Dualismo Antropológico y la Existencia de Dios: Comparativa entre Descartes y Santo Tomás de Aquino

El Dualismo Cartesiano y la Glándula Pineal

René Descartes propone una composición entre una sustancia pensante y una sustancia extensa, aunque estas son completamente distintas e independientes. Este dualismo antropológico planteó el problema de la comunicación entre sustancias: ¿cómo se relacionan entre sí el cuerpo y el alma? Según Descartes, existe la glándula pineal que une ambas sustancias. Sin embargo, el alma es inmortal, ya que es independiente del cuerpo y no necesita de él para existir.

Contexto Histórico y Filosófico del Siglo XVII

Con la muerte del rey francés Enrique IV, se acaba la monarquía autoritaria y se inicia la monarquía absoluta con su hijo Luis XIII, quien no gobernará hasta los dieciséis años, asumiendo, por el momento, la regencia su madre, María de Médicis. Durante el reinado de Luis XIII, tuvo lugar la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), que terminó siendo una lucha por la hegemonía en Europa y que acabó con la Paz de Westfalia, donde los Habsburgo perdieron su hegemonía, España entró en decadencia y Francia se convirtió en la primera potencia de Europa. A Luis XIII le sucede su hijo Luis XIV, convirtiéndose Francia en un Estado absolutista. Por otra parte, la crisis económica provoca una inmensa pobreza en la mayoría de la población, dando lugar a epidemias en Europa.

En este momento, la sociedad adquiere una estructura más compleja, donde los campesinos marchan a las ciudades para trabajar en la manufactura, la burguesía va progresando a la vez que lo hace el capitalismo, y los nobles ocupaban cargos políticos. Esta situación de crisis económica, social y política se verá reflejada en el Barroco, que surgió en Italia (s. XVI), y que es un arte empleado por la Iglesia católica surgida del Concilio de Trento.

En relación con el ámbito filosófico, su evolución está ligada a la gran revolución científica que comienza con Nicolás Copérnico al proponer la teoría heliocéntrica en el siglo XVI. Galileo crea el método científico moderno al considerar que las matemáticas son la base del estudio de la Naturaleza. Al mismo tiempo, Descartes fue el inventor de la geometría analítica y Francis Bacon impulsó el estudio de la ciencia natural, excluyendo prejuicios, tradiciones y la imaginación religiosa. Paralela al racionalismo, surge en Inglaterra el empirismo, defendido por Locke, Berkeley y David Hume. Esta corriente filosófica considera que nuestro conocimiento proviene de la experiencia, negando cualquier principio innato.

Las *Meditaciones Metafísicas* de Descartes

En las *Meditaciones Metafísicas*, Descartes aplica el método matemático para construir una nueva filosofía, partiendo de un primer principio cierto y seguro. En la primera y segunda meditación, aplica la duda metódica para descubrir un punto de partida incuestionable: *cogito ergo sum*, pienso luego existo. A partir de este momento, debe demostrar la existencia de Dios (sustancia infinita) y la existencia del mundo (sustancia extensa). De la sola idea de infinito, Descartes, en la tercera meditación, demuestra la existencia de Dios empleando dos argumentos: el Principio de Causalidad y el argumento ontológico de San Anselmo.

La Existencia de Dios según Santo Tomás de Aquino

Tomás de Aquino, teólogo cristiano del siglo XIII, es el filósofo a comparar con René Descartes. Santo Tomás planteará las siguientes cuestiones: ¿es necesario demostrar la existencia de Dios? ¿Cómo es posible hacerlo? Tomás afirma que mediante la razón es posible demostrar dicha existencia, por lo que plantea cinco vías que siguen la siguiente estructura: partimos de la experiencia aplicándole el principio de causalidad (todo efecto tiene una causa y esta debe tener tanta realidad o más que el efecto para producirlo). A partir de este principio, afirma que una serie causal no puede ser infinita, por lo que existe la necesidad de la existencia de un ser supremo.

Estas cinco vías quedan así resumidas:

  • La primera parte de la observación del movimiento (remontándose a Aristóteles).
  • La segunda parte de la existencia de causas, afirmando la existencia de una Causa Incausada.
  • La tercera parte de que hay seres contingentes para llegar a la existencia de un ser Necesario como causa de aquellos.
  • La cuarta parte de la existencia de diferentes grados de perfección en las cosas, cuya causa última es la existencia de un ser perfectísimo.
  • La quinta vía parte de la existencia de orden en el mundo, por lo que debe existir una Inteligencia Ordenadora, Dios, que dirija el comportamiento de aquellos seres con conducta final.

Según Santo Tomás, conocemos los atributos divinos mediante tres vías:

  • Afirmación: afirmaremos de Dios aquellas propiedades puras que no traen consigo imperfección alguna.
  • Negación: obtenemos un concepto negativo de Dios, negando de Dios las propiedades imperfectas de las criaturas.
  • Eminencia: diremos que Dios posee de forma infinita las perfecciones que encontramos en las criaturas.

Aquino se decantará por la analogía, ya que el hombre es análogo a Dios, es decir, semejante pero en distinta proporción.