Escultura romana

Tema 4. escultura romana

1.- Características generales de la escultura en Roma


1. Un gran realismo, especialmente en el retrato,que alcanza gran profundidad psicológica
2. Se conservan principalmente estatuas de mármol y de piedra. Sin embargo, existían también esculturas de madera, yeso, terracota, bronce, oro, plata y marfil.
3. En las esculturas, generalmente, se pintaban el cabello, barba, labios, cejas, pestañas, iris de los ojos y también, el vestido.
4. La plástica romana tuvo su expresión más característica en dos campos: el relieve histórico y el retrato.

5. la mayoría de las esculturas romanas de divinidades y héroes son copias de prototipos griegos. Existen copias o variantes de originales de casi todas las épocas del arte griego. En las ciudades del Imperio Romano se levantaban gran cantidad de estatuas sobre todo en las plazas y en los edificios públicos; de este modo el pueblo podía contemplar diariamente las representaciones de divinidades, héroes, emperadores y hombres ilustres. El papel de la escultura en el ámbito público no se limitaba solamente a ser la expresión de un sentido puramente estético, sino que debe interpretarse como un testimonio del orden político y social sobre el que se asentaba el Imperio Romano, con una clara función de propaganda política
7. En las ciudades algunas construcciones públicas mostraban una decoración escultórica más profusa que otras. Era el caso de los templos o de los edificios destinados al ocio, como teatros, bibliotecas y termas.
8. El Foro, como centro administrativo y comercial de una ciudad, era otro lugar muy apropiado para la colocación de esculturas.
9. La escultura romana destaca los acontecimientos históricos y a las personalidades
públicas, así su sentido es claramente propagandístico.
2.-

El retrato




A) Características generales

1. A diferencia de la idealización propia del retrato griego el retrato romano se caracteriza por su realismo. El realismo lleva al escultor a resaltar los rasgos individuales sin omitir los defectos a través de una cuidadosa observación de los modelos
2. Además de la influencia del arte griego del periodo helenístico es también evidente la del retrato etrusco, uno de cuyos ejemplos más notorios es el retrato titulado El orador. Asimismo influyó el sentido objetivo, realista y positivista del romano
representado en las
imágenes maiorum o mascarillas de cera de los difuntos que se guardaban en el atrio de la casa, en recuerdo de los antepasados.
3. A lo largo del tiempo hay una clara evolución en el retrato del que se practicaron las formas más variadas: de cuerpo entero, sedentes, ecuestres, bustos sólo hasta el cuello o que incluyen el pecho y los hombros, etc. Después de la muerte de Augusto aparece un nuevo tipo de retrato en que se representa al emperador como un dios, semidesnudo, y coronado de laurel. La barba se generaliza a partir de Adriano.
4. Son numerosísimos los retratos de todo tipo conservados de los emperadores y sus familiares, caracterizándose por la evolución desde el realismo a las formas más idealizadas de influencia griega helenística y desde éstas hacia las formas esquemáticas y faltas de movilidad en las obras de los siglos II a IV.
5. Son menos numerosos los retratos femeninos. Entre ellos destaca el de Livia, mujer de Augusto.


B) Desarrollo histórico. Etapas:En su desarrollo histórico, el retrato romano atravesó las siguientes etapas:

1.- Durante la etapa republicana (S. III al I. a.C.), el interés se centraba en la cabeza, sobre todo en la cara, prescindiendo del cuerpo. Son retratos de gran realismo, con arrugas y expresiones severas.
2.-En la etapa de Augusto (Siglo I a.c.) se impone la moda griega sobre todo para las clases altas- con un realismo distinto al de la etapa republicana y aparece así cierta idealización que no impide recoger los rasgos faciales individuales, llegándose incluso a la representación divinizada de los emperadores.

3.- En etapa de la dinastía Flavia (la de los sucesores immediatos de Augusto), en contra de la corrección académica y cortesana imperante en el periodo anterior, se vuelve a la sinceridad del retrato de la época republicana. Se pierde la frontalidad, consiguiendo dar a las figuras una expresión natural y despreocupada. En este momento el retrato adquirió un carácter monumental y efectista

4.- En la etapa de Adriano (Emperador del Siglo I d.c.), renace la idealización griega con tres innovaciones: la aparición de la barba, la incisión de las pupilas y el iris (que dan expresividad a los retratos) y la prolongación del busto hasta más debajo de los pectorales

5.- El retrato llega a un puro barroquismo conlos Antoninos: la barba y la cabellera se rizan y entrecruzan desmesuradamente; aumenta el interés por los efectos del claroscuro, conseguidos por el uso del trépano. Hasta el S. II, los retratos se policromaban, acentuándose más aún los contrastes.

6.- Durante el S.III (época de los Severos), comienza la decadencia del retrato Son interesantes los de los emperadores Caracalla y Septimio Severo. En el periodo final del imperio los retratos se apartan cada vez más de la realidad, preludiando la estilización bizantina. Son de este periodo los Tetrarcas de San Marcos en Venecia y la monumental Cabeza de Constantino en Roma.

3.- El relive histórico


Constituye un capítulo muy importante de la escultura romana. Su gran desarrollo se
explica en parte porque fue un medio más propicio que la escultura exenta para las
representaciones de escenas complejas, anecdóticas y realistas, tan identificadas con el arte
romano. Los temas, generalmente históricos, se desarrollan de forma normativa y continua,
representando campañas militares, hechos significativos o ceremonias religiosas. Surge el
gusto por el paisaje y proliferan ríos, colinas, árboles, plantas, guirnaldas de flores, etc. También solían estar decorados con relieveslos sarcófagos, de base rectangular y de
forma cúbica. Adosados al muro tienen relieves en tres lados. Los temas eran funerarios,
inspirados en la mitología griega, o escenas de batallas y cacerías, o bien en la vida o el retrato
del difunto. A veces sólo tienen decoración geométrica