Crisis y Cambios Estructurales en las Economías Capitalistas Desarrolladas (1970-2000)
La Crisis de los Años 70
A partir de los años 70, se observa un crecimiento económico mucho menor que en el período 1930-1973, tanto del PIB per cápita como de la producción. Los años 70 se caracterizan como un período de crisis económica debido a una serie de síntomas:
- Desaceleración del crecimiento conjunto de la OCDE.
- Fuerte aumento del desempleo.
- Inflación elevada.
- Déficit presupuestario que incrementa con rapidez la deuda pública.
Causas de la Crisis
- Agotamiento de los factores de crecimiento e innovaciones de la Segunda Revolución Tecnológica.
- Fin de la estabilidad en el sistema monetario internacional:
- Problemas en el sistema de Bretton Woods.
- Déficit de la cuenta de capital y de la cuenta corriente de Estados Unidos.
- Sobrevaloración del dólar.
- Suspensión de la convertibilidad del dólar en oro en 1971 (Nixon).
- Abandono del sistema de tipos de cambio fijos en 1973.
- Encarecimiento de las materias primas, principalmente el petróleo.
- Competencia de los países de nueva industrialización.
Cambios en las Políticas Económicas
La primera reacción ante la crisis fue la aplicación de políticas compensatorias, como el apoyo a sectores en dificultades y la adopción de políticas monetarias laxas. A partir de 1979, se optó por políticas de ajuste, que consistían en el abandono de las políticas keynesianas y su sustitución por políticas monetarias restrictivas. Los objetivos de estas políticas eran:
- Estabilidad de precios y equilibrio exterior.
- Estricto control de los agregados monetarios y del déficit del sector público.
- Menos Estado y más mercado.
1985-2000: Crecimiento Moderado e Inestable
A partir de 1983, se inicia la recuperación económica, impulsada por:
- Descenso del precio del petróleo.
- Reducción de los tipos de interés en Estados Unidos y depreciación del dólar.
Evolución del Resto de Regiones del Planeta
Crisis del Sistema Socialista y el Fin de la URSS
Los países socialistas experimentaron cambios radicales tras la crisis de los 70. Sus problemas económicos se acentuaron, obligándolos a cambiar el sistema. Durante los años 80, los problemas estructurales del sistema de planificación centralizada dieron lugar a tasas de crecimiento muy reducidas y al intento de reformas. En los 90, el fracaso de las reformas provocó el hundimiento del sistema comunista y su sustitución por modelos económicos y políticos similares a los de Europa Occidental. Estos problemas tenían un carácter estructural:
- Escasa capacidad de innovación tecnológica debido a los escasos incentivos. Solo se innovaba en las actividades prioritarias para el Estado (sector armamentístico, carrera espacial).
- La escasez de recursos provocó el fracaso de la agricultura, generando escasez de alimentos y la necesidad de importarlos de Occidente.
- Se beneficiaba a la industria pesada en detrimento de los bienes de consumo, lo que provocó escasez de estos últimos y bajos niveles de bienestar.
- Incremento del precio del petróleo soviético por mayores costes de explotación.
- Fuerte endeudamiento por la adquisición de tecnología occidental, con altos intereses y la apreciación del dólar.
- Disminución de las exportaciones y de los niveles de consumo, generando malestar social.
Las reformas posteriores consistieron en cambios tanto en la economía como en la política. Gorbachov fue el impulsor de estas reformas, pero no funcionaron. Además, el gasto se acentuó por la guerra de Afganistán, el terremoto de Armenia y el accidente nuclear de Chernóbil. Esto obligó a la URSS a gastar más y aumentar la emisión de moneda, generando inflación y escasez de productos básicos. A finales de 1989, la mayoría de los países comunistas habían acabado con el comunismo. Esto fue consentido por la URSS, que en 1991 desapareció.
El impacto del fin del comunismo fue nefasto, con un coste económico muy alto y una severa recesión económica. Las causas fueron:
- Brusca sustitución de la planificación por el mercado.
- Competencia exterior.
- Deficiente proceso de privatización de las propiedades públicas.
Además de la caída del PIB, hubo hiperinflación, un fuerte endeudamiento con el FMI y los países occidentales que derivó en la suspensión de pagos de la URSS en 1998 y en un empobrecimiento de la población, debido a la reducción del consumo, aumento del desempleo, descenso de la escolaridad y disminución de la esperanza de vida. El proceso de recuperación fue muy lento.
Las reformas más comunes en los países de Europa del Este fueron la estabilización de la moneda, la privatización, la reestructuración, la liberalización y la incorporación a la UE. Los países con más éxito se han visto impulsados por la instalación de empresas occidentales en su territorio, por la reorientación de su comercio exterior hacia la UE y por las ayudas de Estados Unidos y la UE.
El Despertar de Asia
Durante la segunda mitad del siglo XX, Asia creció por encima de la media mundial, aumentando su peso en el PIB mundial, especialmente a partir de 1973. Hasta 1990, el mayor crecimiento correspondió a Japón y a los dragones asiáticos (Corea del Sur, Taiwán, Hong Kong y Singapur). A estos países se sumaron a partir de los 70 Tailandia, Malasia y China, que lidera el crecimiento desde 1990. Los factores de este crecimiento son:
- Modernización de la agricultura.
- Importante desarrollo de actividades comerciales y financieras.
- Crecimiento del sector industrial.
- Costes laborales muy inferiores a los de los países desarrollados.
- Elevadas tasas de inversión de capital extranjero.
- Intervencionismo del Estado en la economía mediante la protección a las industrias nacientes, incentivos a la actividad exportadora y gasto en I+D.
En China, desde 1978, se da un proceso de apertura económica, pero manteniendo un sistema comunista.