Los Novelistas del 98

Miguel de Unamuno

Su inquietud y angustia se muestran en todos los temas que aborda. Su producción literaria está impregnada de fuerte contenido filosófico. Sus novelas son una proyección de sus inquietudes personales, en ellas indaga en las complejidades espirituales y psicológicas de sus protagonistas. Toda su obra se basa en su preocupación por España, por la existencia, la muerte y por el conflicto entre la razón y la fe.

Estos temas aparecen ya en sus primeras novelas, como Paz en la guerra, pero es Niebla en la que refleja mejor las características temáticas y formales de sus nivolas. El tema de la relación entre el creador y sus criaturas cobra particular interés en el protagonista de la obra, Augusto Pérez, quien se rebela contra su creador, Unamuno. La confusión entre sueño y realidad, entre fe y razón, son los temas derivados del principal, la angustia de la existencia humana, mostrada en la obra San Manuel Bueno, mártir, en la que un sacerdote admirado por todos guarda en silencio su falta de fe.

José Martínez Ruíz, Azorín

Es el escritor de lo minucioso, del detalle, ya que pretende que sus novelas sean un reflejo delicado y lírico de lo esencial de la realidad. Desarrolla una técnica descriptiva sutil en la que prima la sencillez, la brevedad y la sensación de orden y claridad. La preocupación por el tiempo que pasa se percibe en una prosa triste y fluida que delata ese afán por apresar lo sustancial de las cosas.

Sus títulos más conocidos son: La Voluntad, Las Confesiones de un pequeño filósofo, etc. Sus obras se acercan más al ensayo que a la novela, ya que son descripciones de ambientes y personajes sin un argumento central sólido, como Don Juan y Doña Inés.

Pío Baroja

El carácter huraño y su opinión negativa de los seres humanos y de la sociedad, se reflejan en sus novelas. El tema principal es la protesta contra la sociedad, por su hipocresía, injusticias y aburguesamiento. Baroja manifiesta una actitud crítica y sincera en sus ideas y muestra compasión por lo marginal.

Sus novelas se dividen en:

• Novelas de pensamiento: en ellas Baroja expresa un escepticismo absoluto por los aspectos religiosos y éticos, reflejado en personajes tristes y sin esperanza en el futuro. Destacan Camino de Perfección y La Busca.
• Novelas de acción: en los que la aventura constituye el argumento central. Destacan Zalacaín el aventurero, Memorias de un hombre de acción, etc.

Sus novelas se basan en la espontaneidad y el antirretoricismo. En su estilo predominan los párrafos cortos y el léxico claro, con presencia de coloquialismos. La sintaxis es también sencilla, las descripciones son fugaces, nerviosas, y los personajes son descritos de un modo expresivo y rápido, reflejando las impresiones del autor.

Principales Novelistas y sus Obras: Del Novecentismo a las Vanguardias

• Ramón Pérez de Ayala: Troteras y danzaderas, Belarmino y Apolonio.
• Gabriel Miró: Nuestro padre San Daniel y El Obispo Leproso.
• Ramón Gómez de la Serna: El torero Caracho y Cinalandia.

Los Poetas Modernistas Españoles

Las principales figuras son:

Rubén Darío

(Se echa en falta información sobre Rubén Darío en el texto original. Se recomienda ampliar este apartado.)

Antonio Machado

Su poesía se caracteriza por su profundidad, que se manifiesta en los temas como la intimidad, los recuerdos, la preocupación por España, etc. En la métrica se inclina por formas populares, predominando la silva con rima de romance y sonetos. El estilo se caracteriza por la ausencia de complejidades retóricas. En sus inicios se muestra claramente modernista por sus características.

Soledades incluía poemas modernistas que más tarde fueron suprimidos. Predomina el intimismo, el tono melancólico y el simbolismo de algunos motivos reiterados, pero la deuda con el Modernismo se advierte en la métrica, en el léxico y en el predominio de los aspectos musicales y cromáticos.

El Machado más conocido es el de Campos de Castilla. La emoción del poeta al enfrentarse con Castilla le lleva a un modo de expresión distinto, más realista. Además, la reflexión sobre los males de España es el tema de muchos poemas, enlazando aquí con las preocupaciones noventayochistas.

Juan Ramón Jiménez

Se dedica totalmente a la poesía y a la búsqueda de la incesante belleza. Su poesía fue variando desde sus inicios hasta la creación final de una obra muy personal y diferente. Ese camino siguió un proceso de depuración que le sirvió para liquidar los restos posmodernistas e introducir una nueva concepción de la poesía.

Se distinguen tres etapas en su obra:

• La etapa sensitiva: la suave musicalidad y los paisajes y jardines crepusculares aparecen en Rimas, Arias tristes o Jardines Lejanos. Con el momento más modernista del poeta, compone Platero y yo.
• La etapa intelectual: abre el camino a la poesía pura. Incorpora motivos externos a él, mezcla prosa y verso y desaparece la decoración colorista y musical, el poema se simplifica para hacer transparentes las sensaciones.
• La etapa suficiente: la desarrolla en el exilio, intenta una poesía abstracta, difícil y hermética.