El Español en América: Evolución y Variantes Dialectales
El Español y las Lenguas Precolombinas
A la llegada de los conquistadores españoles a finales del siglo XV, en América convivían cerca de un centenar de lenguas con una gran variedad de dialectos. Los misioneros tuvieron que recurrir a la enseñanza de las lenguas indígenas más generales. De los quince millones de indios supervivientes, menos de la mitad hablan su propia lengua, mientras que más de 370 millones de hispanoamericanos hablan español. De las lenguas indígenas, el mayor número de hablantes lo encontramos en el náhuatl y el maya en México, el mapuche en Chile, el aimara en Perú y Bolivia, el quechua en Bolivia y el guaraní en Paraguay. Numerosos vocablos de estas lenguas se incorporaron al español: patata, cacao, chocolate, canoa, etc.
Variantes Dialectales en el Español de América
Algunas características comunes coinciden con las del andaluz y se deben a la importante presencia de andaluces en los primeros tiempos de la conquista. El español hablado en América presenta numerosas diferencias; hablamos de diversidad dentro de la unidad. Las clasificaciones de áreas dialectales han sido improductivas para describir el español hablado en América. Hay muchas dificultades, como se puede apreciar en la siguiente clasificación en cinco zonas:
- Zona antillana o del Caribe: Cuba, Santo Domingo, costa venezolana y costa norte de Colombia, además de Puerto Rico.
- Zona mexicana: México, sur y suroeste de EE. UU. y América Central.
- Región andina: Andes venezolanos, interior de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y noroeste de Argentina.
- Zona chilena: Chile.
- Zona rioplatense: Argentina, Uruguay y Paraguay.
También se suele hablar de variedades innovadoras fonéticamente (relajamiento consonántico) y de variedades conservadoras.
Rasgos del Español de América
Rasgos Fonéticos
- Seseo: realización de los sonidos /s/ y /θ/ como /s/.
- Aspiración o elisión de la “s” implosiva: variedades más innovadoras. En algunas zonas del interior de Colombia, Venezuela y México es un rasgo socialmente rechazado.
- Yeísmo: neutralización de “ll” y /y/ a favor de la segunda. Distintas realizaciones.
- Diferentes realizaciones de /r/: el rotacismo es la confusión de /r/ y /l/.
- Aspiración de “h” inicial: procedente de “f” latina.
- Relajación y pérdida de la “d” final.
La entonación varía dependiendo de cada zona.
Rasgos Gramaticales
En el uso de pronombres: ausencia de leísmo, uso de “se los” por “se lo”, duplicación del complemento directo. Uno de los rasgos más característicos es el llamado voseo. Las desinencias verbales que acompañan a esta forma suelen ser tanto diptongadas como no diptongadas. La conjugación verbal no diptongada varía: en Argentina se dice “vos tenés”, en Chile “vos tenís”. En Colombia es habitual el “ustedeo”, emplear la forma “usted” en lugar de tuteo. Otros rasgos morfosintácticos son la adverbialización del adjetivo (“esa mina viste lindo”), la anteposición del posesivo (“mijo” por “hijo mío”), uso de diminutivos en adverbios (“ahorita”), la anteposición del artículo.
Rasgos Léxicos
Hay diferencia, al igual que en la península: un término como alcayata no es conocido por un aragonés y sí por un pacense o un murciano. América conserva palabras como pollera “falda”. El léxico del español americano constituye un conjunto de vocablos y locuciones de origen muy dispar que se han unido con el castellano: arcaísmos, indigenismos.
Palabras: carro “coche”, celular “móvil”.
Locuciones o frases hechas: A poco, nomás…
Son curiosas las “palabras problema”, palabras que tienen significados muy distintos en distintos países y en algunos se consideran palabras tabú. Ej.: “coger” en México es una palabra vulgar que se refiere al acto sexual, mientras que en Argentina la palabra “joder” significa ir de juerga.
En conclusión, el español de América tiene rasgos que lo diferencian del español peninsular debido a la adopción de neologismos, aunque la unidad se mantiene en los registros culto y literario e incluso en el habla popular, y a ello van a contribuir los medios de comunicación, la literatura en España, la RAE y el Instituto Cervantes.
Nuevas Tecnologías e Instituciones al Servicio de la Lengua Española
La información que proporciona la Web es como una gran enciclopedia universal; las instituciones potencian la presencia de contenidos en la red del español.
- La Real Academia de la Lengua Española (RAE): asociada a los países hispanohablantes, lleva el trabajo de contrarrestar los efectos negativos del mal uso del castellano por Internet. Ha puesto a disposición de los usuarios su propia página web, donde se puede acceder al Diccionario de la Real Academia, así como a la Ortografía y al Diccionario Panhispánico de dudas (ortográficas, léxicas y gramaticales) que plantea el uso del español. La RAE, en colaboración con las academias americanas y el Instituto Cervantes, organiza el Congreso Internacional de la Lengua Española. Desde esta página también se puede acceder al Corpus de Referencia del Español Actual (CREA) y al Corpus Histórico del Español (CORDE), tanto literarios como periodísticos.
- La Academia Norteamericana de la Lengua Española (ANLE): contribuye al fomento de la lengua española en EE. UU.
- El Instituto Cervantes: trata de contribuir a la extensión y al conocimiento del español en todo el mundo. Publica, además, un informe sobre el estado del español en el mundo.
- La Agencia Efe: es la agencia más importante de la lengua española. Patrocina la Fundación del Español Urgente (Fundéu).
- El Centro de Información y Documentación en Ciencia y Tecnología (CINDOC).
- La Universidad Antonio de Nebrija: ha realizado trabajos en el campo léxico de la telefonía móvil y de Internet.
- La prensa digital.
- La Biblioteca Nacional.
- Enciclopedias.
- Autores de páginas web que divulgan el español.
La Poesía en los Años Sesenta y Setenta: Generación del 50 y los Novísimos
El despegue económico en los años sesenta provoca una actitud de conformismo social. Se muestra cierto cansancio por la poesía social por su prosaísmo y la ausencia de lo personal en sus poemas. Es la llamada Generación de los 50, “niños de la guerra”, por lo que este tema estará presente también en su obra. Los nombres: Ángel González, Jaime Gil de Biedma, José Ángel Valente, Claudio Rodríguez, Carlos Barral, Félix Grande, Caballero Bonald. No parece muy apropiado hablar de “grupo”.
Características:
- Una preocupación fundamental por el hombre, influencia de Antonio Machado y de otros poetas como Cernuda.
- Inconformismo.
- Experiencia personal.
- Temas: retorno a lo íntimo, la evocación nostálgica de la infancia, lo familiar, el amor, el erotismo y la amistad.
- Un estilo conversacional, antirretórico.
- Frecuente empleo de la ironía. Usan mucho las reiteraciones, los paralelismos y coloquialismos.
Podemos destacar Don de la ebriedad de Claudio Rodríguez, Salmos al viento de J. A. Goytisolo.
En una situación de mayor apertura internacional, aparecen los Novísimos, que se dan a conocer a través de la antología de J. M. Castellet Nueve novísimos poetas españoles. Son Leopoldo María Panero, Pere Gimferrer, Vázquez Montalbán, Molina Foix, Ana María Moix, Colinas, Cuenca y Villena. Rompen con la poesía social, con un nuevo lenguaje, y rechazan conceptos como compromiso, testimonio y solidaridad.
Características:
- Ruptura con la poesía anterior.
- Modelos poéticos muy variados.
- Exhibicionismo cultural: introducen elementos de mitologías exóticas y decadentes o de la cultura de masas (el cine, la televisión, modas, música, los cómics…), por lo que también se les llama culturalistas.
- Experimentación lingüística: caracterizada por un lenguaje rico y barroco. La escritura automática, la supresión de puntuación, técnicas como la del collage, un lenguaje exuberante y un tono coloquial.
La Narrativa del Exilio y la Novela en los Años Cuarenta
La producción literaria durante la Guerra Civil fue escasa, al servicio de los intereses de cada bando, y de escasa calidad. Los intelectuales españoles tuvieron que marchar al exilio o murieron, en un ambiente absolutamente empobrecido. La censura impedía que se difundiera cualquier ideología.
Narrativa del Exilio
Con sus reflexiones sobre España, en torno a la Guerra Civil y sus secuelas. Son continuadores del impulso realista y humanizado, pero también incorporan técnicas innovadoras. Arturo Barea o Ramón J. Sénder son ejemplos de ello. Más innovadores resultan Max Aub, Rosa Chacel y Francisco Ayala.
Narrativa en los Años 40
Tendencias:
- Realismo convencional y nacionalista: podemos citar a Juan Antonio de Zunzunegui, con novelas que pretenden ser “trozos de vida”, o a José María Gironella. Más innovadores, como Miguel Delibes (La sombra del ciprés es alargada) o Torrente Ballester (Los gozos y las sombras), van de lo tradicional a lo innovador.
- La novela fantástica: Álvaro Cunqueiro, con novelas de seres prodigiosos, de sombras y espectros, y Joan Perucho.
- La novela tremendista: historias truculentas, en muchos casos de ambiente bélico, con un estilo expresivo que refleja ambientes miserables, violentos y desgarrados, y una visión degradante de la vida. El tremendismo tiene antecedentes en la picaresca. Camilo José Cela es un autor destacado.
- Realismo existencial: gira en torno a la incertidumbre de los destinos humanos y la ausencia o dificultad de comunicación personal, un reflejo amargo de la vida cotidiana. Sus temas son la soledad, la frustración, la muerte, y los personajes son marginales y angustiados. Obras: Nada de Carmen Laforet. Cuenta la historia de una muchacha que ha ido a estudiar a Barcelona, rodeada de personas desquiciadas por la guerra, y que al acabar el curso viaja a Madrid “sin haber conocido nada de los que esperaba: la vida en su plenitud, la alegría, el interés profundo, el amor”. Un estado colectivo de miseria, material y moral, con un tono desesperadamente triste.
El Teatro de la Época: Comercial, Realista y Experimental
Teatro comercial: tuvo gran éxito, continúa en la línea benaventina, donde no hay crítica social, solo se censuran algunos vicios y costumbres de la época. Autores: Pemán, Luca de Tena, Alfonso Paso, Joaquín Calvo Sotelo, Antonio Gala (Anillos para una dama) y Sanchis Sinisterra (¡Ay, Carmela!).
Teatro realista y social: hacia 1970, se lanza a una renovación de la expresión dramática. Se supera el realismo y se asimilan corrientes experimentales del teatro extranjero.
En el teatro experimental, predominan los elementos simbólicos y vanguardistas, lo grotesco y lo imaginativo. Cobran importancia los elementos sonoros, visuales y corporales. Sigue siendo un teatro de denuncia y protesta, se da entrada a la deformación esperpéntica, lo onírico… Entre los autores están:
- Fernando Arrabal: sus obras están a camino entre el esperpento, el surrealismo y el teatro de lo absurdo: Pic-nic. Creó el teatro pánico. Los temas más frecuentes son la sexualidad, la religión, el amor y la muerte.
- Francisco Nieva: Pelo de tormenta. La idea de un teatro catártico y liberador, cuya finalidad es mostrar la esencia del hombre.
- Los simbolistas: se caracterizan por un marcado pesimismo y el frecuente uso de la simbología animal. El tema del poder opresor y el empleo de elementos como la sexualidad, un lenguaje escatológico y agresivo y la violencia física y verbal. Autores: José Ruibal y Manuel Martínez Mediero.
- Los grupos de teatro independiente: actúan al margen de los empresarios teatrales, como Los Goliardos, Els Joglars, Els Comediants. Realizan creaciones experimentales y hay variedad de tendencias.