El Panteón de Agripa: Un Templo de Historia y Arquitectura Romana
El Panteón de Agripa recibe el nombre del primitivo templo construido por mandato del general Marco Agripa (amigo del emperador Augusto) en el primer tercio del siglo I. Un incendio lo arrasó, solo quedó la inscripción que aparece en el arquitrabe. El actual se construyó en época de Adriano en el siglo II.
Materiales y Construcción
Para construir el templo utilizaron materiales diversos: opus caementecium en los gruesos muros; ladrillo y piedra volcánica en la cúpula para aligerar el peso; y mármol y granito en las columnas. El interior está decorado con mármoles de diferentes tonalidades.
Estructura y Diseño
La planta consta de dos partes: el pórtico de planta rectangular que recuerda a los templos griegos y la cella de planta circular rematada por una impresionante cúpula sobre tambor. La intersección entre ambas zonas se realiza a través de los propileos que mueren en el arranque del tambor.
El Pórtico
El pórtico de clara influencia griega es períptero, octástilo y arquitrabado. Tiene tres calles, la central más ancha. Sobre las monumentales columnas de 18 m de altura y de capitel corintio, reposa el entablamento con la inscripción de Agripa y sobre él, un frontón actualmente sin decoración.
La Cella
Una vez cruzado el pórtico y a través de unas puertas de bronce se accede a la cella. Aquí se demuestra que los romanos fueron auténticos arquitectos, creando espacios internos. La sala es una esfera perfecta de 43,30 metros de base por 43,30 metros de altura. Es un círculo dentro de un cuadrado. La cella transmite grandiosidad, armonía y nitidez. Los romanos supieron construir atendiendo a unos principios de simetría y a una concepción axial del espacio tanto en vertical como en horizontal. Si trazáramos un eje, el templo quedaría dividido en dos partes simétricas desde el óculo al centro del suelo y desde el ábside a la puerta.
Elementos Sustentantes y la Cúpula
Los elementos sustentantes son, en el exterior, un muro grueso de 7m que esconde en su interior pilares que sujetan y distribuyen el peso de la cúpula. En el interior utilizan columnas, pilares e intercalando hornacinas y frontones.
La gran aportación está en la cubierta, una enorme cúpula remata el templo. Esta cubierta semiesférica, construida con piedra volcánica y ladrillo para aligerar el peso, se sustenta en un enorme tambor que va trasladando el peso a semiesferas, columnas, pilares y al gran muro exterior. La cúpula se remata en la parte central con un óculo por donde entra la luz cenital, toda ella está decorada con casetones. Esta solución da una sensación de amplitud, protección y de espacio diáfano.
El ritmo compositivo interior lo marca la alternancia de elementos arquitrabados como frontones con hornacinas de arco de medio punto. Destaca en frente de la puerta principal un gran ábside rematado con una cúpula de cuarto de esfera que influirá en las cabeceras de las iglesias cristianas. El ritmo decorativo interior está remarcado con la alternancia de columnas corintias, frontones arquitrabados y abovedados, todos ellos recubiertos de ricos mármoles. Los nichos contenían estatuas de los dioses romanos.
Comentario Final
El Panteón de Agripa es quizá la obra cumbre de la arquitectura romana. Es el edificio mejor conservado. Los romanos demuestran que son auténticos arquitectos, crean y acotan el espacio interior.
Los griegos, en cambio, dan prioridad al exterior, los templos los construyen como esculturas para ser contempladas desde fuera.
Este templo tiene una enorme simbología, fue construido en el momento de mayor esplendor del Imperio Romano, dedicado a todos los dioses, la cúpula simboliza el cielo y el resto del templo al poder terrenal centrado en Roma, las perfectas esferas representan la unión del cielo y el centro del Imperio. La Unión de cielo y tierra.
El Panteón es uno de los mejores ejemplos del concepto que tenían los romanos de la arquitectura y del arte, se trata de una arquitectura ecléctica donde funden lo griego y lo romano, son construcciones pragmáticas, útiles, al servicio del poder, dejan constancia de la grandeza de Roma. También nos permite conocer la religión politeísta.
Su gran aportación es saber fundir en un mismo espacio elementos arquitrabados y esféricos. Crean un espacio interno diáfano, nítido, simétrico y con una luz envolvente donde tradición y audacia se unen.
El Panteón de Agripa, las soluciones técnicas y sobre todo la cúpula influirán en las obras arquitectónicas de movimientos artísticos posteriores del Renacimiento, Barroco o Neoclasicismo. La cúpula del Duomo de Florencia de Brunelleschi o la de San Pedro del Vaticano de Miguel Ángel tuvieron muy presente esta obra que acabamos de comentar. Una obra única, increíble con soluciones arquitectónicas desconocidas hasta ahora.