El modelo político de los Austrias
Los Austrias dispusieron de crecientes ingresos que, aun así, no cubrieron sus enormes gastos, en particular los militares. Los ingresos procedían de los impuestos que pagaba Castilla (especialmente la alcabala). En 1590 se instituyó un nuevo impuesto indirecto de carácter general (llamado de millones), que se aplicó sobre los alimentos esenciales y afectó a las clases populares castellanas. Estos impuestos, con ciertos retoques, llegaron hasta el siglo XIX. Otros ingresos procedían de las Indias y permitían hacer pagos urgentes. Se difundió, además, el método de venta de cargos públicos, que llegaron a crearse con la intención de venderlos. La diferencia entre gastos e ingresos endeudó a la Corona y la llevó a la quiebra en varias ocasiones, por lo que los monarcas recurrieron a los créditos y los préstamos otorgados sobre todo por los banqueros de Amberes. Los intereses crecían, ya que el importe prestado no solía devolverse; la monarquía se declaró en bancarrota y en suspensión de pagos en diversos momentos.
La conquista de América
El proceso de conquista de América (siglos XVI-XVIII) por los españoles se desarrolló en tres etapas:
- Las conquistas antillanas (1502-1519): Comenzaron con el sometimiento de La Española y continuaron por Cuba y el resto de las Antillas. Más tarde, los españoles decidieron adentrarse en el continente para buscar recursos y esclavos que suplieran a los indios fallecidos. En esta etapa se fundó la ciudad de Panamá (1519).
- Las conquistas continentales (1519-1549): Destacaron la conquista del Imperio azteca de México (1519-1521), por el extremeño Hernán Cortés, y la del Imperio incaico del Perú (1531-1535), por Francisco Pizarro.
- Las conquistas interiores (1550-siglo XVIII): En este periodo se completó la conquista de América: Nuevo México, Florida, Texas, California, la cuenca del río Orinoco y el interior de Argentina. Desde México se exploró el Pacífico y las islas Filipinas fueron conquistadas (entre 1565 y 1571) por Miguel López de Legazpi, que fundó Manila.
Los intercambios
El impacto de América en España: Tras la conquista de los nuevos territorios, se inició el comercio con América, desde donde llegaban a España metales preciosos y productos agrícolas. Las abundantes cantidades de oro y plata no solo permitieron sostener los gastos de la Corona española, sino que revolucionaron los precios, perjudicando a la economía peninsular. También llegaron cultivos desconocidos como la patata, el tabaco, el tomate o el maíz. América, a su vez, importó cultivos europeos, ganado y manufacturas industriales, así como esclavos africanos. El comercio estuvo controlado en régimen de monopolio por la Corona y por Castilla a través de la Casa de Contratación de Sevilla, dirigida básicamente por genoveses. También llegaron a América emigrantes, en su mayoría andaluces.
Gobierno y administración
Pese al comercio y los metales, la mayor riqueza de las Indias la constituían los nativos. Para controlarlos se organizó, en un principio, la administración americana. La mano de obra se asignó de forma espontánea. A partir de las Leyes de Burgos se estableció el sistema de encomiendas. A la encomienda siguió el reclutamiento forzado de mano de obra. La explotación de los indígenas llegó a tal punto que, desde ciertos sectores de la Iglesia, se alzaron voces de protesta, entre las que destaca Bartolomé de las Casas. Se aprobaron las Leyes Nuevas, que suprimían las encomiendas.
Las instituciones de la América española
La monarquía organizó la administración de América inspirándose en las leyes e instituciones castellanas. Las instituciones más importantes fueron los virreinatos, que eran dos:
- Nueva España: Abarcaba los territorios al norte de Panamá.
- Perú: Comprendía todos los localizados al sur.
El Renacimiento en España
Esta etapa de la historia del arte y la cultura se desarrolló entre los siglos XV y XVII. La difusión de las corrientes renacentistas se vio favorecida en España por sus relaciones con Italia, pionera en el Renacimiento, y con los Países Bajos. Por ello abundaron los artistas europeos. En nuestro país, el mecenazgo de la burguesía y de la nobleza fue menor que el ejercido por la Iglesia y la Corona. Por otra parte, la Contrarreforma, la censura y la persecución provocaron el retraso y el aislamiento de la ciencia y el pensamiento españoles. La arquitectura fue evolucionando: primero se impuso el gótico, como en las universidades de Salamanca y Alcalá; posteriormente se cultivó otro estilo, el clasicismo; y finalmente floreció un estilo acorde con el espíritu contrarreformista. Por lo que respecta a la escultura, el centro principal fue Valladolid, donde destacaron Alonso Berruguete y el francés Juan de Juni. En la pintura sobresale la figura de Doménikos Theotokópoulos, el Greco, que residió en Toledo gran parte de su vida.