El Imperio Zarista
El imperio ruso era una autocracia. El zar gobernaba directamente, sin estar sujeto a ninguna constitución ni parlamento. Su economía era fundamentalmente agraria, con propiedad comunal y privada (kulaks). Las condiciones de vida de los campesinos eran precarias, con una agricultura atrasada y baja producción. A finales del siglo XIX, el capitalismo penetró en la parte occidental, con una industria concentrada que propició la aparición de obreros industriales.
Crecimiento de la oposición
La industrialización difundió ideas liberales y doctrinas obreristas (anarquismo y marxismo). El anarquismo tuvo notable arraigo. Surgieron partidos liberales (Partido Democrático Constitucional) y el Partido Social-Revolucionario, con Lenin como líder destacado, dividido en dos alas: bolchevique y menchevique.
La Revolución de Febrero de 1917
La Primera Guerra Mundial transformó la industria rusa en industria de guerra. El reclutamiento campesino disminuyó la producción agraria, extendiendo la escasez y el hambre. Las derrotas militares ante Alemania, con un ejército mal equipado, causaron gran mortalidad. La confianza en el zar se hundió.
La caída del Zarismo
En febrero de 1917, el pueblo pidió el fin de la guerra y la mejora de las condiciones de vida. El 27 de febrero, una huelga general y el amotinamiento de la guarnición militar llevaron a la formación de soviets. El zar se negó a negociar y abdicó, imponiendo un gobierno provisional que prometió reformas políticas.
De Marzo a Octubre de 1917
Lenin defendió la superación de la fase liberal-burguesa de la revolución. En sus Tesis de Abril, llamó a la disolución del gobierno provisional y la toma del poder por la vía insurreccional. Lvov fue sustituido por el socialista Alexander Kerenski, quien no permitió la Asamblea Constituyente. Las dificultades de Kerenski aumentaron tras un golpe de estado. Los bolcheviques, liderados por Lenin y Trotsky, tomaron la iniciativa para la insurrección armada.
Octubre de 1917
Tras una insurrección fallida, Lenin se exilió. El 25 de octubre, con el apoyo de la Guardia Roja, los bolcheviques tomaron lugares clave de la capital, asaltando el Palacio de Invierno.
Comunismo de Guerra
El zar Nicolás II y su familia fueron ejecutados. El Ejército Rojo creció en éxitos. La guerra civil orientó la economía al avituallamiento del ejército, con la supresión de la propiedad privada y la estatalización de la industria.
El Poder Bolchevique y la URSS
El partido bolchevique se renombró como Partido Comunista de la Unión Soviética, centralizando el poder en el Politburó. El órgano supremo era el Congreso de los Soviets, y el ejército quedó bajo el Presidium, dirigido por un presidente. En 1922, se creó la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).
La NEP
La Nueva Política Económica (NEP) era una economía mixta, combinando elementos socializados con la economía de mercado, permitiendo la pequeña propiedad y los intercambios privados. La NEP logró objetivos económicos, pero la subida de precios y la diferencia entre precios agrarios e industriales causaron problemas de acaparamiento y desabastecimiento.
El Stalinismo
El estalinismo impuso la ideología comunista. El partido se volvió monolítico, sin debate. Stalin ejerció una dictadura personal, encarcelando a la oposición. Creó la nomenklatura, una nueva clase social privilegiada. El realismo socialista se convirtió en el arte oficial.
El Terror
En la década de 1930, se inició una represión (las Grandes Purgas). Los Procesos de Moscú (1936-1938) costaron la vida a miles de personas. Stalin condenó o envió a campos de trabajo forzados (gulag) a miles de ciudadanos.
Efectos de la Primera Guerra Mundial
Debilitamiento de Europa
La guerra debilitó a los contendientes europeos, afectando a la población, la producción y la infraestructura. Las monedas sufrieron deflación, y los aliados se endeudaron con EE. UU.
Tratados de Paz
El Tratado de Versalles generó desacuerdos, desestabilizó el sistema monetario y redujo la confianza de los inversores. Las reparaciones de guerra condicionaron la recuperación económica y el pago de deudas. EE. UU. se opuso a las reparaciones, argumentando la incapacidad económica de Alemania. La inflación en Alemania estimuló el nacionalismo radical y el ascenso del nazismo.
Desequilibrios Comerciales
Alemania, Austria, Hungría, Turquía y Rusia perdieron territorios. El desequilibrio comercial entre países industrializados y el descenso de los precios agrarios obligaron a nuevos créditos de EE. UU.
Auge de la Economía Estadounidense
La guerra consolidó la supremacía de EE. UU. El dólar se impuso como moneda de cambio. La banca estadounidense se afirmó, y EE. UU. se convirtió en la única plaza financiera para préstamos a largo plazo. El desequilibrio comercial y la competitividad estadounidense influyeron.
Los Felices Años 20
El consumo masivo, la provisión de mercancías y capital aceleraron el crecimiento industrial en EE. UU. El aumento de exportaciones permitió la penetración en mercados europeos. La innovación técnica, los cambios en la organización del trabajo, el uso de la electricidad y el petróleo impulsaron el crecimiento económico. Se consolidaron nuevos sectores industriales (teléfono, automóvil, electrodomésticos). La construcción de rascacielos y la concentración empresarial aumentaron la productividad y redujeron costes, con efectos positivos en el empleo.
Revolución de los Consumidores
Las cadenas de grandes almacenes y la compra a plazos aumentaron el consumo. La publicidad y el marketing tuvieron un papel relevante. El aumento del consumo llevó a la sociedad de consumo, pero también al endeudamiento familiar.
Distribución de la Renta
La capacidad adquisitiva de los trabajadores y la sobreproducción se convirtieron en problemas. La agricultura, endeudada durante la guerra, fue el sector más perjudicado. Los precios industriales se mantuvieron altos.
Fiebre Bursátil
El aumento de las inversiones bursátiles, resultado de la buena situación de las empresas, dio paso a una burbuja especulativa. La diferencia entre precio de compra y venta generó plusvalía. Los pequeños inversores pidieron préstamos para comprar acciones. El descenso del valor de las acciones inició los problemas.
La Gran Depresión
Causas: 1. Sobreproducción industrial. 2. Crisis de liquidez. 3. Caída del consumo. Otros factores: caída de precios agrarios y endeudamiento por bienes de consumo.
Crisis Bancaria e Industrial
La sobreproducción, la falta de dinero y la caída del consumo convirtieron la crisis bursátil en una crisis general. El sistema bancario fue afectado por la imposibilidad de los deudores de devolver préstamos. El miedo a la quiebra provocó la retirada de dinero de los bancos, lo que desató la crisis bancaria. La ruina de inversores y la disminución del crédito provocaron el descenso del consumo y la crisis industrial, aumentando el desempleo y la pobreza.
El New Deal
El New Deal fue un plan económico para superar la crisis. Incrementó el gasto público, creó la National Recovery Administration (NRA) y la Public Works Administration (PWA), estableció un salario mínimo y máximo de horas de trabajo, impulsó la afiliación sindical y creó la seguridad social. La desconfianza empresarial redujo las inversiones privadas, pero el New Deal contribuyó a la estabilización.
Soluciones en Otros Países
Alemania: El estado totalitario impulsó la inversión y el rearme, buscando la autarquía. La producción industrial creció y el paro descendió, pero esta política condujo a la Segunda Guerra Mundial.
Reino Unido y Francia: Revalorizaron su moneda para activar el comercio internacional. La Conferencia de Londres de 1933 abordó los tipos de cambio. Reino Unido devaluó la libra. En Francia, el Frente Popular (1936) impulsó planes sociales, redujo la jornada laboral y aumentó salarios.