El Realismo en España
La novela del siglo XIX buscará reflejar el conjunto de la sociedad contemporánea con mucha precisión. Importa narrar con objetividad, presentando personajes y ambientes, lo que convierte a las obras en fuentes para conocer el pasado histórico. Los cambios sociales y de mentalidad explican el paso del Romanticismo al Realismo: sin la Revolución Industrial, la Revolución burguesa y la expansión del capitalismo no se entiende la aparición del Realismo. El apogeo de la literatura realista coincide con el ascenso de la burguesía al poder. La sociedad burguesa es el punto de partida del escritor realista. También es consecuencia del aumento del gusto por la lectura y del éxito de la prensa periódica.
Antecedentes del Realismo: Costumbrismo y Prerrealismo
El Realismo en España aparece en la segunda mitad del siglo XIX. Contamos con antecedentes de este movimiento en los cuadros de costumbres del Romanticismo y en los folletines y novelas por entregas, especialmente en los del tema social, que describen de forma realista la vida del pueblo llano. Se considera el 1868 como el inicio del Realismo español.
La obra de Fernán Caballero, autora de La Gaviota, y de Pedro Antonio de Alarcón (El sombrero de tres picos), representantes del Prerrealismo, ilustra la transición del Romanticismo al Realismo. El punto de partida de los dos es el Costumbrismo y su afición por la observación de escenas y tipos populares.
Realismo y Naturalismo
El Realismo implica la superación de las limitaciones del Costumbrismo y el folletín en el retrato de la sociedad contemporánea. Su objetivo es presentar el mundo de la burguesía. Los modelos que van a seguir son los propuestos por los grandes novelistas de Rusia, Inglaterra o Francia.
El Realismo se basa en la observación de la realidad. La literatura realista se fijará más en lo social y en lo cotidiano, dando importancia a la verosimilitud. Se usa la novela. Hay diferentes tipos de narradores, aunque predomina el narrador omnisciente. Se caracteriza por su sobriedad y sencillez.
El Naturalismo está inventado por un escritor francés llamado Zola, que pretendía aplicar métodos científicos para la descripción de la realidad. Las novelas eligen a personajes y ambientes sórdidos. Destaca Emiliano Pardo Bazán con Los Pazos de Ulloa.
Los escritores realistas importantes son Juan Valera (Pepita Jiménez) y José María Pereda (Peñas Arriba). Los grandes maestros serán Leopoldo Alas, Clarín, y Benito Pérez Galdós.
Leopoldo Alas, Clarín escribe una obra a medio camino entre el Naturalismo y el Realismo: La Regenta. La novela analiza las complejas relaciones de personajes en la ciudad, el adulterio, la polémica entre una política liberal y el poder de la Iglesia.
Benito Pérez Galdós
Su dedicación al periodismo le dio un gran conocimiento sobre el Madrid de su época, como demostrará en buena parte de sus novelas. También fue autor de teatro. Su obra narrativa se divide en 3:
Episodios Nacionales
Son 46 novelas que, mezclando historia y ficción, narran sucesos históricos del siglo XIX en España. Con los Episodios llegó a crear un nuevo tipo de novela histórica. Ello se debe a su riguroso esfuerzo de documentación y a su propósito de objetividad.
Novelas españolas de la primera época
Tiene dos periodos:
- Periodo histórico: comprende dos novelas históricas: La Fontana de Oro, que marca el inicio del Realismo, y El Audaz, que cuenta la historia de un radical de antaño que evoca el ambiente de la España de principios de siglo.
- Periodo abstracto o novela de tesis: las tres novelas abordan temas de la sociedad contemporánea: Doña Perfecta, Gloria y La familia de León Roch. El propósito es atacar la intransigencia y el fanatismo político y religioso. Estas novelas son novelas de tesis. Distinta a estas es Marianela, novela sentimental de tono lírico que representa la transición a la segunda manera de novelar de Galdós.
Novelas españolas contemporáneas
Representan la fase más importante de su carrera. Ambientadas en la sociedad del momento, son una recreación perfecta del Madrid del siglo XIX. Se diferencian varias etapas:
- Etapa naturalista: La Desheredada y Lo Prohibido. Se cuenta el peso de la herencia y de los condicionamientos del medio social.
- Sigue una fase de transición a la etapa espiritualista. Obras como Fortunata y Jacinta constituyen una buena muestra de naturalismo espiritual. Obras: Miau.
- Etapa espiritualista: ocupan un lugar preferente los problemas espirituales y el análisis psicológico de los protagonistas. Destacan Nazarín, Halma y Misericordia. Los personajes principales renuncian a todo para entregarse al prójimo.
- Periodo simbólico: Últimas novelas de Galdós: El caballero encantado y La razón de la sinrazón.
Técnica y estilo
Galdós es un novelista integral, es un poderoso pintor de ambientes, sus penetrantes dotes de observación le hacen encontrar el detalle significativo. Se añade su documentación sobre escenarios, costumbres, gentes. Es un realista de almas que sabe dotar a sus personajes de veracidad y hondura humana. Su pintura de caracteres se basa en una admirable técnica del retrato. Galdós domina el arte de caracterizar a sus personajes por el arte, poniendo en cada uno rasgos diferenciadores del habla.
El estilo de Galdós es espontáneo, antirretórico, con una prosa ágil y de gran expresividad. Rasgo de modernidad en su monólogo interior. La intención crítica, la ironía y el humor son otros rasgos importantes de su estilo.