La Sublevación Militar y el Estallido de la Guerra Civil
Tensiones Prebélicas (Febrero-Julio 1936)
De febrero a julio de 1936, la tensión entre las fuerzas sociales y políticas se intensificó. Tras el triunfo del Frente Popular (izquierdas) en las elecciones de febrero, la Iglesia y las clases acomodadas mostraron recelo hacia el gobierno republicano de izquierdas debido a las reformas impulsadas. Aumentaron los conflictos en la industria y el campo. La sociedad se polarizó entre derecha e izquierda, con una clase media débil.
La Sublevación Militar del 18 de Julio y su Fracaso Inicial
Preparación del Golpe de Estado
La organización del golpe de estado fue obra de militares conservadores. Sanjurjo era el cabecilla, pero Mola fue el verdadero director. Contaron con el apoyo de militares monárquicos y conservadores de la UME (Yagüe, Queipo de Llano, Goded, Franco). Mola diseñó un golpe militar rápido y rotundo, esperando poca resistencia de las instituciones republicanas y la sociedad civil. Pretendían instaurar un gobierno similar a la dictadura de Primo de Rivera. No anticiparon la resistencia de una parte de la sociedad española.
La Chispa del Conflicto
Las dificultades para mantener el orden público y el asesinato de José Castillo provocaron la respuesta de extremistas de izquierda, que asesinaron al líder monárquico Calvo Sotelo.
Inicio de la Sublevación Militar
La sublevación militar se inició en Marruecos el 17 de julio de 1936. El día 18, los sublevados controlaron el protectorado de Marruecos. Los días 18 y 19 de julio, los militares se sublevaron en varias ciudades. Mola decretó el estado de guerra en Pamplona, extendiendo la sublevación. El día 19, Franco se trasladó a Marruecos para liderar las tropas africanas.
Resultados Iniciales del Golpe Militar
El golpe militar fracasó inicialmente, dividiendo España en dos zonas:
- Triunfo del golpe en Castilla y León, Navarra (con poca oposición), y con más dificultad en Galicia, Zaragoza, Mallorca, Sevilla.
- Fracaso en Madrid y zonas industriales. El gobierno de la República autorizó la distribución de armas a las organizaciones del Frente Popular y los sindicatos, que constituyeron milicias espontáneas a favor de la República.
El golpe militar no alcanzó sus objetivos, dividiendo España y dando inicio a la Guerra Civil, que duraría tres años. El fracaso del golpe se debió a la lealtad de la Guardia de Asalto y la Guardia Civil a la República, y a la resistencia popular. La larga duración del conflicto se explica por la intervención internacional, convirtiendo a España en un campo de experimentación de nuevas armas y tácticas de guerra.
La Guerra Civil en Castilla y León
Castilla y León quedó bajo el control de los sublevados en pocos días tras el golpe militar del 18 de julio de 1936. Los militares sublevados establecieron sus primeras instituciones del nuevo Estado Español en esta región. Burgos fue la sede de la junta técnica del estado, Salamanca el cuartel general de Franco, y Valladolid el gobierno General. Franco concentró todos los poderes. Los sublevados no encontraron problemas para controlar las provincias, contando con el apoyo de amplios sectores de la población. La represión se dirigió especialmente contra miembros del Frente Popular, alcaldes, concejales, dirigentes sindicales, maestros y masones. La mayoría de los campos de concentración de la zona nacional se ubicaron aquí. La oposición armada fue limitada, a cargo de columnas obreras improvisadas. A pesar del rápido control, la guerrilla persistió en León y el norte de Palencia durante varios años.
El Desarrollo de la Guerra: Etapas y Evolución en las Dos Zonas
Los Dos Bandos Enfrentados
Los Nacionales
Los sublevados controlaban inicialmente un territorio menor, principalmente agrícola y ganadero. Contaban con la mayor parte del ejército y el apoyo de sectores conservadores opuestos a las reformas republicanas.
Los Republicanos
Controlaban la mayor parte del territorio, zonas urbanizadas e industrializadas. Parte del ejército y las fuerzas de seguridad permanecieron fieles a la República, pero la organización militar quedó desmantelada, siendo reemplazada por milicias populares creadas por los partidos de izquierda. Sus apoyos sociales provenían de obreros y aquellos identificados con el reformismo republicano.
La Evolución Militar del Conflicto: Las Etapas de la Guerra
La Guerra de Columnas y la Marcha hacia Madrid (Julio-Noviembre 1936)
Se desarrolló un rápido avance de los sublevados. El objetivo era ocupar Madrid. Las columnas de Mola intentaron tomar la ciudad desde el Norte. Las tropas de Marruecos, dirigidas por Franco y Yagüe, cruzaron el estrecho de Gibraltar, uniéndose a Queipo de Llano en Sevilla, tomando Badajoz y Toledo, uniendo las dos zonas bajo dominio rebelde. La liberación del Alcázar de Toledo retrasó el avance de Franco hacia Madrid. En el Norte, Mola ocupó Irún y San Sebastián, cortando la comunicación con Francia.
La Batalla de Madrid (Noviembre 1936-Marzo 1937)
Las tropas de Franco llegaron a las afueras de Madrid en noviembre de 1936, pero fracasaron en su intento de tomar la ciudad. El ejército republicano rechazó un primer ataque. Los intentos posteriores de Franco también fracasaron (batalla del Jarama, batalla de Guadalajara). Tras la marcha del Gobierno republicano a Valencia, el conflicto se convirtió en una guerra de desgaste. En el frente sur, los sublevados ocuparon la costa mediterránea andaluza hasta Motril. La pérdida de Málaga (febrero de 1937) representó el fracaso del modelo de guerra defendido por los anarquistas.
Ocupación del Norte (Abril-Octubre 1937)
Franco abandonó Madrid y trasladó la guerra al norte. Las acciones militares se concentraron en el territorio republicano de la franja cantábrica, con la colaboración de la Legión Cóndor (bombardeo de Guernica). Primero tomaron Vizcaya (junio de 1937), luego Santander (agosto de 1937) y finalmente Asturias (octubre de 1937). El reconstruido ejército popular de la República emprendió ofensivas militares para aliviar la presión del norte: en Madrid (Batalla de Brunete) y en Aragón (Batalla de Belchite).
El Avance hacia el Mediterráneo (Diciembre 1937-Octubre 1938)
El ejército republicano, renovado con la creación de las Brigadas Mixtas y liderado por el general Vicente Rojo, intentó tomar la iniciativa. En la batalla de Teruel, la ciudad fue ocupada por los republicanos durante un mes y reconquistada por los franquistas en febrero de 1938. Los nacionales avanzaron en todo el frente de Aragón, llegando hasta el mar en Vinaroz, dividiendo la zona republicana en dos. La batalla del Ebro (julio-noviembre de 1938) fue la batalla decisiva, la más dura de toda la guerra. La ofensiva republicana pretendía cambiar el signo de la guerra y alargar el conflicto. El triunfo del ejército franquista, con la colaboración italiana y alemana, supuso el hundimiento definitivo del ejército popular.
Ocupación de Cataluña (Febrero 1939)
Las tropas de Franco ocuparon Cataluña en febrero de 1939. El gobierno de Franco fue reconocido oficialmente por Francia e Inglaterra. Azaña renunció a su cargo de Presidente de la República (27 de febrero de 1939).
El Final de la Guerra y de la República
Tras la ocupación de Cataluña, Negrín y los comunistas defendieron la resistencia y la prolongación del conflicto para enlazarlo con la inminente guerra mundial. Casado, Miaja y Besteiro intentaron llegar a un acuerdo con Franco para poner fin a la guerra, pero Franco no aceptó ninguna condición. La Junta Nacional de Defensa, presidida por el coronel Casado, declaró ilegítimo al gobierno republicano de Negrín y entregó a Franco la zona restante en manos de los republicanos. El ejército nacional entró en Madrid y rápidamente ocupó el resto del territorio hasta la costa levantina. El 1 de abril de 1939, un parte final de la guerra firmado por Franco puso fin a la contienda.
Evolución Política
La Zona Republicana
El Gobierno de Giral (1936)
El Estado republicano fue incapaz de controlar su propio territorio. Tras el golpe de Estado, Quiroga dimitió, siendo sustituido por Barrio para intentar un Gobierno de conciliación con los rebeldes, lo cual fracasó. En julio de 1936, José Giral formó un Gobierno moderado de izquierda. Su autoridad disminuyó tras el reparto de armas a las organizaciones obreras. Se inició una revolución espontánea liderada por los sindicatos UGT y CNT, que no tomaron el poder del Estado, sino que crearon organismos propios que funcionaban con total autonomía e independencia del Gobierno. Se produjo una dura e indiscriminada represión sobre políticos y personas sospechosas de simpatizar con las derechas, con asesinatos y ajustes de cuentas. Los sindicatos llevaron a cabo numerosas incautaciones, intervenciones y colectivizaciones de propiedades privadas y del clero, servicios públicos, tierras e industrias. El gobierno de la República se vio impotente para detener a estas milicias, afectando a su imagen. El bando republicano se dividió en:
- Partidarios de hacer la guerra y la revolución simultáneamente, apoyados por la CNT, POUM, sectores de la UGT y del PSOE (Largo Caballero).
- Partidarios de ganar la guerra y dejar la revolución para más adelante; reconstruir el estado, crear un ejército. En esta línea estaban la mayoría del PSOE (Prieto, Negrín) y el PCE. Además, la Generalitat de Cataluña y el PNV controlaban sus respectivas Comunidades Autónomas.
El Gobierno de Coalición de Largo Caballero (1936-1937)
Largo Caballero se impuso como presidente del Gobierno, apoyado por el PSOE, UGT, PCE, ERC, PNV, CNT-FAI. El gobierno de Largo Caballero adoptó las siguientes medidas:
- Legalizar las incautaciones (realizadas por los campesinos) de los que hubiesen apoyado la rebelión militar.
- Constituir un ejército republicano integrado por las milicias, un proceso complejo debido a la resistencia de los miembros de la CNT y del POUM a someterse al ministro de la Guerra.
- Crear tribunales de justicia para contener la represión indiscriminada.
La retirada del Gobierno de Valencia hizo descender su popularidad. La Junta de Defensa de Madrid adquirió gran prestigio. Los comunistas ganaron fama gracias al apoyo militar soviético. Los enfrentamientos internos debilitaron al gobierno. En mayo de 1937, estalló una pugna por el control de los servicios públicos en Barcelona, que estaban en manos de la CNT. Se produjo una batalla campal en las calles de Barcelona entre la UGT, el PSUC y las fuerzas de la Generalitat, por un lado, y los anarquistas y el POUM, por otro. Los incidentes de Barcelona repercutieron en:
- El POUM fue juzgado y condenado por deslealtad a la República.
- La Generalitat de Cataluña perdió sus atribuciones en materia de orden público.
- Largo Caballero se vio obligado a dimitir y su gobierno de coalición se derrumbó.
El Gobierno de Negrín (1937-1939)
El ascenso de los comunistas se debió al apoyo ruso y a su influencia en el Ejército Popular. El gobierno de Negrín se trasladó a Barcelona y recuperó el control del estado. Su programa se plasmó en un documento, los trece puntos (mayo de 1938), que exponía las bases del fin de la guerra. Era partidario de continuar con la guerra para enlazarla con el conflicto internacional. Se produjo la dimisión de Prieto por el desastre de la batalla de Aragón, y la oposición de Azaña, partidario de pactar con Franco. La caída de Cataluña provocó el exilio del gobierno republicano. Negrín regresó para encabezar la resistencia. En Madrid, Casado encabezó un golpe militar que entabló negociaciones con Franco, produciéndose la rendición final sin lucha.
La Zona Franquista
Organización Política Inicial
La sublevación tenía como objetivo derrocar al Gobierno. El golpe de Estado fue promovido por militares y apoyado por fuerzas políticas (carlistas y fascistas). La España nacional se caracterizó por institucionalizar el nuevo estado y la política conservadora contraria a las reformas de la República. Tras la muerte de Sanjurjo, se constituyó la Junta de Defensa Nacional de Burgos, presidida por Cabanellas y controlada por Mola.
Nombramiento de Franco y la Junta Técnica del Estado
Tras la reunión en Salamanca, Franco fue designado, el 1 de octubre de 1936, jefe de Gobierno y Generalísimo de los ejércitos. Franco disolvió la Junta de Defensa y creó un organismo administrativo, la Junta Técnica del Estado, con sede en Burgos, aunque el cuartel general se estableció en Salamanca.
Unificación Política
Se creó un Estado fascista, ideado por Suñer, que convirtió a Franco en el Caudillo. Se unificaron Falange Española de Primo de Rivera, la Comunión Tradicionalista de los carlistas y las JONS, formando Falange Española Tradicionalista y de las JONS, siguiendo el modelo fascista de partido único. Franco asumió la dirección.
Primer Gobierno de Franco
El 30 de enero de 1938, Franco asumió la Jefatura de Gobierno y del Estado con poderes ejecutivos y legislativos, con capital en Burgos. Los ministros provenían de las denominadas “familias políticas”. El nuevo gobierno elaboró una legislación político-religiosa que incluía: control estatal de la prensa, supresión del pluralismo político, legalización de la pena de muerte, restablecimiento del catolicismo como religión oficial, abolición de las medidas de la 2ª República y persecución del comunismo. En materia social, se aprobó el Fuero del Trabajo, estableciendo sindicatos verticales. En materia económica, se avanzó hacia una economía intervencionista.
Consecuencias de la Guerra
La Guerra Civil dejó un trágico balance de muertes, desapariciones, exilio, represión y pérdidas económicas, aunque algunos grupos sociales se beneficiaron de la nueva situación.
Consecuencias Demográficas
Disminución de la Población
Se estima que hubo alrededor de un millón de muertos y desaparecidos, incluyendo muertes directas por la guerra, fusilados, asesinados y encarcelados, además de un descenso de la natalidad. El exilio representó una pérdida significativa, tanto en cantidad como en calidad. Muchos huyeron a Francia, México, países iberoamericanos, EEUU y la URSS, llevándose consigo una población activa importante.
Consecuencias Económicas
Ruina del País
Se produjeron grandes pérdidas materiales, disminución de la población activa, descenso de la producción en todos los sectores y del nivel de renta. La economía experimentó una larga fase de estancamiento.
Consecuencias Políticas
Dictadura y Aislamiento Internacional
Se instauró una larga dictadura personal de Franco, caracterizada por la represión, la falta de libertad política y la supresión de los derechos fundamentales. La represión política e ideológica se ejerció desde el comienzo de la guerra en cada territorio ocupado. La Ley de Responsabilidades Políticas, con carácter retroactivo, permitió perseguir a todos los que hubiesen participado en la vida política republicana. Se suprimieron partidos, sindicatos y todas las libertades democráticas. España sufrió un aislamiento político internacional.
Consecuencias Culturales
Un Desierto Intelectual
Se destruyó todo el esfuerzo de regeneración cultural de la Edad de Plata (1898-1936). Autores como Machado, Lorca, Albertí, Picasso y Américo Castro se marcharon al exilio o murieron. La cultura sufrió una fuerte censura.
Dimensión Internacional del Conflicto
Aunque hubo una postura conjunta de no intervención, las grandes potencias adoptaron posturas individuales. Ambos bandos recibieron ayuda internacional. España se convirtió en un escenario mundial, con apoyos a uno u otro bando.
El Comité de No Intervención
Se constituyó el 24 de agosto de 1936, con la adhesión de 27 Estados europeos. México mantuvo una posición favorable al gobierno legítimo español. Francia cerró las fronteras con España el 8 de agosto, y Gran Bretaña permaneció firme en el abandono de la República. Alemania e Italia ayudaron a los rebeldes, aportando armas y soldados. La República encontró ayuda en la URSS. Esta política se enmarcó en la política de apaciguamiento llevada a cabo por los gobiernos de Gran Bretaña y Francia.
Las Acciones Individuales de las Potencias
Apoyos a los Nacionalistas
La intervención de la Italia fascista y de la Alemania nazi a favor del ejército nacional fue decisiva. Italia y Alemania realizaron grandes aportaciones de hombres y medios por:
- El conflicto español les sirvió para poner a punto sus ejércitos de cara a la guerra mundial.
- Alemanes e italianos simpatizaban ideológicamente con los sublevados.
- La ayuda les permitió ejercer influencia sobre un nuevo aliado.
Alemania proporcionó la Legión Cóndor. Italia ayudó con el Cuerpo de Tropas Voluntarias y aviones. Portugal controló la frontera. El papado alentó a los católicos a apoyar la causa nacional. Fascistas irlandeses y EEUU vendieron combustible.
Apoyo a los Republicanos
El principal apoyo fue la Unión Soviética, tras recibir el oro del Banco de España. Proporcionó todo tipo de ayuda. El apoyo soviético respondió a un intento de acercamiento a los gobiernos democráticos para hacer frente a la amenaza fascista, concretándose en:
- A través de la Internacional Comunista con las Brigadas Internacionales.
- Apoyo militar con la entrega de armamento.
México proporcionó munición y acogió a exiliados.
Las Democracias: Neutrales
La República solicitó ayuda a Francia y Gran Bretaña, que se mantuvieron neutrales. EEUU se mantuvo neutral por no apoyar el comunismo. La causa republicana atrajo las simpatías de intelectuales de países demócratas, como Orwell, Hemingway y Robert Capa.
La Creación del Estado Franquista: Fundamentos Ideológicos y Apoyos Sociales
El nuevo régimen político se caracterizó por la concentración absoluta del poder en la persona de Franco, que mantuvo en sus manos la Jefatura del Estado, del Gobierno, de los ejércitos y del partido único, recibiendo el título de caudillo. Los rasgos de la dictadura militar fueron: autoritarismo, centralismo y nacional-catolicismo. El estado franquista se definió como una democracia orgánica, donde la representación no se conseguía a través del sufragio universal y de los partidos políticos. El franquismo se mantuvo siempre como un régimen autoritario y personal. Franco conservó el poder e iniciativa legislativa, sin Cortes representativas ni Constitución que limitase sus poderes.
Bases Legales del Estado Franquista
El Estado franquista careció de un texto constitucional único y se rigió por un conjunto de leyes que se fueron promulgando a lo largo de los años y se adaptaron al cambio de los tiempos, conocidas como Leyes Fundamentales. Son siete:
- El Fuero del Trabajo (1938): promulgado durante la guerra, recogió principios laborales generales.
- La Ley de Cortes (1942): creó las cortes franquistas, que solo aprobaban las leyes.
- El Fuero de los Españoles (1945): reconoció los derechos esenciales recogidos en cualquier constitución.
- La Ley de Referéndum Nacional (1945): permitió al jefe del estado someter a consulta los proyectos de ley elaborados por las Cortes.
- Ley de Sucesión a la Jefatura del Estado (1947): definió a España como un estado católico, social y representativo. Franco tendría el poder vitalicio y podría designar a su sucesor, creándose el Consejo de Regencia y el Consejo del Reino.
- La Ley de Principios Fundamentales del Movimiento Nacional (1958): definió el régimen como una monarquía tradicional, católica, social y representativa.
- Ley Orgánica del Estado (1966): diseñó las líneas generales de España a la muerte de Franco, definiendo el sistema político como una democracia orgánica.
Fundamentos Ideológicos
El nuevo régimen se apoyó en una ideología política reaccionaria. El franquismo fue una reacción extrema contra todo lo que representaba en la historia de España la ilustración, el liberalismo, la democracia, la masonería y el socialismo. Se rechazaron las instituciones liberales y la democracia parlamentaria; se reprimió el marxismo y el comunismo; se exaltó el nacionalismo español y se suprimieron los nacionalismos periféricos, prohibiéndose el uso oficial de otra lengua que no fuese el castellano. El catolicismo fue la religión del estado. Estos objetivos se cumplieron a través de un estado fuerte y muy centralizado.
Bases Sociales
El régimen contó con el apoyo de los sectores más conservadores, incluyendo a amplios sectores sociales despolitizados. El ejército ocupó el papel más destacado junto con la iglesia. Los grandes terratenientes, la burguesía industrial y financiera contaron con menor adhesión entre los núcleos industriales y sectores obreros urbanos.
- La Falange: los falangistas se integraron en el partido de Franco, controlando la vida social y económica del país a través del Frente de Juventudes, la Sección Femenina y la Organización Sindical.
- El ejército: vencedor de la guerra y garantía de la continuidad del régimen.
- La Iglesia Católica: Franco estableció la religión católica como oficial, suprimiendo el divorcio y haciendo obligatorio el matrimonio religioso. El nacional-catolicismo fue la doctrina política que expresó la unión entre la iglesia y el estado.
Evolución Política y Coyuntura Exterior
El Primer Franquismo (1939-1959): Construcción y Consolidación del Régimen
Régimen Totalitario (1939-1945)
El franquismo se institucionalizó bajo la influencia de Alemania e Italia. Los falangistas y los militares tuvieron un gran protagonismo, con Serrano Suñer como figura relevante. Franco fue el caudillo, líder indiscutido, concentrando todos los poderes del estado. Franco lideró el único partido o movimiento, FET y de las JONS. Hubo una única organización sindical y una organización juvenil (el Frente de Juventudes). Fueron años de represión contra todos los que habían luchado contra las tropas nacionales y contra toda persona cuya trayectoria estuviese alejada de la ideología franquista. Se aprobaron la Ley de Represión contra la Masonería y el Comunismo y la Ley de Seguridad del Estado. Miles de personas fueron depuradas, encarceladas, condenadas a muerte o perdieron su trabajo. El exilio fue un medio de escapar a esta represión. La actitud de España ante la 2ª Guerra Mundial: pese a las simpatías hacia los países del eje Roma-Berlín, España se mantuvo primero como neutral y luego como no beligerante, regresando nuevamente a la neutralidad cuando vio que Alemania comenzaba a retroceder ante los aliados. El gobierno envió la División Azul al frente alemán de Rusia.
Aislamiento Internacional (1945-1951)
España sufrió grandes dificultades económicas y políticas, quedando excluida de las ayudas del Plan Marshall para la reconstrucción de diversos países europeos. No se permitió su entrada en la ONU, que recomendó retirar los embajadores. Aumentó la influencia de los católicos en los gobiernos de Franco frente a los falangistas, iniciándose el nacional-catolicismo. Se impulsaron cambios institucionales, demostrando que España no era un país fascista.
Fin del Aislamiento Internacional (1951-1959)
La Guerra Fría permitió al franquismo salir del aislamiento y ser reconocido internacionalmente. Los embajadores comenzaron a regresar a Madrid (1951). España ingresó en los organismos internacionales y finalmente formó parte de la ONU (1955). Llegó la ayuda norteamericana en forma de cooperación económica y militar con EEUU (Pacto de Madrid, 1953), los americanos consiguieron facilidades para instalar bases militares de soberanía conjunta a cambio de ayuda militar y la concesión de créditos a España. Se firmaron acuerdos con la Santa Sede, el Concordato de 1953 confirmó la confesionalidad católica del Estado español (la enseñanza de la religión es obligatoria en las escuelas), Franco tuvo derecho de presentación de los obispos. Se inició el proceso descolonizador de las colonias españolas en África, finalizando el protectorado sobre Marruecos y la Guerra de Ifni.
La Evolución del Franquismo (1959-1975): El Franquismo Tardío
Los Años Dorados del Franquismo, los Años del Desarrollismo (1959-1969)
España experimentó un rápido y desequilibrado crecimiento económico. Se inició una tímida apertura política. Los ministros tecnócratas pasaron a ocupar un papel importante en los gobiernos de Franco. Iribarne, como ministro de Información y Turismo (1962-1969), creó una infraestructura hostelera y promovió una moderada liberalización de la información periodística con la Ley de Prensa de 1966, que suprimió la censura previa y la sustituyó por multas. La Ley Orgánica del Estado separó la jefatura del estado de la jefatura de gobierno. En 1969, Franco nombró a Juan Carlos de Borbón su sucesor en la Jefatura del estado con el título de rey. Los falangistas perdieron poder político a partir de los años 60. Los tecnócratas, profesionales del Opus Dei, ocuparon los cargos de mayor responsabilidad económica en la España de los años 60, con López Rodó como máximo representante e impulsor de los planes de desarrollo. Hubo una dura lucha por el poder entre falangistas y tecnócratas. El caso Matesa fue el escenario de esta lucha, y los ministros falangistas salieron del gobierno (1969). Franco nombró un nuevo gobierno solo de tecnócratas, con Carrero Blanco.
Los Últimos Años del Franquismo (1969-1975)
En 1973, Franco estaba enfermo y nombró presidente del gobierno a Luis Carrero Blanco, que fue asesinado por ETA. A partir de ese momento, se hizo más evidente el enfrentamiento entre dos grupos dentro del franquismo:
- Inmovilistas: defendían mantener el régimen sin cambios.
- Aperturistas: apostaban por un proceso de reformas y la creación de asociaciones políticas dentro del Movimiento Nacional.
En 1974, un nuevo gobierno, presidido por Carlos Arias Navarro, pareció encaminarse hacia la apertura con promesas de reformas graduales del Régimen, en el llamado espíritu del 12 de febrero. Pero las reformas fueron insignificantes. Las acciones violentas de grupos armados antifranquistas, como ETA, FRAP y GRAPO, fueron contestadas con la ejecución de Puig Antich en 1974. La Marcha Verde, organizada por el rey Hassan II sobre el Sahara, obligó a España a entregar el territorio a Marruecos para evitar una guerra. Franco murió el 20 de noviembre de 1975, y con su muerte se inició la desaparición del régimen franquista.
La Oposición al Régimen
El franquismo nunca estuvo en peligro, pero siempre tuvo oposición.
Años 40
La oposición era débil y estaba desunida. El gobierno republicano en el exilio, con D. Juan de Borbón, publicó en 1945 el Manifiesto de Lausana, en el que pedía la democracia liberal para España. Hubo una brutal represión y leyes franquistas como la Ley de Responsabilidades Políticas (1939) o la Ley para la Supresión de la Masonería y el Comunismo (1940). Las primeras huelgas fueron reprimidas. En zonas montañosas nacieron guerrillas armadas, los maquis, formadas por comunistas y anarquistas.
Años 50
Se produjeron las primeras manifestaciones de protesta social. Tras la guerra civil, los sindicatos eran ilegales. En 1951 estalló una huelga en Barcelona. En 1956, una oleada de huelgas sacudió el País Vasco, Asturias, Madrid y Barcelona, en protesta contra la inflación y pidiendo mayor salario. Empezaron las revueltas estudiantiles en la Universidad. En Madrid, los estudiantes se enfrentaron al Sindicato Español Universitario.
Años 60
Creció mucho la oposición al régimen. En 1962 tuvo lugar una reunión en Múnich de políticos españoles de la oposición, que reclamaron para España plena democratización para poder ingresar en la Comunidad Económica Europea. El movimiento obrero organizó huelgas en la zona minera asturiana, el País Vasco, Cataluña y Madrid. Nacieron las Comisiones Obreras, sindicato creado por Marcelino Camacho. El movimiento estudiantil exigía libertades democráticas. El Sindicato Democrático de Estudiantes surgió en 1965 en Madrid y Barcelona. Los estudiantes hacían frente común con los obreros, siguiendo la táctica del Partido Comunista de España dirigido por Santiago Carrillo. La Iglesia católica, influida por el espíritu modernizado del Concilio Vaticano II, se distanció del franquismo, denunciando la violencia contra los opositores políticos y la falta de libertades. El cardenal Tarancón pidió perdón a la sociedad española por no haber sido la iglesia un elemento de reconciliación entre los españoles. El gobierno intentó expulsar a Añoveros, obispo de Bilbao, por reivindicaciones nacionalistas, y la Iglesia amenazó con excomulgar al gobierno.
Años 70
Se produjeron protestas y huelgas diarias. Entre los partidos políticos ilegales, el más importante era el PCE. En Cataluña, el PSUC. El PSOE, en el Congreso de Suresnes en 1974, renovó su dirección con Felipe González. Surgieron partidos terroristas como el FRAP y el GRAPO. Los partidos nacionalistas como ERC y PNV aparecieron (ETA y CDN en 1947).
Años Finales
: alianzas entre partidos de la oposición. En 1974, se constituyó en Paris la Junta Democrática de España. El PSOE junto con la Democracia Cristiana, formo en 1975 la Plataforma de Convergencia Democrática. Ambos se fundirán en Coordinación Democrática en 1976, Franco ya muerto. Protestas internacionales. Destacan, el proceso de Burgos(1970) contra ETA; y el proceso 1001 contra CCOO. En 1974 Puig Antich fue ejecutado.
TRANSFORMACIONES ECONOMICAS: El franquismo pasó del aislamiento al reconocimiento y consolidación del régimen. Los acuerdos con EEUU, Concordato con la Santa Sede(1953) e ingreso en la ONU(1955) constituyeron una garantía de futuro. Franco aconsejado por Carrero Blanco, formó un nuevo gobierno(1957) con miembros del Opus Dei, los tecnócratas; así Carrero Blanco desplazó a los falangistas y los militares perdieron protagonismo. Pretendían sacar a España del colapso económico y modernizar sus estructuras, poniendo en marcha el Plan de Estabilización(1959). La institucionalización del régimen fue un proceso lento y continuo. En 1957 se promulga la Ley de Régimen Jurídico de la Administración Civil del Estado. En 1958 la Ley de Principios del Movimiento Nacional, definía el régimen como una “monarquía tradicional, católica, social y representativa”. A partir de aquí el régimen adquirió una apariencia más moderna, y el peso de los tecnócratas fue mayor; se promulgaron una serie de leyes que, sin democratizar el sistema, pretendían acercarse a los otros estados europeos: Ley de Prensa e Imprenta(1966), Ley Orgánica del Estado(1966), Ley de Libertad Religiosa(1967); y en 1969 J.Carlos de Borbón es nombrado sucesor a título de rey, jurando lealtad a la Ley de Principios del Mov. En 1969 se formaría un nuevo Gobierno más tecnócrata y con Carrero Blanco de vicepresidente. En materia económica se vivió una transformación, se pasó de la autárquica al desarrollismo. Tras la guerra civil el régimen estableció una autarquía económica subordinada a los intereses políticos. Las consecuencias de la autarquía fueron negativas: elevó la inflación, frenó el crecimiento, disminuyó la producción agrícola, lo que provocó escasez, alza de precios y hambre; y obligó a distribuir cartillas de racionamiento. Las medidas liberalizadoras del gobierno tecnócrata en 1959 posibilitó la transformación del sistema productivo. El Plan de Estabilización ponía fin a la autarquía e iniciaba el desarrollismo. Poniéndose en práctica medidas para controlar la inflación: reducción de los créditos, supresión de regulaciones y subvenciones, ajustar los gastos del Estado a los ingresos, y reducir las importaciones al devaluarse la peseta. La política económica se concretó en los Planes de Desarrollo, tres entre 1962 y 1975, coordinados por la Comisaría del Plan de Desarrollo dirigida por López Rodó. El eje de la actividad económica se desplazó de la agricultura a la industria y en menor grado a los servicios. Se mecanizó el campo, y el exceso de mano de obra se desvió hacia la industria, iniciando un gran éxodo rural. La mitad de la producción industrial se concentró en Cataluña, País Vasco y Madrid. Experimentó gran desarrollo la producción de bienes de consumo(SEAT 600), química, siderúrgica y alimentaria. La balanza comercial se compensó con las divisas procedentes de los emigrantes, el turismo y la entrada de capital del exterior. Los planes de desarrollo no fueron determinantes del crecimiento económico. España aprovechó el ciclo económico favorable aumentando la exportación de productos y de mano de obra excedente; además logró un acuerdo preferencial con la CEE(1970). El crecimiento económico tuvo deficiencias: dependencia del exterior, desequilibrios regionales, inexistencia de una reforma fiscal, y control del poder económico. Disminuyó desde 1967, hasta la llegada de la crisis mundial(1973). El desarrollo económico trajo cambios sociales, transformando los hábitos y mentalidades. Produjo un aumento de la población, como consecuencia de un incremento de la natalidad(baby boom, 1956-67) y un descenso de la mortalidad; que unido al desigual reparto de la riqueza intensificaron el proceso migratorio, el interior (País Vasco, Cataluña, Valencia y Madrid); y exterior (Europa y América). La emigración fue una válvula de escape para el régimen; creó el Instituto de Emigración (1957), y aprobó la Ley de Ordenación del Emigrante; aceleró el proceso urbanizador, y la desrruralización aceleró la modernización de la agricultura. El tránsito a una economía industrial y de servicios provocó: aumento de las clases medias, disminución de los jornaleros agrarios y aumento de los obreros industriales y de servicios. Irrumpió el consumismo, y nuevas aficiones para el ocio: deporte, radio, televisión, etc. La sanidad mejoró con la Ley de Bases de la Seguridad Social (1963); la educación era un objetivo prioritario, aumentó la escolarización, y en 1970 se promulgó la Ley General de Educación; mientras la Iglesia se transformaba y el papel de la mujer varió y se incorporó al trabajo.
Comité de no Intervención: Formado por un grupo de países europeos con el objetivo de que la Guerra Civil española (1936 1939) no supusiera la generalización del conflicto en Europa. Velaba por la vigilancia y prohibición de entrada en territorio de armamento y material bélico que alargaran el enfrentamiento. No obstante no supo impedir la ayuda de Alemania e Italia al bando sublevado y de la URRS a la República. Se considera una injusticia el que a un gobierno legítimo y democrático como el de la II República se le impidiera pedir o buscar ayuda para su autodefensa.
Milicianos: Fueron los cuerpos de voluntarios, procedentes generalmente de partidos o sindicatos, que espontáneamente se organizaron y armaron para la defensa de la República frente a la sublevación militar del 18 de julio de 1936. En septiembre de aquel año el Gobierno trató de integrarlos como unidades regulares del ejército. Los comunistas apoyaron plenamente esta regularización, mientras que los grupos anarcosindicalistas prefirieron seguir actuando en unidades propias.
Guerra Civil: sufrida entre 1936 y 1939. Un enftentamiento entre españoles divididos en dos bandos. El bando nacional ejecutor del golpe de estado que al fracasar en la mitad del territorio condujo a una lucha civil y que encuadraba a conservadores, militares, fascistas, carlistas, católicos y propietarios. El bando republicano, que defendió el estado legítimamente constituido, estaba formado por republicanos de izquierda, socialistas, comunistas, anarquistas y progresistas. La falta de unidad en el bando republicano, las dificultades que Europa le impuso para su defensa, la carencia de mandos militares, dieron con la derrota del gobierno y la España republicana.
Legión Cóndor: Grupo de ejército de aviación alemán enviado por Hitler en ayuda al general nacionalista Francisco Franco, durante la Guerra Civil española (1936 – 1939). A cambio de minerales y otros productos españoles. Es tristemente célebre por bombardear una población (Guernica) sin ningún interés militar, ni estratégico; solamente con el único fin de poner en práctica la guerra psicológica y comprobar el efecto de un bombardeo indiscriminado sobre la población civil y el potencial de fuego de los aviones alemanes.
Autarquía: Etapa económica durante el régimen franquista, entre 1939 y 1959. Se pretendía lograr la autosuficiencia económica con la sustitución del mercado, la intervención generalizada de la Administración, la explotación de los productos nacionales y la configuración de un tejido industrial suficiente como para depender lo menos posible de la producción y el mercado de otros países. Los resultados fueron calamitosos, generalizándose. el hambre hasta 1941, el racionamiento hasta 1951 y el desabastecimiento.
Desarrollismo: Etapa económica durante el régimen franquista, entre 1959 y 1975. Mediante la apertura de fronteras a la inversión extranjera y al comercio, la devaluación de la peseta con respecto al dólar, la remesa de emigrantes y una coyuntura favorable en nuestros vecinos europeos, España fue capaz de’ experimentar un crecimiento económico muy significativo a costa de una creciente inflación y daños ambientales irreparables.
FET y de las JONS: El partido político creado por Franco en 1937 al unificar a FE y de las JONS (falangistas) con la Comunión Tradicionalista(carlistas), con el propósito de evitar divisiones internas en el bando nacional y desvirtuar a las dos ideologías y grupos políticos de mayor entidad. Ante la oposición de sus dirigentes, el falangista Manuel Hedilla fue encarcelado y el carlista Fal Conde desterrado. Este partido era el único legalizado y con el paso del tiempo fue perdiendo peso político e influencia en el régimen de Franco.
Franquismo: Término con el que se designa al régimen político instaurado por el general Francisco Franco desde 1939 hasta su muerte en 1975. Sus fundamentos ideológicos fueron la persistencia de un nacional-catolicismo, bajo el odio hacia todo lo liberal y marxista. Se institucionalizó una dictadura militar con una estética falangista, en imitación al fascismo italiano, que fue desapareciendo ante la necesidad de irse ganado el reconocimiento de las potencias democráticas. La represión y el miedo que ejercía las fuerzas de orden público, el ejército y la iglesia fueron capaces de repeler la oposición al régimen hasta la muerte de Franco.
Leyes fundamentales: conjunto de disposiciones legales que desde la Guerra civil se van promulgando para institucionalizar el nuevo régimen, adecuando el lenguaje más que los contenidos que cambian muy poco a las conveniencias del momento. Son 7.
Maquis: Guerrilleros que actuaron en los sistemas montañosos de España. Eran excombatientes republicanos españoles, que tras haber apoyado al ejército de liberación francés, entran en España para comenzar a derribar el gobierno franquista, alentado por el PC y la CNT-FAI y esperanzado en conseguir el apoyo de los países aliados. Fueron vencidos y dispersos por el ejército de Franco, desapareciendo en 1950.
Opus Dei: Organización católica fundada por José María Escrivá de Balaguer en 1928, y dedicada al fomento y propagación de la moral católica, en todos los ámbitos, familiar, profesional y social. De planteamientos integristas, sus miembros son sacerdotes y seglares. En la segunda mitad del franquismo muchos de sus miembros ocuparon los puestos clave en los ministerios, especialmente los de tipo económico, llegando a constituir un auténtico poder dentro del régimen.
Tecnócratas: Persona que ocupa un cargo público por la preeminencia de sus conocimientos técnicos.