Fases del Proceso de Abandono del Tabaquismo: Estrategias y Consideraciones

Fase de Precontemplación

No se ha planteado seriamente la idea de dejar de fumar, no percibe como un problema su conducta de fumar. Nosotros, en esta fase, podemos:
  • Aportar información sobre el tabaquismo, resaltando más los beneficios de dejar de fumar que los riesgos de fumar.
  • Utilizar preguntas abiertas («¿Qué beneficios obtendría si dejase de fumar?», «¿Cómo cree que el tabaco afecta a su salud?»).
  • Resaltar aquellos beneficios/riesgos que sean relevantes para el paciente.
  • Acompañar de material de autoayuda (folleto informativo) y ofrecer siempre nuestra disposición a ayudar al paciente a dejar de fumar.
  • No repetir en un tiempo (dejar pasar varios meses o pactar con él cuándo volver a hablar del tema).
El objetivo en esta fase es poner en marcha el proceso de abandono, generando reflexión y ambivalencia. El éxito terapéutico en estos pacientes es conseguir que avancen a la siguiente fase de abandono.

Fase de Contemplación

Hay un planteamiento serio de cambio en los próximos 6 meses. Se caracteriza por la ambivalencia o sentimientos contrapuestos respecto al hecho de fumar. Nosotros, en esta fase, podemos:
  • Promover que verbalice sus propias razones para dejar de fumar (intentando que visualice la discrepancia) y preguntar sobre los obstáculos o temores que tiene para hacerlo (facilitándole la búsqueda de sus propias respuestas y alternativas).
  • Acompañar de material de autoayuda (folleto informativo y guía de ayuda para dejar de fumar) y ofrecer siempre nuestra disposición a ayudarle a dejar de fumar. Hacerlo sistemáticamente (siempre que venga a la consulta).
El objetivo es aumentar la motivación y eliminar los obstáculos para incrementar la autoeficacia del paciente. El éxito consiste en conseguir que pase a la siguiente fase de abandono.

Fase de Preparación

Es capaz de fijar una fecha y pensar un plan para dejar de fumar en el próximo mes. Nosotros, en esta fase, podemos:
  • Felicitar por la decisión («es la mejor decisión que puede tomar para su salud») y aclarar las expectativas que el paciente tiene de la terapia para dejar de fumar, transmitir que le vamos a orientar, ayudar y apoyar, pero que es necesario su esfuerzo para conseguir el éxito.
  • Elegir la fecha de abandono: durante el siguiente mes, elegir un momento adecuado (sin estrés, sin compromisos sociales, etc.). Notificarla a familiares, amigos y/o compañeros para aumentar el compromiso y buscar su apoyo y colaboración en todo el proceso.
  • Hacer una intervención psicosocial y valorar la necesidad, en función del grado de dependencia, de tratamiento farmacológico.

Fase de Acción

Intenta dejar de fumar y no fuma durante menos de 6 meses.

Fase de Euforia

  • 3-8 días después del Día D.
  • Consejo sobre cómo afrontar situaciones difíciles.
  • Valorar síndrome de abstinencia.
  • Control de fármacos (cumplimiento/efectos adversos).
  • Reforzar el apoyo del entorno familiar, social y laboral.
  • Facilitar la verbalización de los beneficios y las dificultades de dejar de fumar.
  • Si hay recaída, valorar circunstancias.
  • Informar sobre la aparición de un «duelo».

Fase de Duelo

  • 10-15 días después de dejarlo.
  • Valorar la presencia de: sensación de vacío, aumento de apetito y alteraciones del sueño.
  • Disminución del síndrome de abstinencia físico.
  • Facilitar la verbalización de los beneficios y reforzarlos.
  • Control de los fármacos (cumplimiento/efectos adversos).
  • Reforzar el apoyo del entorno.

Fase de Normalización

  • 15-30 días después de dejarlo.
  • Informar sobre la posible aparición de una sensación de falsa seguridad.
  • Facilitar la verbalización de los beneficios y reforzarlos.
  • Control de los fármacos (cumplimiento/efectos adversos; cambio de pauta).

Fase de Consolidación

  • 2-3 meses después de dejarlo.
  • Valorar: fantasías de control. Prevenir las recaídas de tipo social.
  • Pesar.
  • Facilitar la verbalización de los beneficios a largo plazo y reforzarlos.
  • Cambiar/suspender la pauta de fármacos.
  • Felicitar.

Fase de Mantenimiento

Se mantiene sin fumar durante más de 6 meses.

Fase de Exfumador

Persona que, habiendo sido fumador, ha dejado de fumar hace más de 1 año.

Fase de Recaída

  • Es una fase más del proceso que suele constituir un paso frecuente.
  • En muchas ocasiones, se necesitan 3 o 4 intentos antes de dejar de fumar definitivamente.
  • Cuando aparece, hay que normalizar la situación y que se vea como una fuente de aprendizaje para el intento definitivo; comprobar los errores que se han cometido, e intentar generar un nuevo compromiso del paciente para volver a dejar de fumar, después de un tiempo.
  • En todos los fumadores es importante valorar los intentos previos de abandono para obtener información que nos puede ser de ayuda para volver a preparar al paciente para hacer un nuevo intento.