El Sistema Político de la Restauración: Un Nuevo Sistema Político
Los grupos conservadores recibieron con satisfacción la restauración de los Borbones porque esperaban que la nueva monarquía devolviera la estabilidad política. Cánovas del Castillo quería un nuevo modelo político que superase algunos de los problemas del liberalismo y tenía dos objetivos: el bipartidismo y pacificar el país.
Constitución de 1876
Es un ejemplo de liberalismo doctrinario, sufragio censitario y soberanía compartida entre rey y Cortes. Consideraba la monarquía como una institución superior e incuestionable, constituía un poder moderador. Las Cortes eran bicamerales y estaban formadas por el Senado y el Congreso de los Diputados. Se establece el voto censitario y el sufragio universal masculino. La Constitución proclamaba la confesionalidad católica del Estado y contaba con una declaración de derechos.
Bipartidismo y Turno Pacífico
Cánovas introdujo un sistema de gobierno basado en el bipartidismo y en la alternancia del poder.
Fin de Conflictos Bélico
La Restauración borbónica privó a la causa carlista de una buena parte de la hipotética legitimidad y algunos personajes del carlismo acabaron reconociendo a Alfonso XIII. La consecuencia de la derrota carlista fue la abolición definitiva del régimen foral. En 1878 se estipuló el sistema de conciertos económicos. El fin de la guerra carlista permitió acabar más fácilmente con la insurrección cubana, en el año 1878 se firmó la Paz de Zanjón que incluía una amplia amnistía, la abolición de la esclavitud… El retraso de estas reformas provocó la Guerra Chiquita en 1879.
La Vida Política y la Alternancia en el Poder
Los Partidos Dinásticos
Después del retorno de Alfonso XIII, los grupos políticos más conservadores formaron el Partido Conservador y los progresistas, unionistas y algunos republicanos crearon el Partido Liberal. Los dos defendían la monarquía, la Constitución, la propiedad privada y la consolidación del Estado liberal. La alternancia en el poder tenía como objetivo conseguir la estabilidad institucional.
Falseamiento Electoral y Caciquismo
El sistema del turno pacífico se mantuvo gracias a la corrupción electoral y a la utilización de la influencia y del poder económico de determinados individuos sobre la sociedad (caciques). El caciquismo era un fenómeno que se daba en todas las regiones de España. La adulteración del voto: el triunfo del partido se conseguía gracias al falseamiento de los resultados. Los caciques eran personas notables, propietarios ricos que daban trabajo a los jornaleros y tenían una gran influencia en la vida local, se encargaban de manipular las elecciones.
El Desarrollo del Turno de Partidos
Entre 1876-1898 el turno funcionó con normalidad. El Partido Conservador gobernó desde 1875 hasta 1881, gobernado por Sagasta. En 1884 Cánovas regresó al poder e impulsó el Pacto del Pardo (dar apoyo a la regencia de María Cristina). El largo gobierno de Sagasta impulsó una gran obra reformista e implantó el sufragio universal masculino. Cánovas fue asesinado en 1897.
Las Fuerzas Políticas Marginadas del Sistema
Evolución del Republicanismo
Emilio Castelar evolucionó hacia posturas más moderadas y creó el Partido Republicano Posibilista. Ruiz Zorrilla fundó el Partido Republicano Progresista. Las prácticas insurreccionales provocaron la ruptura de Salmerón y la creación del Partido Republicano Centralista.
Reconversión del Carlismo
Después de la derrota carlista se prohibió la estancia en España de Carlos de Borbón y el carlismo entró en crisis. Juan Vázquez de Mella hizo una renovación del partido y propuso el Acta de Loredan, mientras que Ramón Nocedal fundó el Partido Católico Nacional.
El Surgimiento del Nacionalismo
A lo largo del siglo XIX fueron surgiendo diferentes nacionalismos y regionalismos como el de Cataluña (1880), el del País Vasco (1890), el de Galicia, Valencia, Aragón…
La Guerra de Ultramar
Cuba, la Perla de las Antillas
Se crearon en Cuba dos grandes partidos: el Autonomista, integrado por cubanos, y la Unión Constitucional, un partido español. En 1893 José Martí fundó el Partido Revolucionario Cubano con el objetivo de la independencia y recibió el apoyo de Estados Unidos. En 1895 el gobierno español elevó las tarifas arancelarias en Cuba.
La Gran Insurrección
En el año 1879 se produjo la Guerra Chiquita. El Grito de Baire en 1895 dio lugar a una insurrección de parte de los cubanos. Cánovas envió a Martínez Campos y su ejército a pacificar la isla. Este no pudo conseguirlo y fue destituido por Weyler, que inició una dura represión. Pero la guerra no era favorable a los soldados españoles. Después del asesinato de Cánovas, el nuevo gobierno encargó el mando al general Blanco, quien inició una estrategia de conciliación que los independentistas negaron. En 1896 se produjo una rebelión en Filipinas. El nuevo gobierno liberal nombró capitán general a Primo de Rivera, quien consiguió una pacificación momentánea.
Intervención de los Estados Unidos
Los Estados Unidos dieron apoyo a Cuba. Estos intervinieron en la guerra a causa del incidente del Maine, que estalló en el puerto de La Habana. Los Estados Unidos enviaron un ultimátum a España para que se retiraran de Cuba, pero los españoles se negaron y empezó así la guerra hispano-norteamericana. Finalmente, en 1898 se firmó la Paz de París, donde España abandonaba Cuba, Puerto Rico y Filipinas.
Las Consecuencias del Desastre del 98
Crisis Política y Moral
La crisis de 1898 fue menor de lo que se esperaba, igual que la crisis política, donde sobrevivió la Restauración. Esto estimuló el crecimiento de los movimientos nacionalistas. La crisis del 98 fue fundamentalmente una crisis moral e ideológica.
El Regeneracionismo
Fue un movimiento que hablaba de la necesidad de la regeneración de España. La crisis del 98 agudizó la crítica regeneracionista que consideraba que hacía falta la regeneración del país, enterrando glorias pasadas. Se defendía la necesidad de mejorar la situación del campo español y de elevar el nivel educativo y cultural del país. El desastre del 98 significó el fin de la Restauración de Cánovas.