historia se han sucedido importantes transformaciones en este vínculo. Así, las primeras escuelas manténían una estrecha uníón con la comunidad. A principios del Siglo XX, comenzaron a distanciarse; la labor pedagógica se fue especializando y haciendo cada vez más compleja, y los maestros enseñaban materias y utilizaban métodos alejados de la experiencia de los padres y madres, que poco tenían que decir acerca de lo que ocurría en el interior de las aulas.

1. Los amigos

Después de la familia comienza para el niño una nueva etapa. El individuo, necesita a alguien de su misma edad y sexo, alguien que él vea como ”un igual”, con sus mismos problemas e inquietudes. Surgen así los llamados ”grupos de amigos”, que influyen en el aprendizaje y sociabilización del individuo.

Se define grupo como un conjunto de personas que se hallan en contacto unas con otras, que se expresan con actitudes y comportamientos comunes y son conscientes de las relaciones que mantienen.

Las funciones más importantes a destacar del grupo son:

• Afirmar la seguridad afectiva entre sus miembros
• Desarrollar sentimientos de pertenencia e identificación entre los distintos integrantes.
• Posibilitar la integración y participación de los miembros en la vida social.

Por otro lado la uníón que los miembros del grupo manifiestan puede ser:

• Positiva: cuando los individuos se mantienen unidos.
• Negativa: cuando las relaciones se nutren de sentimientos tales como envidia, rencor, celos…
• Vínculos afectivos que unen al mundo
• 1. La solidaridad

Al hablar de vinculación afectiva a nivel de municipio, país o mundo la solidaridad ocupa el papel más importante.

 La solidaridad es la actitud de participación y apoyo que se muestra hacia los problemas, actividades o inquietudes de otros, por el bien común y de forma desinteresada. La raíz de la solidaridad es la compasión por los sufrimientos y necesidades de los demás como si fueran propios. Un papel negativo para lograr esta gran vinculación es el bienestar material que produce individuos insolidarios, despreocupados de la suerte de otros.

Junto a la solidaridad se encuentra la justicia, es el principio que obliga a dar a cada uno lo que le pertenece. La solidaridad actúa donde no llega la justicia.

4.1.1 Solidaridad Mecánica

Una sociedad regida por la solidaridad mecánica se caracteriza por una total competencia de cada individuo en la mayoría de los trabajos, surgiendo una mínima diferenciación por edad o sexo. Es aquella que surge de la conciencia colectiva.

4.1.2Solidaridad Orgánica

La fuerte especialización de cada individuo origina una gran interdependencia, base de la cohesión y solidaridad grupal, de las personas con su sociedad. A esta clase la llama “solidaridad orgánica”.
Así, cada miembro posee una parte de los conocimientos generales y sus recursos, por lo que todos dependen de todos.
 Este tipo de solidaridad se suele presentar en las sociedades desarrolladas.