Wittgenstein
Características de la Filosofía Analítica
El pensamiento inglés del siglo XIX está dominado por el idealismo neohegeliano. Hacia finales del siglo tiene lugar la reacción que pretende recuperar la tradición empirista.
El método analítico consiste en descomponer un todo en sus elementos constituyentes, aplicándose al lenguaje. Russell se ocupará del lenguaje lógico y Moore del lenguaje ordinario o común. Wittgenstein estudiará estos dos tipos de lenguaje en dos etapas: el Tractatus Logico-Philosophicus y las Investigaciones Filosóficas.
2. Wittgenstein: Continuidad y Evolución de su Pensamiento
A pesar de las diferencias, las dos obras de Wittgenstein comparten una continuidad tanto en el lenguaje como en la concepción de la filosofía como una actividad.
2.1 El Tractatus Logico-Philosophicus (1922)
En esta etapa, Wittgenstein pretende evitar los malentendidos del lenguaje ordinario, recurriendo al lenguaje perfecto de la lógica bajo la influencia de Russell.
Isomorfía entre pensamiento, lenguaje y realidad.
- Teoría de la función de verdad: La estructura del lenguaje es revelada por la lógica.
- Teoría figurativa del lenguaje: La función esencial del lenguaje es representar el mundo.
Teoría de la función de verdad
En la lógica, las proposiciones son tautológicas y, por tanto, siempre verdaderas. La lógica es puro cálculo a priori que determina si ciertas combinaciones de símbolos son válidas o no.
Para determinar si una proposición es lógica, se debe construir su tabla de verdad.
La lógica no describe el mundo, pero es condición necesaria para describirlo, ya que sus principios nos dicen cómo pensamos y cómo se nos presenta el mundo.
No se puede pensar ilógicamente. Además, la lógica conecta con el mundo a través de los nombres y proposiciones del lenguaje. Los nombres hacen referencia a los objetos, y la proposición requiere su análisis hasta establecer la verdad o falsedad de las proposiciones elementales que la componen. La lógica constituye así la base de la epistemología.
Teoría figurativa del lenguaje
Nuestro lenguaje conecta con el mundo porque los nombres tienen referencia: están en lugar de los objetos. La proposición figura o representa la realidad.
La filosofía como crítica del lenguaje
Tradicionalmente, la filosofía se consideraba una teoría que servía de fundamento para los demás conocimientos. La lógica tenía un carácter claramente instrumental.
Wittgenstein aporta un cambio de perspectiva: la filosofía no es una teoría, sino una actividad consistente en aclarar, mediante el análisis, qué proposiciones tienen sentido y cuáles no.
El Tractatus concluye con una referencia a lo místico, que comprende lo religioso, lo ético y lo estético. La ética es trascendental.
2.2 Investigaciones Filosóficas (1953)
La ciencia describe el mundo, pero no alcanza a comprender el ser y el sentido de la vida. En esta etapa, no se busca un lenguaje ideal, sino establecer los usos del lenguaje para poder aclarar los que estén confusos.
Usos del lenguaje
Una misma palabra puede tener diversos usos o funciones en la comunicación; describir el mundo sería solo uno de los posibles usos de las palabras. Así, Wittgenstein supera su primera visión del lenguaje del Tractatus.
El significado de una palabra o de una expresión solo puede determinarse teniendo en cuenta su uso en cada caso.
Juegos del lenguaje
Las palabras pueden tener significados distintos según el contexto en el que se hayan utilizado. El uso de las palabras viene determinado por el contexto o juego lingüístico en que se expresan.
El lenguaje como forma de vida
Con el lenguaje hacemos cosas muy diversas sin un lenguaje único ni una definición que englobe a todos. Lo único que tienen todos los posibles lenguajes en común es un cierto parecido de familia que nos permite relacionarlos entre sí.
El lenguaje es un modo de hacer, de concebir el mundo; es una forma de vida, forma parte de una actividad. Toda actividad lingüística, como todo juego, exige reglas que lo hacen posible. Estas reglas no son fijas, sino que dependen de la situación. La práctica del lenguaje es una habilidad que se adquiere con el aprendizaje y se desarrolla con el uso.
La filosofía como terapia del lenguaje
En esta etapa, la función de la filosofía no es, como en el Tractatus, poner de relieve el sentido de los problemas filosóficos. Ahora se trata de identificar un uso del lenguaje que no se corresponde con el juego al que pertenece. La filosofía no resuelve ningún problema; simplemente disuelve el enredo causado por el mal uso del lenguaje.
Si usamos mal las palabras, surgen malentendidos, porque jugamos con ellas un juego que no les corresponde. La filosofía se convierte así en una terapia del lenguaje, que desvela el mal uso que ha ocasionado el problema filosófico y lo disuelve.