Resumen por Tratados de El Lazarillo de Tormes
Tratado Primero: El Ciego
En este primer tratado, Lázaro introduce a su familia. Vive con su madre y su padrastro (que es de color), ya que su padre murió estando al servicio de un amo. De este nuevo matrimonio nace un niño. Más tarde, Lázaro es puesto al servicio de un ciego. Este primer amo es el que más influye en la vida de Lázaro, pues le enseña a ser astuto y le enseña cómo obtener comida. Pero como el ciego era tan avaro que no le daba ni comida, lo abandonó.
Tratado Segundo: El Clérigo
Su segundo amo es un clérigo, pero como Lázaro anuncia, este amo es igual o más avaro que el anterior, y representa la corrupción del clero. Daba a Lázaro comida que había sido roída por ratones, por esta razón Lázaro le engaña robando comida haciéndose pasar por un ratón. Finalmente, abandona a este amo por las mismas causas que al anterior.
Tratado Tercero: El Escudero
Su tercer amo es un escudero, representa a las falsas apariencias. Este amo quería aparentar ser más rico de lo que en realidad era. Este amo depende de Lázaro para sobrevivir, pues el muchacho es quien consigue la comida. De todas las deudas acumuladas, al escudero le han de embargar todo. Es entonces cuando este amo desaparece y abandona a Lázaro.
Tratado Cuarto: El Fraile de la Merced
Su cuarto amo es un Fraile de la Merced. Este amo le da “sus primeros zapatos”, pero es un fraile muy corrupto que está más preocupado por las mujeres que por su trabajo. Y es por esta razón que Lázaro le abandona.
Tratado Quinto: El Buldero
Su quinto amo es un buldero. Representa la falsa religiosidad. Este amo reparte bulas para ganar dinero, y convencía a la gente de que las comprara. Una vez hace un pacto con un alguacil para que este se haga el muerto, y fingir que ha revivido gracias a las bulas. Finalmente, Lázaro se separa de él.
Tratado Sexto: El Pintor y el Capellán
En este tratado tiene dos amos: el primero es un pintor con el que reside muy poco tiempo, y el segundo es un capellán. Le ofrece el primer trabajo con sueldo a Lázaro, y se queda con él cuatro años. Pero una vez que tuvo dinero para comprarse ropa nueva y una espada, deja el oficio y al amo.
Tratado Séptimo: El Alguacil y el Arcipreste de San Salvador
En este tratado también tiene dos amos: un alguacil, del que renuncia en poco tiempo por lo difícil del oficio, y el Arcipreste de San Salvador (su último amo). Este amo lo casa con una criada suya. También representa la corrupción del clero, pues se rumorean supuestas aventuras entre la mujer de Lázaro y el arcipreste. Pero el protagonista hace oídos sordos a todas estas acusaciones.
Tema Principal y Otros Temas
El tema principal, en mi opinión, es el entusiasmo que el personaje protagonista demuestra hacia la vida. Es una persona que, suceda lo que suceda, nunca pierde el rumbo ni se deja vencer por ninguno de los obstáculos que encuentra a su paso. También hay otros temas de carácter político, social y moral muy necesarios de tratar en la época, como las clases sociales, el sistema de gobierno, etc.
Argumento y Estructura
Es la autobiografía de un pícaro que sirve a diversos amos aprovechándose invariablemente de ellos. Cuando no era más que un niño, comenzó a trabajar de vasallo de un ciego cascarrabias; más tarde, su amo fue un escudero arruinado, luego un clérigo de mal corazón, también con un fraile de la Merced, un buldero, un capellán y, por último, se asentó con un alguacil. Con cada uno de estos amos, Lázaro se las ingenia para poder sobrevivir a su costa, haciendo todo lo posible por no ser “pillado con las manos en la masa”. En toda la obra se ven claramente sus ganas de vivir.
El Renacimiento
Las relaciones políticas, guerreras, religiosas y literarias entre Italia y España desde la mitad del siglo XV hicieron que existiera un amplio intercambio cultural entre estos dos países. El papado de dos ilustres valencianos, Calixto III y Alejandro VI, sirvió para estrechar las relaciones culturales entre Castilla, el Reino de Aragón, Cataluña y Roma. En Italia se editaban o traducían las obras literarias españolas de mayor relieve, como el Amadís de Gaula, La Celestina, Cárcel de Amor o las composiciones poéticas de Jorge Manrique e Íñigo López de Mendoza, Marqués de Santillana, así como las compilaciones de producciones populares como los villancicos y los romances. Otro tanto sucedía en España con obras italianas, como la Jerusalén liberada, de Torcuato Tasso. Estas relaciones hispano-italianas fueron muy importantes, ya que llevaron a la Península las inquietudes y gustos que propiciaron el Renacimiento español.
La Literatura Popular Española
La literatura popular española es la que sacrifica los fines estrictamente estéticos y literarios al gusto de la mayoría, buscando la comercialidad y los éxitos de ventas. Como tal es, pues, un fenómeno estrictamente ligado a la cultura de masas y por ello se desarrolló fundamentalmente a partir del siglo XIX, a través de la literatura de folletín o novela por entregas que practicaron en España desde escritores de primera fila como Benito Pérez Galdós a otros de menor importancia como Manuel Fernández y González, Enrique Pérez Escrich, Ramón Ortega y Frías, Torcuato Tárrago y Mateos o Wenceslao Ayguals de Izco, por no mencionar los que practicaban abiertamente la infraliteratura, como José Muñoz Maldonado, Julián Castellanos, Florencio Luis Parreño, Luis de Val, Diego de San José o Antonio de San Martín, entre otros muchos cuyo nombre es legión.
En el siglo XX la literatura popular se difundió más bien a través de colecciones de novelas cortas en rústica, de formato octavilla, en no más de cien páginas de papel malo (pulp), a bajo precio (se solían nombrar “novelas de a duro”). Hubo auténticas editoriales especializadas en este tipo de literatura barata y de fácil consumo, sobre todo barcelonesas, como la Editorial Bruguera, Ediciones Toray o Editorial Molino.
Los autores españoles más famosos del género en el siglo XX fueron en especial Corín Tellado, que escribió unas cuatro mil novelas sentimentales o románticas para el público femenino, llamadas generalmente novela rosa; Marcial Lafuente Estefanía, especializado en novelas del oeste o westerns; José Mallorquí, que creó el personaje de El Coyote y, como un nuevo Emilio Salgari, terminó suicidándose; Luis García Lecha, todoterreno que escribió unas dos mil novelas de aventuras, de ciencia-ficción, policiacas y de terror; Juan Gallardo Muñoz, Francisco González Ledesma o Pascual Enguídanos, creador de la famosa Saga de los Aznar, una serie de novelas de ciencia-ficción considerada clásica por los especialistas del género.