El Renacimiento Italiano: Arquitectura, Pintura y Escultura

El Renacimiento Italiano: Arquitectura

Donato Bramante

Donato Bramante (1444-1514) fue un arquitecto reconocido, influenciado por Alberti y la arquitectura clásica. Su obra más famosa es el Templete de San Pietro in Montorio, encargado por el Papa Julio II. También inició la reforma del Palacio Vaticano, lo que generó una gran polémica sobre el tipo de planta más adecuado para los edificios religiosos.

Miguel Ángel Buonarroti

Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564) fue un arquitecto, escultor y pintor que realizó una interpretación muy personal del lenguaje clásico, con la intención de conseguir efectos plásticos y expresivos en la arquitectura. En el Palacio Nuevo aparece el orden colosal por primera vez. Su obra más importante en arquitectura es la continuación de la Basílica de San Pedro en el Vaticano, con una planta de cruz griega y una gran cúpula en el centro. Concibió todas las artes desde la escultura y estudió la obra de Donatello. Se educó en el círculo de los Medici, donde entró en contacto con las estéticas neoplatónicas.

Leonardo Da Vinci

Leonardo Da Vinci (1452-1519) fue un pintor y escultor, pero también músico, ingeniero e investigador. Creía que la belleza debía encontrarse en la naturaleza y no confiaba en las teorías que afirmaban cómo era la realidad. Para él, la experiencia permitía conocer la naturaleza. Rechazó la perspectiva lineal y adoptó la perspectiva aérea para dar sensación de profundidad, como en la visión natural. También utilizó el sfumato para difuminar las formas, como si estuvieran envueltas en humo o vapor.

El Renacimiento Italiano: Pintura

Rafael Sanzio

Rafael Sanzio (1483-1520) nació en Urbino y asimiló el sentido espacial de la pintura del Quattrocento. En Florencia, comprendió el sentido de belleza natural. Estableció en su pintura un nuevo clasicismo, un equilibrio entre naturalidad e idealismo, y estableció nuevos cánones de belleza, veraces y elevados. Entre sus obras más conocidas se encuentran Los desposorios de la Virgen y La escuela de Atenas.

Girgione

Girgione (1478-1510) fundó la escuela veneciana y dio forma a una nueva forma de pintar, el giorgionismo. Su pintura se caracterizaba por el uso de colores luminosos que producen una visión sintética: todo lo que aparece en el cuadro forma una unidad en la que se funden paisaje y figuras humanas. Su obra más famosa es la Pala de Castelfranco.

Tiziano Vecellio

Tiziano Vecellio (1488-1576) fue el pintor más importante de la escuela veneciana y el pintor principal de Carlos V. Aprendió con Giorgione su sentido del color y de la luz, pero añadiendo realismo y vitalidad. Transmitía con el uso del color y de la luz efectos dramáticos y sensuales que daban a su pintura una gran emoción. Realizó magníficos retratos, en los que acentuaba el aspecto psicológico, como Carlos V a caballo. Otra de sus obras más conocidas es Venus de Urbino.

Tintoretto

Tintoretto (1518-1594) fue el gran representante de la escuela veneciana durante el manierismo. Con sus cuadros llenos de energía, y una especial maestría en cuanto a perspectiva e iluminación, Tintoretto es considerado unánimemente el precursor del arte barroco. Su maestro fue Tiziano, y de él aprendió sobre todo a utilizar el color.

Veronese

Veronese (1528-1588) se alejó del naturalismo del Renacimiento pleno para realizar pinturas en las que la riqueza del color y la cuidada composición describen ambientes teatrales, llenos de detalles lujosos. Todos los elementos están idealizados a través del color, como en Las bodas de Caná. En lugar de colores empastados, su pincelada es precisa y nítida, dando a la pintura un acabado esmaltado. Otra de sus obras conocidas es Moisés salvado de las aguas.

El Renacimiento Español: Arquitectura

Juan de Herrera

Juan de Herrera (siglo XVI) fue un arquitecto, matemático y militar español, considerado uno de los máximos exponentes de la arquitectura renacentista española. Modificó los planos del Monasterio de El Escorial, ampliándolos y cambiando la ornamentación del interior de la iglesia y la traza de la fachada, haciendo un edificio singular que llama la atención por su austeridad. Basa su diseño en la horizontalidad, la uniformidad compositiva y una sobria decoración.

Juan Bautista de Toledo

Juan Bautista de Toledo (siglo XVI) fue un arquitecto renacentista español, uno de los más destacados de su tiempo. Su obra maestra fue el Monasterio de El Escorial y la urbanización y protección de su entorno. Mientras iba tomando cuerpo la idea de esta magna obra, trabajó en el Alcázar de Toledo y el Alcázar de Madrid. En 1546 el Papa Pablo III le nombró como arquitecto adjunto coordinador de las obras de la basílica de San Pedro y, en 1559 fue llamado a Madrid por Felipe II en calidad de Arquitecto Real.

El Renacimiento Español: Escultura

Alonso Berruguete

Alonso Berruguete (siglo XV-XVI) utilizó el estilo gótico como una alternativa al modelo clásico y dio mucha importancia al uso de la policromía, que contribuía a disolver las formas y aumentar el efectismo dramático. Además, incorporó recursos manieristas, como la alteración de las proporciones y las composiciones inestables y en espiral. Tuvo gran éxito con sus imágenes religiosas, como los retablos de la iglesia de San Benito o del monasterio de La Mejorada.

El Greco

El Greco (siglo XVI y XVII) fue el representante más importante de la pintura española del siglo XVI. Su obra consiste sobre todo en imágenes religiosas y algunos retratos. Pintó una serie de imágenes de santos a modo de retrato, destinados a la oración, y grandes composiciones. Predominan figuras humanas de canon muy largo y una composición cerrada. Son cuerpos que parecen no tener peso, sin volumen. Empleaba la luz y el color para reforzar el efecto dramático y acentuar la composición. Entre sus obras más conocidas se encuentran Cristo con la cruz a cuestas y El caballero de la mano en el pecho.

Juan de Juni

Juan de Juni (siglo XVI) era de origen francés y en su obra se aprecia la fusión gótica y manierista. Sus figuras son voluminosas y rotundas, con abundantes mantos cuyo movimiento ondulante agita toda la obra. Realizó imágenes religiosas expresivas y dramáticas, llenas de teatralidad. Tenía un gran dominio de los materiales escultóricos, como el barro cocido, la piedra y la madera, y un perfecto conocimiento de la anatomía humana. Entre sus obras más conocidas se encuentran Santo entierro y Cristo resucitado.