Evolución del Teatro Español: Posguerra, Existencialismo, Renovación y Simbolismo

Teatro Español: De la Posguerra a la Transición (1940-1975)

Posguerra (Años 40)

Se divide principalmente en dos corrientes:

  • Teatro Convencional (Comedia Burguesa): Teatro patriótico y de evasión, con obras ligeras que buscaban distraer al público. Presenta un drama ideológico que justifica el orden establecido, con obras bien construidas que muestran un mundo feliz. Autor destacado: Edgar Neville.
  • Teatro Humorístico: Grupo de humoristas vinculados a la revista La Codorniz. Presenta un humor disparatado e irónico, con una visión amarga y escéptica de la realidad. El riesgo de este tipo de teatro es caer en un cúmulo de chistes. Autor destacado: Enrique Jardiel Poncela.

Teatro Existencialista y Realismo Social (Años 50)

Surge un teatro de corte existencial, similar a las tendencias en poesía y novela. Evoluciona hacia un teatro de compromiso social y realista, abordando los problemas de la sociedad española. Los planteamientos son esquemáticos y directos para llegar a un público amplio. A finales de la década, se observa una evolución hacia un teatro más alegórico. Autor destacado: Antonio Buero Vallejo.

Teatro Renovador y Experimentalista (Años 60 y 70 hasta 1975)

En el teatro comercial, triunfa el tono evasivo heredado de la comedia burguesa. Algunos autores continúan con un teatro social, intentando plantear los problemas del momento, aunque la censura lo dificulta. Se presenta un teatro no realista, con propuestas que enlazan con el surrealismo y temas de denuncia social. Los personajes son víctimas, derrotados por el entorno social, y los verdugos también son víctimas del sistema. Se utiliza un lenguaje violento y popular para expresar la violencia y crueldad del mundo. La censura sigue siendo muy rígida. Autor destacado: Antonio Buero Vallejo (La fundación).

Análisis de Crónica de una muerte anunciada (Gabriel García Márquez)

Temas Principales

  • La Fatalidad: El destino, como un fatum trágico, influye en la vida de Santiago Nasar, conduciéndolo a la muerte a través de circunstancias adversas.
  • El Honor: Refleja la moral puritana e ignorante del pueblo, una moral primitiva basada en la honra externa y la venganza. La sociedad considera que los hermanos Vicario actúan con “dignidad” y “grandeza”.
  • El Amor: Se explora la pasión amorosa de Bayardo y Ángela, que crece con la separación.
  • La Violencia: Es la respuesta a la violación del honor (la virginidad antes del matrimonio). También se presentan otras formas de violencia.
  • La Religión: Se aborda a través de la visita del obispo, las expectativas frustradas del pueblo, la onomástica de los personajes y la dimensión de sacrificio en la muerte de Nasar. El autor trata este tema con humor e ironía.
  • La Superstición: Determina la vida y la muerte. Santiago Nasar es víctima de la mala interpretación de los sueños por parte de su madre. Luisa Santiaga tiene telepatía y es adivina, y el general Aponte practica el espiritismo.
  • El Humor: Sirve como contrapunto a la violencia y lo macabro del crimen. Es un humor sutil que, en ocasiones, llega a lo absurdo.

Narrador, Punto de Vista y Técnica del Perspectivismo

El narrador es un habitante del pueblo, al igual que el escritor. Como narrador-cronista, reconstruye los sucesos ocurridos 27 años atrás. Fue testigo y partícipe secundario de algunos hechos, que están borrosos en su memoria. Para reconstruir la historia, utiliza:

  • Cartas de su madre.
  • Informe jurídico y de la autopsia.
  • Memoria personal.
  • Su condición de testigo y copartícipe.
  • Testimonios de numerosos testigos (polifonía narrativa o perspectivismo).

El rigor de la crónica se diluye en detalles como la omisión del nombre del pueblo. El narrador tiene una doble autoridad:

  • Investigación exhaustiva en los archivos judiciales de Riohacha.
  • Entrevistas con personas que sabían del asesinato de Santiago Nasar.

El narrador es un personaje de la acción. Se muestra frío al narrar los horrores que rodean a Santiago Nasar. Destacan dos recursos:

  • Mención constante de los personajes con nombre y apellido, rompiendo el vínculo afectivo.
  • Uso continuo de la hipérbole.

Personas narrativas y enfoque:

  • Cuando el narrador usa sus recuerdos, emplea la 3ª persona y un enfoque omnisciente.
  • Cuando usa su doble condición de personaje y narrador, utiliza la narración subjetiva en 1ª persona.
  • Cuando actúa como testigo, combina el “yo plural” con la 3ª persona.

Espacio

La historia se desarrolla en un pueblo pequeño y aislado, cuyo nombre se omite. Se mencionan Riohacha, Manaure y la Península de la Guajira. El río es la única conexión con el exterior. Hay lugares específicos de especial relevancia.

Tiempo

La época exacta no es relevante. La acción transcurre en 1951, aunque no se menciona en la obra. El tiempo es retrospectivo (el presente es 27 años después). El tiempo interno abarca unas 24 horas, desde el domingo de la boda hasta el lunes del crimen. Se sabe que Nasar se levantó el lunes a las 5:30, salió a las 6:05 y murió a las 7:05. La historia se amplía con el reencuentro de Ángela y Bayardo 23 años después. El tiempo es alineal, circular y caótico, con flash-backs y elipsis. Hay numerosas referencias temporales y se entremezclan varios planos:

  • Narración de los hechos, 27 años después.
  • Testimonios posteriores al asesinato.
  • Comentarios de los personajes en el momento de los hechos.
  • Entrevistas con personajes.

El anuncio de la muerte se repite varias veces. La narración concluye con la descripción de la muerte del protagonista, anunciada al principio, creando una estructura cerrada y circular.

Personajes

Los personajes se caracterizan a lo largo del relato, partiendo de una breve descripción inicial. Hay tres niveles: protagonistas, testigos concretos y el pueblo.

Lenguaje y Estilo

El lenguaje es trabajado y pulido. La prosa se inclina hacia una visión realista con objetividad narrativa, pero sin eliminar recursos retóricos. Se emplean diferentes registros lingüísticos: coloquial colombiano, lengua escrita poética y culta. El espacio es rural y el lenguaje es coloquial: frases hechas, eufemismos, diminutivos afectivos, apelaciones al oyente, imperativos, comparaciones familiares y lenguaje violento.

Análisis de La fundación (Antonio Buero Vallejo)

Perspectiva

La inmersión en la mente del protagonista, Tomás, es la única forma de presentar su proceso de vuelta a la normalidad. Cada transformación del espacio escénico revela un nuevo fragmento del mundo real en el cerebro del personaje. El público ve lo que ve el personaje, y el espectador no es consciente de ello inicialmente. La acción se centra en la conquista de la verdad y en comprender que están en una cárcel.

Tiempo

  • Externo: La obra fue escrita a principios de los años setenta, al final de la Dictadura de Franco, pero no hay alusiones concretas a ella. Existe un trasfondo biográfico reconocido por el autor.
  • Interno: El tiempo interno es circular, la obra empieza y termina en el mismo punto. No hay indicaciones precisas, pero el desarrollo es lineal, sin saltos cronológicos. El primer cuadro transcurre una mañana, el segundo esa misma tarde, el tercero tres días después y el último, pocos días después.

Elementos Simbólicos

  • La fundación: Representa la realidad falseada. Individualmente, son los sueños; colectivamente, las falsas seguridades. Su decoración se asocia al bienestar, contrastando con la situación de los excluidos. A medida que avanza el drama, se descubre que la fundación es una cárcel.
  • El ventanal: Elemento escenográfico a través del cual se ve un paisaje maravilloso, relacionado con la locura del protagonista. Simboliza el futuro. Su desaparición muestra la cruda realidad, pero su reaparición final alude a la necesidad de soñar.
  • El retrete: Dignidad humana pisoteada.
  • Los hologramas: Reflexión sobre la naturaleza de la realidad.
  • El teléfono: Representa la comunicación, que es impedida.
  • Los libros: Símbolos de cultura, indican su inexistencia en la España de la época.
  • El mal olor: Metáfora de que lo que se ve no es lo que es.
  • La pipa de Asel: Lo presenta como el intelectual.
  • Las apariciones de Berta: Simbolizan la aspiración a la felicidad de Tomás y también la opresión.

Lenguaje y Estilo en La Fundación

Buero utiliza un estilo cuidado y refinado, con toques de ironía. Los personajes no tienen la misma cultura, pero rara vez se usan expresiones coloquiales. El léxico es mayormente culto. El autor muestra su retoricismo con epítetos y símiles. Los diálogos se caracterizan por oraciones cortas. Lo más característico es la extensión y precisión de las acotaciones. Las descripciones del escenario y los personajes tienen una rica adjetivación.

Características del lenguaje:

  • Naturalidad: Lenguaje similar al cotidiano, sin llegar a ser coloquial. Busca que el lenguaje sea fácilmente comprensible para el espectador, reflejando la imagen real de una época y situando la obra en un plano intemporal, sin referencias espaciales concretas. No hay grandes diferencias en el habla de los personajes.
  • Sobriedad y economía expresivas: La escenografía complementa a la palabra. Hay un equilibrio entre los diálogos y el montaje escenográfico.
  • Importancia del diálogo: Herramienta para conocer personalidades conflictivas.
  • Enfrentamientos a través de la palabra: Especialmente en la segunda parte de la obra.
  • Reiteradas oposiciones semánticas: Conceptos como subir/bajar y realidad/alucinación.