El Arte Italiano del Renacimiento: Pintura, Arquitectura y Escultura

Pintura

Fra Angelico: Representa la continuidad con el sentido religioso medieval, aunque sus obras se revisten del nuevo espíritu renacentista con un uso de la perspectiva y elementos decorativos. Pinta utilizando colores vivos. La Anunciación. Pinta al temple: suavidad de colores. Idea de belleza suave y delicada, expresa intimidad y la perspectiva.

Masaccio: Introdujo nuevos ideales del arte. Sus figuras manifiestan dominio de sí mismas y transmite el ideal del equilibrio renacentista. El pintor se sitúa frente a la realidad tridimensional con volumen, alejándose del planismo y superficies doradas. Da luz y color. Obra: El tributo de la moneda: contraste vivo de expresiones, se manifiesta un gran equilibrio entre figura humana y espacio. Importancia de la psicología. Obra: Trinidad: al fresco es la primera que se le aplica la perspectiva geométrica. Las figuras se recortan sobre una bóveda casetonada que crea en el espectador el efecto óptico de la profundidad y llama la atención; las figuras de los extremos son donantes.

Piero della Francesca: Obra: Historia de la Vera Cruz, en su pintura existe doble preocupación por la luz y por las representaciones arquitectónicas. Obra: Virgen de Urbino: el volumen se ha creado a partir de la luz y el color, cobrando las figuras una consistencia casi escultórica y, por otra parte, el entramado de fondo construido con el rigor de la perspectiva que configura un espacio en el que el donante aparece exaltado.

Boticelli: Es el más perfecto, sus obras tienen elegancia y sensibilidad, su dibujo consta de líneas suaves y ondulantes y colores destacados por su suavidad, sus obras expresan amor de la vida, amor propio y naturaleza. La pintura es mitológica, sus dos obras son: Nacimiento de Venus que es una exaltación a la belleza femenina pagana, se resalta una belleza espiritual; la desnudez de la diosa es la imagen en su pureza, la naturaleza se manifiesta a través de sus elementos. La Primavera se sitúa en el centro del jardín; a la derecha las tres Gracias bailan y Cupido se dispone a lanzar su flecha y Mercurio aparta unas nubes que pueden amenazar el soleado día. A su izquierda Céfiro, el viento de marzo, que pretende alcanzar a la ninfa Cloris que grita; de su boca surgen flores. A su lado aparece la imagen transformada en primavera: Cloris es flor. La Piedad con dramático expresionismo.

La arquitectura: Bramante, Miguel Ángel, Palladio

Miguel Ángel, utilizará en sus obras las típicas soluciones a las que había llegado la arquitectura del Quattrocento: monumentalidad, grandiosidad, fuerza y ritmo entre lo decorativo y lo constructivo. Trabajará en dos ciudades: Florencia y Roma. En Florencia encontramos varios edificios como la capilla funeraria de los Médici, Biblioteca Laurenciana; ya en Roma realizó la cúpula del Vaticano. Miguel es el continuador del proyecto de Bramante, aquí la simplifica eliminando las torres y manteniendo las cuatro cúpulas menores junto a la central, solo llegarán a realizarse las dos delanteras, el efecto visual es imponente; la cúpula se levanta sobre un enorme tambor circular decorado con columnas, ventanas y guirnaldas; sobre las ventanas aparece alternancia de frontones rectos y curvos.

Palladio: Construyó numerosos palacios y villas entre los que destaca la villa Capra (la Rotonda) consistente en un cuadro cubierto con cúpula ofreciendo pórticos a los cuatro frentes, se realizan imitando a los templos romanos; tiene una admiración por la cultura clásica. Vicenza construye una basílica en la que idea una fachada de dos plantas: orden dórico y alto jónico; lo más característico es la alternancia arco/dintel.

La Escultura

Se da en el siglo XV (Quattrocento) el escultor más importante de este siglo es Miguel Ángel. En su obra podemos apreciar varios periodos:

Periodo Juvenil

Siguiendo unas líneas marcadas por Donatello, de esta época destaca la Madonna de la escalera, en Roma realiza la Piedad Vaticana en la que destaca su monumentalidad y el refinado acabado. Sorprende la juventud de la Virgen y la ausencia de dolor en su expresión.

Periodo de Madurez

Ocurre con su marcha a Roma. David: es un tema típico del Quattrocento pero que Miguel va a interpretar de forma distinta, nunca se ha representado mejor el equilibrio de fuerza en tensión; esto se advierte muy bien en el modelado del brazo derecho, la mano comienza a cerrarse, la estatua está hecha en un solo bloque de mármol de Carrara. Sepulcro de los Médici, en él quiso hacer un homenaje a sus protectores. Las figuras sepulcrales aparecen sentadas, les acompaña cuatro estatuas alegóricas: la Aurora está representada como una mujer despertándose, el Día es un joven lleno de vigor, el viejo decrépito es el símbolo decadente de la Tarde y otra mujer representa la Noche. La Tumba de Julio fue el gran proyecto que no pudo acabarlo, en el Moisés Miguel opta por una composición reposada, los músculos se hinchan y las barbas se encrespan, el furor de sus ojos, el vigor de la musculatura y el patetismo de su rostro nos indica la influencia del Laocoonte.

Periodo Final

:muestra en sus obras desilucion tristeza.destacan especialmente sus piedades no acabadas.Son figuras dnd la carne desaparece y destaca lo etero y angustioso.
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