Resumen del Pensamiento de Descartes
Tras la muerte de Tomás de Aquino en el siglo XIV, se inicia una gran crisis y se empieza a dudar de todos los conocimientos. Se empieza a dar mayor importancia a la intuición y a la experiencia como vías de conocimiento hasta quebrar el paradigma medieval y dar paso a la Modernidad. Los temas centrales de la filosofía serán la **epistemología** y la **teoría política**, y en consecuencia surge el **racionalismo** y el **empirismo**. Descartes iniciará la corriente filosófica racionalista que se centrará en la búsqueda de la certeza y la seguridad en el conocimiento a partir de una confianza absoluta en la razón humana como fuente exclusiva de conocimiento, despreciando la información aportada por los sentidos. Los racionalistas creen en la racionalidad del mundo, en el poder ilimitado de la razón, en las matemáticas como modelo de ciencia, y por eso, emplean el método deductivo que se conoce a partir de las ideas innatas. El racionalismo tendrá una visión mecanicista del mundo. Descartes supondrá también la culminación de la tradición racionalista occidental iniciada con Parménides y apoyada por Platón. La principal preocupación de Descartes es encontrar un método universal válido que unifique todos los saberes sobre una base sólida e indudable. Para él, los errores teóricos se producen por no disponer de un método adecuado para acceder a la verdad. El método ha de determinar qué es objeto de la ciencia y cómo llega a serlo. Si la razón es una, el método será uno, válido para todos los hombres y para todas las ciencias. Para encontrar este método analiza la razón misma que consiste en dos operaciones básicas: **Intuición** y **Deducción**. La intuición, que consiste en captar inmediatamente y sin esfuerzo ideas claras y distintas de modo que sean indubitables. Claras porque se deben distinguir de otras y distintas porque debo conocer sus partes y estas deben estar separadas unas de otras. En esto se va a basar el criterio de certeza para saber si una idea es verdadera. La deducción, es el acto de la razón por el que somos capaces de extraer verdades a partir de aquellas otras obtenidas por intuición. Las ideas compuestas son conocidas por la deducción. Descartes define el método como el conjunto de reglas ciertas y fáciles que sirven para descubrir la verdad y dirigir bien la razón.
Estas reglas son:
- La regla de la evidencia, que consiste en no aceptar nada que no conozca de manera clara y distinta.
- La regla del análisis, que descompone el problema en las partes que lo componen para intuir cada parte.
- La regla de la síntesis, que se basa en recomponer las ideas de manera ordenada, mediante la deducción.
- La regla de la enumeración es revisar todo el proceso para asegurarse de que lo hemos hecho bien y para lograr una intuición del conjunto.
Aplicando las dos primeras reglas del método, mediante la **duda metódica** (justificación del método) Descartes se propone analizar todos nuestros conocimientos considerándolos temporalmente falsos. Así, intentará alcanzar la intuición de una primera verdad simple, indubitable, que pueda ser el punto de partida para la deducción de todos nuestros conocimientos. La duda es universal porque duda de todos los conocimientos, metódica porque es provisional y de finalidad constructiva, teórica porque sólo duda de los conocimientos y no de las creencias. Este proceso tiene tres niveles: primero duda de los sentidos, puesto que son engañosos y duda de la base del conocimiento; luego duda del mundo ya que no puede distinguir entre vigilia y sueño y por último, duda de los razonamientos ya que nos podemos equivocar. Al dudar de todo, se da cuenta de que lo único de lo que tiene la certeza, es de su existencia, deduciendo así que si piensa, existe (**cogito ergo sum**). Esta se convierte en la primera deducción y en base a ella deduce el criterio de certeza, que afirma que una idea es verdadera si es clara y distinta y a partir de la cual va a deducir todas las demás. Y que es un ser que piensa, una sustancia pensante. Las ideas son todas iguales en cuanto que son actos de la mente, pero se diferencian en cuanto a su origen. Pueden ser facticias porque son producto de la imaginación, adventicias porque me hablan del mundo o innatas porque parecen nacer conmigo. De las ideas innatas Descartes descubre la idea de infinito que asocia a Dios. Esta idea lo ayudará a volver al mundo y salir de su solipsismo. Descartes prueba la existencia de Dios apoyándose en el argumento ontológico de San Anselmo y el argumento de la causalidad de las ideas. Dios garantiza del mundo las cualidades primarias (extensión, figura y movimiento), cualidades objetivas y matematizables de las que podemos tener un conocimiento claro y distinto. Descartes negará la existencia de cualidades secundarias como color, olor o sonido, que son subjetivas. Dios crea dos sustancias, la sustancia extensa (res extensa) y la sustancia pensante o alma (res cogitans). No se necesitan mutuamente para ser y su unión es accidental, como decía Platón. Alma y cuerpo se conectan a través de la glándula pineal. Tendrá que reconocer al final que sobre esta cuestión no hay una idea clara y distinta. Como “res extensa” el hombre queda reducido a un puro mecanismo. Como res cogitans el alma queda al margen de las leyes físicas, constituyendo la verdadera esencia del hombre, que se fundamenta en la razón y libertad absoluta.
Relación con el Empirismo
En la Modernidad, la filosofía se desarrolló en torno a Inglaterra y Francia; la epistemología y la teoría política son las dos grandes cuestiones de este período. En el terreno epistemológico las preguntas de la modernidad se dirigen al sujeto y a su capacidad de conocer la realidad, lo que lleva al cuestionamiento del origen, fuentes y límites del conocimiento. Como respuesta a estas cuestiones se originó el debate epistemológico entre **empirismo** (Islas Británicas) y **racionalismo** (Europa continental). El iniciador de la corriente racionalista y uno de sus principales representantes fue René Descartes (siglo XVII), junto a Spinoza y Malebranche. Para ellos, el origen de todo conocimiento se debe a la razón y a las ideas innatas que esta contiene. Sin embargo, para los empiristas, el origen del conocimiento está en la experiencia. Entre los empiristas más destacados cabe mencionar a David Hume (ilustrado del siglo XVIII) quien, asumiendo en profundidad el principio de que todo conocimiento tiene su origen únicamente en la experiencia, condujo el pensamiento hasta sus últimas consecuencias. Para Descartes el modelo de las ciencias eran las matemáticas (en concreto, la Geometría de Euclides) mientras que para Hume lo son las ciencias naturales (en particular, la Física de Newton) y la ética. Descartes propone como método científico el analítico-sintético el cual supone que el origen del conocimiento está en la mente y en sus operaciones. Sin embargo, Hume entiende que la inducción es el método a seguir, pues todo conocimiento verdadero debe partir de la experiencia y estar en correlación con ella (principio de correspondencia). Según Descartes el conocimiento necesario y universalmente válido es innato, aparece en nuestra mente por Dios y, aparte de las ideas de las matemáticas, este conocimiento es el de las sustancias: Yo, Dios, Mundo. En cambio, Hume cree que las Relaciones de Ideas (las matemáticas) constituyen un conocimiento verdadero, pero que, sin embargo, la noción de sustancia sólo se impone por hábito. Las sustancias no existen pues no se corresponden con ninguna impresión. Descartes denomina criterio de verdad a la “claridad y distinción”. Por el contrario, para Hume una idea es verdadera cuando se corresponde con una impresión o conjunto de impresiones. A pesar de sus diferencias, Racionalismo y Empirismo, buscarán la certeza del conocimiento, y lo harán basándose en el método hipotético-deductivo de Galileo. Los racionalistas se inspirarán en el carácter matemático de este método ya que los principios matemáticos son a priori (innatos), mientras que los empiristas apostarán por su aspecto experimental, pues solo la experiencia garantiza conocimientos verdaderos.
Disertación sobre Descartes
René Descartes, filósofo y matemático francés del siglo XVII, es considerado el padre de la filosofía moderna. Su enfoque metodológico de la duda, plasmado en su obra Meditaciones metafísicas, se basa en la pregunta radical sobre todo lo que puede ser puesto en duda. Su célebre frase “Cogito, ergo sum” (“Pienso, luego existo”) sintetiza su visión de que la única certeza indudable es la existencia del pensamiento. A partir de esta certeza, Descartes construye su teoría sobre la existencia de Dios y la realidad del mundo exterior. El pensamiento de Descartes sigue siendo relevante en la actualidad, especialmente en áreas como la epistemología y la inteligencia artificial. Su énfasis en la razón y la duda metódica tiene eco en los debates contemporáneos sobre el conocimiento y la veracidad de la información, particularmente en una era donde la desinformación es un problema creciente. La idea de Descartes sobre el “cogito” se relaciona también con el desarrollo de la inteligencia artificial, ya que plantea interrogantes sobre la conciencia, el pensamiento y la diferenciación entre humanos y máquinas. Hoy en día, se sigue cuestionando si una máquina puede “pensar” o “ser consciente” de la misma manera que lo es el ser humano. Además, su dualismo, que distingue entre cuerpo y mente, influye en los estudios sobre neurociencia y psicología, donde se examinan las interacciones entre la mente humana y los procesos biológicos. De esta forma, el legado de Descartes continúa siendo una base crucial para comprender cuestiones filosóficas, científicas y tecnológicas de la actualidad.
Análisis de Textos
Texto A: El Proceso de las Meditaciones
Explica el proceso y necesidad de las meditaciones dados para deducción o fundamento firme. Sus meditaciones son una investigación sobre la verdad por la que va a dudar de todo para encontrar una verdad certera. Duda de los sentidos porque son engañosos. Duda de los razonamientos porque es posible equivocarse. Duda del mundo porque a veces es complicado diferenciar entre vigilia y sueño. Al dudar, se da cuenta de que existe (alma) y llega a la primera verdad: “Pienso, luego existo”, que es indubitable y se convierte en el principio de su filosofía. La problemática de este texto sería la epistemología o teoría del conocimiento. El problema filosófico es explicar cómo ha llegado a establecer el primer principio de su filosofía, “el cogito”.
Texto B: Examen del ‘Cogito’
Examina el cógito y de qué cosa deduce que es una sustancia pensante. La sustancia pensante no necesita de nada para existir y es totalmente distinta del cuerpo y más fácil de conocer que él. Examina después cuáles son los que hacen a una proposición verdadera a partir de lo que hace verdadera al cógito. La primera verdad es una proposición clara y distinta, por lo que decide establecer la claridad y distinción como regla para determinar la verdad de una proposición. Las dos conclusiones a las que llega examinando el cógito. Problema del conocimiento o epistemología.