Introducción al Arte Románico

El Arte Románico fue un estilo artístico predominante en Europa durante los siglos XI, XII y parte del XIII. Este estilo representa la consolidación del arte cristiano, unificando diversas influencias de la temprana Edad Media (romana, prerrománica, bizantina, germánica y árabe) en un lenguaje artístico coherente y reconocible. No se limitó a una sola región, sino que surgió de forma simultánea en Italia, Francia, Alemania y España, cada uno con sus particularidades, pero manteniendo una unidad que lo convierte en el primer estilo internacional europeo.

Arquitectura Románica

Bóveda de Cañón

La bóveda de cañón es una estructura de sección semicircular, creada por la prolongación de un arco de medio punto a lo largo de un eje longitudinal. Sus paramentos tienen forma de media superficie cilíndrica. Como toda estructura basada en el arco, el empuje se dirige hacia los muros que la sostienen, los cuales deben soportar una gran presión tanto vertical como lateral. Para contrarrestar esta presión, se emplean varios métodos:

• Aumentar el grosor y peso de los muros, reforzando la bóveda con arcos fajones o torales, apoyados en pilares o pilastras y reforzados exteriormente con contrafuertes.
• Construir dos o más bóvedas de cañón en paralelo para que sus empujes se contrarresten, método común en iglesias de varias naves, aunque los muros exteriores también necesitan refuerzos.
• Interseccionar dos bóvedas de cañón en ángulo recto, creando una bóveda de arista.

Arco Fajón

El arco fajón es un elemento estructural que refuerza la bóveda de cañón. Actúa como un costillar que la “faja” y fortalece. Estos arcos van empotrados en la estructura, transversalmente al eje, dividiéndola en tramos. El arco fajón es visible desde el interior de la bóveda, apoyándose en los pilares laterales y transmitiendo sus tensiones al exterior mediante contrafuertes en la arquitectura románica, o arbotantes en la arquitectura gótica.

Contrafuerte

Un contrafuerte, también llamado estribo, es un engrosamiento puntual de un muro, generalmente hacia el exterior, que transmite las cargas transversales a la cimentación. Los contrafuertes, que permiten al muro resistir empujes, se conocen desde la antigüedad y fueron ampliamente utilizados en todo tipo de construcciones, siendo elementos característicos del arte románico y gótico. Su origen se debe a la necesidad de soportar la componente horizontal de la carga que genera una bóveda o una cubierta a dos aguas. Estas estructuras, además de su carga vertical, tienden a “abrirse” y empujar transversalmente el muro, por lo que este debe reforzarse para no volcar. En la arquitectura románica, los contrafuertes adoptan la forma de pilastras adosadas al exterior del muro, con ancho decreciente en altura.

Catedral de Santiago de Compostela

Identificación

• Clasificación: Arte románico, arquitectura.
• Denominación: Catedral de Santiago.
• Datación: entre 1075 y 1105.
• Autoría: Bernardo el Viejo, Maestro Esteban y Bernardo el Joven.
• Localización: Santiago de Compostela, Galicia.

Descripción

La Catedral tiene planta de cruz latina, con tres naves, prolongándose las laterales en los brazos del transepto, y una espaciosa girola con ábsides radiales (1). Posee dos grandes torres a los pies, que enmarcaban la portada (2). La altísima nave central se cubre con bóvedas de cañón reforzadas por arcos fajones, mientras que las naves laterales se cubrían con bóvedas de arista. La separación entre las naves se realiza mediante arcos de medio punto peraltados y doblados, apoyados sobre pilares compuestos. Los pilares alternan la sección cuadrada y la circular (1). La esbeltez de los pilares y el peralte de los arcos crean un efecto de gran altura (2). Sobre las naves laterales se construyó la tribuna, característica de las iglesias de peregrinación. No tiene claristorio en la parte alta, pero recibe luz por las ventanas exteriores de la tribuna, que penetra en la nave a través del triforio, una galería de vanos de arcos geminados de medio punto que se abren sobre la nave central (1). Una peculiaridad de la catedral es la solución para cubrir la girola. La bóveda de arista normalmente cubre espacios cuadrados, pero en la girola, de forma circular, los tramos son trapezoides. Para adaptarse a esta forma, las aristas se diseñaron curvas y se ensancharon hacia el exterior (1). La catedral tiene tres grandes portadas: la más monumental a los pies y otras dos en los brazos del transepto.

Explicación

La catedral se construyó para albergar las reliquias del Apóstol Santiago, que descansan en la cripta. Este edificio es la meta del Camino de Santiago, una ruta de peregrinación que partía de varios puntos de Europa y que sigue el camino marcado por la Vía Láctea. Por tanto, es una iglesia de peregrinación, con la planta propia de este modelo. Presenta innovaciones, como los contrafuertes de tradición asturiana, y una funcionalidad que supera a las iglesias francesas. Incorpora soluciones previas del románico francés de peregrinación, como el ábside con girola, el triforio y el largo transepto.