Evolución de la Poesía Española del Siglo XX: De la Guerra Civil a los Novísimos

La Guerra Civil española (1936-1939) interrumpió bruscamente la diversidad y riqueza de las líneas poéticas que se manifestaban en España. La muerte de Federico García Lorca y el exilio de poetas como Juan Ramón Jiménez, Jorge Guillén y Rafael Alberti marcaron este periodo. La poesía en el exilio reflejaba un profundo sentimiento de nostalgia por la patria perdida.

La obra de Miguel Hernández actúa como puente entre la Generación del 27 y los poetas de la posguerra. Entre sus obras destacan:

  • El rayo que no cesa, que incluye la Elegía a Ramón Sijé, donde expresa el dolor por la muerte de su amigo.
  • Viento del pueblo, una protesta contra las injusticias sociales.
  • Cancionero y romancero de ausencias, poemas de gran intensidad emocional.

Poesía de los años 40

Se distinguen dos tendencias principales:

Poesía Arraigada

Esta corriente presenta imágenes armónicas del mundo y transmite una visión positiva que enmascara la dura realidad de la época. Es la poesía de los vencedores de la Guerra Civil, conocidos como la Generación del 36. Dentro de esta corriente destacan:

  • Grupo de la revista “Escorial”: Luis Rosales, Dionisio Ridruejo y Leopoldo Panero.
  • Grupo de la revista “Garcilaso”: José García Nieto es su principal exponente.

Poesía Desarraigada

Esta corriente es una reacción al garcilasismo, impulsada por poetas de la Generación del 27. Dámaso Alonso con su obra Hijos de la ira y Vicente Aleixandre con Sombra del paraíso son representativos. También contribuyó la revista “Espadaña”.

Los espadañistas cultivan una poesía desarraigada que presenta un mundo deshecho y caótico, marcado por el sufrimiento y la angustia. Utilizan un lenguaje desgarrado y un tono violento. Se trata de una poesía comprometida con la problemática existencial e histórica del hombre, que sentó las bases para la poesía social de los años 50. En esta corriente existencial destacan: Blas de Otero con Ancia y Gabriel Celaya con Tranquilamente hablando.

Poesía de los años 50

La poesía social surge como una continuación de la poesía desarraigada de los años 40. Algunos rasgos son:

  • La poesía no busca evadirse de la realidad, sino que refleja los problemas del mundo que la rodea e intenta transformar la sociedad hacia una más justa.
  • Es comunicativa y se dirige a la inmensa mayoría. Por ello, utiliza un lenguaje claro, sencillo y coloquial.
  • Aborda temas como España, la solidaridad con el proletariado, las injusticias sociales y la lucha por la libertad.

Entre los principales exponentes de la poesía social de los años 50 se encuentran: Gabriel Celaya con Cantos iberos; Blas de Otero con Pido la paz y la palabra; José Hierro con Quinta del 42; Eugenio de Nora con España, pasión de vida.

Promoción del 60

Surge un grupo de poetas conocidos como la Promoción del 60, quienes representan una superación de la poesía social. Algunas características de esta nueva corriente son:

  • Para estos nuevos poetas, la poesía deja de ser principalmente comunicativa y se convierte en un medio para conocer la realidad y revelar lo que está oculto.
  • Abandonan las preocupaciones colectivas de la poesía social y se centran en experiencias personales como la infancia, la amistad, el paso del tiempo y la muerte.
  • Utilizan un lenguaje más elaborado y poético que el de la poesía social, incorporando la ironía y el humor.

Entre los destacados representantes de la Promoción del 60 se encuentran: Ángel González con Tratado de urbanismo; Jaime Gil de Biedma con Moralidades; Claudio Rodríguez con Alianza y condena; José Ángel Valente con La memoria y los signos; José Manuel Caballero Bonald con Vivir para contarlo.

Novísimos

En 1970, bajo la dirección de Josep Maria Castellet, se reunió en la antología Nueve novísimos poetas españoles a un grupo de poetas innovadores, conocidos como los “Novísimos”, quienes rompieron con la poesía de posguerra. Se caracterizan por:

  • Cultivan una poesía culturalista en la que abundan las referencias a diversas lecturas y conocimientos.
  • Utilizan un lenguaje rico y barroco que incorpora latinismos y extranjerismos.
  • Se ven influenciados por los medios de comunicación de masas, lo que se refleja en referencias a figuras como Marilyn Monroe, deportistas, políticos, entre otros.
  • Incorporan elementos vanguardistas como la escritura automática, la técnica del “collage”, sucesiones de imágenes y elementos exóticos.

Entre los poetas destacados de este movimiento se encuentran: Pere Gimferrer con Arde el mar; Luis Antonio de Villena con El viaje a Bizancio; Félix de Azúa con Cepo para nutria; Leopoldo María Panero con Así se fundó Carnaby Street. También destacan Guillermo Carnero o Manuel Vázquez Montalbán.